2 sopas con verduras que debes probar

Las sopas con verduras se definen como un alimento líquido, claro y no muy espeso. Los caldos se obtiene de la cocción en agua de una o varias verduras, proteína animal como carne de ternera, pollo o productos del mar, condimentos y especias.
Las sopas con verduras pueden ayudarnos a consumir la cantidad diaria recomendada, sobre todo, si no acostumbras a comer suficiente fruta y verdura.
Verás que las posibilidades son infinitas y tendrás la oportunidad de experimentar sabores hasta encontrar los que te gustan.

¿Por qué debemos incluir las sopas con verduras en nuestro menú diario?

Las sopas con verduras son parte esencial de una dieta sana y equilibrada. Debido a que el agua es el ingrediente principal, este alimento ayuda a mantener una hidratación adecuada a nivel corporal.
Entre los beneficios que obtenemos al consumir sopas con verduras destacan:

• Es una forma sencilla de incluir las cinco raciones diarias de verduras y frutas recomendadas. Además, permite un gran número de combinaciones posibles para convertir la sopa en un plato diferente cada día.
• Según la variedad y cantidad de verduras que se añada en la sopa, esta puede proporcionar una cantidad significativa de vitaminas y minerales.
  Las vitaminas más comunes en las verduras son la vitamina E, vitamina B6 y vitamina A.

• Su proceso de cocción las hace fáciles de digerir, por lo que son aptas para niños o adultos que tienen problemas digestivos o para masticar.
• Si tomamos las sopas con verduras antes de los otros alimentos, nos sentiremos saciados y comeremos menos, lo que limita la ingesta calórica.

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1. Sopa de cebollas

La primera de las sopas con verduras que debes probar tiene como base los dos tipos de cebolla, pero se complementa con otros ingredientes.
Es perfecta para lidiar con los síntomas asociados a la gripe común en invierno o para cuando te sientes débil. 

Ingredientes

• 2 cucharadas de aceite de oliva (32 g)
• Verduras (¼ de cebolla blanca mediana, ¼ de cebolla morada mediana, 1 calabacín, 1 calabaza, 1 zanahoria, 1 taza de espinacas)
• Hierbas (2 cebollines, 2 ramas de apio, 2 ramitas de cilantro, 2 ramitas de perejil, 1 cucharadita de hojas de hierbabuena)
• 2 litros de agua
• Sal, pimienta y orégano (al gusto)

Preparación

• Pica todos las verdurass en cubos pequeños. Las hierbas y espinacas puedes trocearlas del tamaño que quieras.
• En una olla pon a calentar dos cucharadas de aceite de oliva y sofríe la cebolla un par de minutos.
• Agrega la zanahoria, el apio y el cebollín.
• Cuando estén un poco más blanditos, añade al sofrito la calabaza y el calabacín.
• Rehoga, y añade los dos litros de agua y condimenta con sal, pimienta y orégano.
• Tapa la olla y déjalo cocer unos 20 minutos.
• Prueba que la calabaza, calabacín y zanahoria estén listos. Entonces, agrega el cilantro, el perejil, la hierbabuena y las espinacas.
• Revisa que la sopa esté bien sazonada y añade sal y pimienta hasta que quede a tu gusto.
• Retira del fuego y sirve.
• Si lo deseas, puedes agregarle queso parmesano. Le da un toque de sabor bastante rico.

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2. Sopa de pimientos

Ingredientes

• Aceite de oliva
• Verduras (1 zanahoria, 1 cebolla mediana, 2 dientes de ajo, 3 pimientos [verde, rojo y amarillo], 1 puerro, 1 calabacín, 70 g de guisantes)
• Sal y pimienta negra molida (al gusto)
• Agua

Preparación

• Lava todas las verduras y córtalas en pequeños cubos.
• Pon a calentar un poco de aceite de oliva en una olla de buen tamaño y haz un sofrito con la cebolla y el ajo.
• A continuación, añade toda la verdura troceada y los guisantes.
• Agrega un poco de sal y remueve para asegurarte de que todos los ingredientes se van cocinando y no se pegan.
• Cuando esté todo bien cocinado, aparta la olla del fuego.
• Cubre todo con agua y vuelve a poner a calentar la olla a fuego intenso, hasta que el agua empiece a hervir.
• Cuando suelte el primer hervor, baja la intensidad del fuego a la mitad.
• Cuece hasta que las verduras estén tiernas y el caldo haya tomado todos los sabores.
  Esto puede llevar entre 30 y 40 minutos, aproximadamente, dependiendo del tamaño de las verduras y la temperatura de cocción.
• Una vez que la sopa esté lista, comprueba la sal y la pimienta, y corrige si hace falta.

Ahora que ya conoces las ventajas de consumir sopas con verduuras estamos seguros de que querrás incluirlas en tu dieta.
Prueba con estas dos opciones y e inventa las tuyas propias con los vegetales que te gusten.