11 trucos para eliminar el olor a pintura

Sin recurrir a productos costosos puedes quitar el olor a pintura, incluso desde antes de cambiar el tono de tus paredes. Descubre cómo hacerlo.

Para la mayoría de las personas, el olor a pintura resulta desagradable e irritante. De hecho, hay quienes experimentan síntomas de alergia debido a los compuestos orgánicos volátiles que pueden contener. Si bien unos brochazos renuevan y refrescan la imagen de las habitaciones, el olor que queda es bastante incómodo.

Y aunque esparcir ambientadores comerciales parece una opción para disimular esta situación, no suele ser suficiente para desaparecer el olor. Por el contrario, la combinación de fragancias puede ser peor. Así pues, lo mejor es probar otros trucos alternativos para minimizarlo. A continuación, los detallamos.

Consejos para evitar y eliminar el olor a pintura fresca

«Prevenir es mejor que lamentar»… ese viejo dicho cobra fuerza en cosas simples, por ejemplo, pintar una casa o un mueble. Si tomas las medidas pertinentes antes de comenzar la tarea, evitarás la incomodidad y los dolores de cabeza que provoca respirar el olor a pintura.

Antes de enumerar las formas ecológicas de desvanecerlo, te revelamos una clave básica para reducir los gases y trabajar en un ambiente agradable: elige una pintura cuya fórmula tenga bajos o ningún índice de compuestos orgánicos volátiles (COV).

Algunas precisan que son de poco olor, otras las fabrican con minerales, leche o plantas, siendo menos tóxicas. Las acrílicas cuestan un poco más, pero desprenden menos olor. Sin embargo, cuando el presupuesto es corto, vale la pena poner en marcha los siguientes consejos.

1. Prepara la pintura con dulce

Un error común es destapar la pintura y comenzar a usarla. Hace falta la preparación para que luego el olor no cause mareos, náuseas o ahogos, por mencionar algunos efectos. La recomendación es revolverla con un trozo de madera hasta que la percibas sin grumos.

Durante este proceso añade 2 cucharaditas de vainilla o azúcar por cada litro de pintura. El dulce reduce el olor.

2. Usa bicarbonato

Este remedio sirve en múltiples tareas del hogar. Espolvorear bicarbonato de sodio por la habitación neutraliza el aroma a pintura fresca. Transcurrida una hora pasa la aspiradora. Sucede que actúa sobre las superficies blandas en las que suele impregnarse el olor, por ejemplo en los muebles y las alfombras.

3. El agua se ‘come’ el olor a pintura

Se dice que diez litros de agua en varias cubetas ‘devoran’ el olor de una sala recién pintada. Ubícalas en el centro y en los rincones de la habitación para que cumpla su función en una noche o un poco más.

4. Apela al limón

El agua sola absorbe los COV y con rodajas de limón se desprende un aroma cítrico. En varios tazones, vierte agua del grifo y agrega limón rebanado, más un cuarto de taza de sal. Distribuye los envases en la habitación y déjalos toda la noche. A la mañana siguiente, no olvides tirar el contenido de los recipientes.

5. Calienta leche

Este es un truco parecido al del agua con limón. Lleva a la estufa una cantidad regular de leche líquida y calienta hasta que esté tibia; luego divídela en tres recipientes que colocarás en la estancia recién pintada. Sus componentes, una vez activados, se superponen al olor de pintura.

6. Neutraliza con vinagre

El vinagre quita manchas, desinfecta, limpia y también extingue fetidez, gracias a su composición ácida. Su efectividad solo tiene un punto en contra: tarda algunos días en quitar el olor fuerte a pintura fresca.

El truco consiste en distribuir vinagre blanco (puro o con agua) en varios envases de boca ancha y disponerlos en las zonas pintadas, con las ventanas abiertas, para que aireen. Si en un día no se disipa el olor, cambias el vinagre hasta que no lo percibas.

¿Un dato extra? Se dice que el vinagre blanco casero actúa más rápido que el culinario, por su contenido superior de ácido acético.

7. Carbón o café triturado

El carbón trozado en moldes de aluminio absorbe el olor. Al ser un material tratado a altas temperaturas, es más poroso y cuenta con suficientes espacios para eliminar el olor. Puedes sustituirlo por café molido o por la borra; ambos productos se desechan una vez utilizados.

8. Intenta con diatomita

Otro de los nombres con que se conoce este polvo blanco es ‘tierra de diatomeas’ y sirve para absorber olores y humedad, debido a su composición de sílice. Compra las de ferretería y vacíalas en latas de café o platos desechables de aluminio que pondrás en la habitación pintada.

9. Cocina un caramelo

El aroma a dulce es perfecto para suavizar los gases de las pinturas. Cocina un caramelo tal cual para un flan: revuelve 3 cucharadas de azúcar en una olla con agua a fuego moderado. Su fragancia camuflará el otro olor. Eso sí, cuidado con quemarlo, la idea es eliminar lo que huele feo.

10. Capas cebolla

De preferencia blancas o amarillas, las cebollas picadas por la mitad y ubicadas en los extremos de la estancia, anularán el olor. De igual forma, puedes sacar rodajas y remojarlas en agua fría por un día.

11. Hierbas, infusiones e inciensos

Funcionan como un complemento a los trucos anteriores. El aroma intenso de las hierbas y de los inciensos, junto con cualquiera de los consejos explicados arriba, sacarán el olor a pintura.

Menta, salvia, eucalipto, lavanda, romero, pino y otras fragancias impregnan las estancias. Los difusores de esencias son óptimos en este objetivo. En el caso de las infusiones, espera a que hiervan durante 10 minutos y posiciónalas cerca de la parte remodelada.

Precaución ante el olor a pintura

Así como hay sugerencias naturales para que la pintura fresca no te ahogue con su olor, los siguientes puntos harán menos incómodo estar en una sala terminada de redecorar:

• Usar mascarilla, sobre todo si sufres de alergias. De ser necesario, por tu salud, paga a alguien que pinte en tu lugar.
• Airear, ya sea abriendo ventanas o con ventiladores. La idea es que circule el aire y arrastre el olor en tanto seca la pintura.
• Aleja a los niños y mascotas mientras pintas para que no inhalen vapores. También en el lapso que están los remedios como la cebolla, el carbón, etcétera; así, evitas accidentes.
• Deja que seque antes de la segunda capa para que la humedad no retenga humos ni emita gases tóxicos. Su inhalación es una de las causas comunes de intoxicaciones en el hogar.
• Pinta en otoño o cuando la humedad o el frío no demoren el secado. Revisa el pronóstico del tiempo, así las cortinas, las alfombras y otros materiales blandos no se empaparán con el olor a pintura.

No olvides agendar el día en que pintarás. La planificación es básica, porque evitas contratiempos y puedes prepararte para que el proceso sea seguro.