3 soluciones de origen natural para limpiar el ombligo
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¿Sueles limpiar bien el ombligo después de la ducha? Esta es una parte del cuerpo que solemos pasar por alto, aunque allí suele acumularse polvo y diversas partículas.
Su higiene correcta puede evitar diferentes infecciones. Claro, hay que proceder con cuidado, evitando que se irrite. Por este motivo, a continuación describiermos cómo limpiar el ombligo de manera natural.
¿Por qué limpiar el ombligo?
La suciedad acumulada en la zona del ombligo puede dar lugar a picores, enrojecimiento y un exceso de sequedad. ¿La razón? Debido a la falta de higiene, pueden haber proliferado bacterias, así como hongos, y generarse infecciones que pueden cursar, también, con mal olor. Para evitar esto, debemos limpiar el ombligo todos los días.
Y es que en el ombligo tiende a acumularse humedad y suciedad, lo que hace que se convierta en un caldo de cultivo ideal para las bacterias. Esto puede derivar en una onfalitis que, tal y como señala el artículo Uracosinus: una causa poco frecuente de onfalitis recurrente en adulto. Esta es una infección que suele relacionarse, precisamente, con una higiene deficiente del ombligo.
Pero, ¿qué es lo que puede provocar que el ombligo se ensucie? Algunos tejidos de las prendas que nos ponemos, la arena de la playa, las células muertas que se desprenden de forma natural de la piel o la grasa que produce el cuerpo. Por ello, tras darnos una ducha o un baño debemos limpiar ombligo, velando para que la zona quede completamente seco. A continuación veremos cómo.
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Cómo limpiar el ombligo de manera natural
1. Árbol de té
Una de las propiedades del aceite de árbol de té es su capacidad antifúngica. Esto lo convierte en un buen aliado para tratar de prevenir las infecciones y los hongos a los que podemos estar expuestos por no limpiar el ombligo de la manera adecuada.
La mejor forma de utilizarlo es con un bastoncillo, en el que pondremos una pequeña gota de aceite de árbol de té. Después, lo pasaremos con suavidad para desinfectar y limpiar el ombligo. Debemos tener cuidado en no excedernos con la cantidad de aceite, ya que puede irritar la delicada piel de esa zona.
2. Alcohol de romero
El alcohol de romero es un remedio de origen natural muy importante si sufrimos onfalitis. El mal olor en el ombligo puede ser bastante desagradable y el alcohol de romero nos ayudará a limpiar la zona, a la vez que deja un buen aroma.
Esto es debido a las propiedades del romero que lo convierten en un complemento indispensable para estos casos. Además, no daña la piel. Para aplicarlo, también utilizaremos un bastoncillo. Es recomendable que, previamente, hayamos limpiado un poco el ombligo, lavándolo con jabón, y lo hayamos secado muy bien.
3. Aceite de coco
El último de los recursos naturales que vamos a emplear para limpiar el ombligo es el aceite de coco. Sin embargo, esta solución debemos utilizarla cuando lo hayamos higienizado, ya sea con aceite de árbol de té o con el alcohol de romero.
El aceite de coco es muy hidratante y, de hecho, muchas personas lo utilizan diariamente. También tiene propiedades que permiten reducir las bacterias que han podido proliferar en el ombligo. Por eso, usarlo tras haber limpiado la zona con las opciones anteriores es una buena idea. Así el ombligo estará libre de posibles infecciones y otros problemas.
Presta atención a todas las partes del cuerpo
Hasta este momento, es muy posible que no le hayas prestado atención al aseo de todas las partes de tu cuerpo. A partir de ahora queremos insistir en la importancia que tiene limpiar bien el ombligo y secarlo después de salir de la ducha.
Igualmente, si alguna vez has tenido problemas de irritación, picor o enrojecimiento en esta zona, te animamos a que, al menos una vez a la semana, utilices las soluciones que te hemos propuesto. Así, evitarás las infecciones que pueden afectar a esta zona del cuerpo.
En el caso de que ya tengas algún síntoma que indique que algo no va bien, no dudes en acudir a tu médico, quien te recomendará una crema adecuada para resolver la infección.
Tras esto, sería conveniente que tuvieses en cuenta los consejos expuestos para prevenir que otra vez te suceda lo mismo. ¿Sueles limpiar el ombligo? ¿Cómo lo haces?
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