2 tipos de respiración que quitan el cansancio, el estrés y el dolor de cabeza en 5 minutos
Revisado y aprobado por la médica Karla Henríquez
Las múltiples ocupaciones de la jornada y la continua exposición al estrés pueden hacer que la salud se resienta de diversas maneras y nos haga sentir cansancio y “achaques”. Si bien es normal padecer estos últimos ocasionalmente, cuando persisten, hay que prestarles atención y brindarles la atención adecuada de la mano del médico.
Seguir las recomendaciones del profesional y mantener un estilo de vida saludable contribuye de forma significativa a prevenir todo tipo de dificultades, pero también es bueno conocer otras alternativas para aumentar el bienestar.
Por ejemplo, hay algunos ejercicios físicos y de respiración que contribuyen a sanar tanto el cuerpo como la mente. Entre ellos, nos encontramos con una terapia conocida como pranayama o ‘respiración consciente’ que, en cuestión de minutos, nos proporciona sensación de alivio.
A continuación te contamos de qué se trata y cómo practicarla en casa con dos interesantes métodos.
¿Qué es pranayama y cuáles son sus beneficios?
La pranayama es una de las prácticas principales del yoga. Se conoce como “la ciencia del control de la respiración”, o más exactamente, la manipulación del prana o ‘energía vital’.
Prana es la palabra sánscrita para decir ‘respiración, vida’ y ‘energía cósmica’; por su parte, yama quiere decir ‘restricción’.
Su práctica tiene beneficios físicos, mentales y espirituales, entre los que se incluyen la vitalidad, la capacidad para pensar con claridad y los estados superiores de la consciencia.
El prana también se define como ‘una energía universal que tiene la capacidad de transformar y conformar los aspectos más sutiles de cada persona’. Aunque circula a través de cada uno de modo energético, también se manifiesta de forma física mediante la respiración.
Si bien algunos lo ignoran, al inhalar y exhalar de forma correcta, dotamos al organismo de una fuente importante de energía. A su vez, esta tiene beneficios sobre la regeneración del cuerpo, su rendimiento físico y procesos como el digestivo y de crecimiento.
Y es que una óptima respiración permite adquirir el oxígeno necesario para la sangre y cada una de las células. Por esta misma razón, el enfoque de esta práctica controla el estrés, disminuye la fatiga y alivia síntomas de tensión como el dolor muscular y de cabeza.
Lo más interesante es que, al parecer, su práctica regular fortalece el cerebro y mejora facultades mentales como la memoria, el intelecto, la razón y la concentración.
¿Cómo practicar estos tipos de respiración?
Para llevar a cabo esta sencilla terapia de respiración en pro del bienestar debes buscar un lugar tranquilo, alejado de ruidos molestos o distractores. Elige la mano con que te sientas más cómoda y, posteriormente, cierra los dedos índice y corazón hacia la palma para formar una especie de pinza.
1. Respiración izquierda
La respiración izquierda se recomienda para calmar los dolores físicos como el de cabeza, el muscular y articular.
- Bloquea con el dedo pulgar de la mano derecha (o con el anular y meñique de la izquierda si eres zurdo) tu fosa nasal derecha.
- A continuación, respira por la fosa nasal izquierda y trata de que sea lo más profundo posible.
- Tapa ambas fosas nasales y trata de contener la respiración durante unos 3 o 5 segundos.
- Después, libera todo el aire de forma lenta y pausada. Y vuelve a comenzar.
- Realiza el ejercicio unas cinco veces, tomando descansos de, por lo menos, 30 segundos para evitar mareos.
- Puedes hacerlo varias veces al día, o bien, cada vez que te sientas con tensión física. ¡Es liberador!
2. Respiración derecha
La respiración derecha está diseñada para combatir el estrés, la sensación de cansancio y las dificultades de concentración.
De hecho, su práctica puede ayudar a recuperar el calor cuando aumenta la sensación de frío.
- Pon el dedo meñique y anular de tu mano derecha en la fosa nasal izquierda para bloquear el aire.
- Luego, respira por la fosa nasal derecha y relaja.
- Contén la respiración cinco segundos, tapando ambas fosas, y repite el ejercicio cinco veces.
- Recuerda liberar el aire en forma pausa y evita hacerlo demasiado seguidos para no sentir efectos indeseados.
¿Aún no te beneficias con estos tipos de respiración? Anímate a practicarlos en casa y descubre que tienen muchos beneficios para tu salud física y mental.
Una correcta respiración mejora el transporte del oxígeno, aumenta la capacidad para reflexionar y nos ayuda a relajarnos. Aunque no seamos muy conscientes de su importancia, respirar es un gran vínculo para canalizar nuestras energías y mantenernos saludables en general.
Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.