¿Cómo aumentar el volumen de semen?

Revisado y aprobado por el médico José Gerardo Rosciano Paganelli

Escrito por Carolina Betancourth

Última actualización: 01 noviembre, 2024

Si te has preguntado si es posible aumentar el volumen de semen, la respuesta es sí. Lograr una mayor eyaculación puede contribuir en gran manera a tu confianza sexual. Existen estrategias efectivas para lograrlo, como llevar un estilo de vida saludable, dejar de fumar, bajar de peso, hacer ejercicio y comer ciertos alimentos.

Un volumen seminal inferior a lo normal, que oscila entre 1.5 y 6 mililitros, se denomina hipospermia y puede ser motivo de preocupación. Si se produce menos de esa cantidad, pueden influir factores como la edad, el tiempo de abstinencia, problemas de salud como diabetes, obesidad o incluso eyaculación retrógrada.

Aunque esto no supone esterilidad —ya que esto no siempre se traduce en una reducción de espermatozoides—, puede ser indicativo de otros problemas de salud. Implementar las siguientes medidas puede ayudarte, pero si observas una disminución repentina o continua, lo ideal es acudir con un profesional.

1. Hidratarse con agua

La eyaculación está compuesta en su gran mayoría por agua, por lo que es primordial consumir suficiente agua todos los días y evitar los refrescos o bebidas azucaradas. De hecho, una mayor ingesta de este tipo de líquidos con azúcares afecta la función de los testículos y se asocia con un menor volumen de líquido al eyacular.

Lo ideal es que los hombres consuman alrededor de 3,7 litros de agua al día.

2. Manejar el estrés

El impacto del estrés en la vida sexual se observa de distintas formas. Entre ellas, no solo reduce el deseo de practicar sexo, sino que puede alterar la actividad de las hormonas. Por eso, los altos niveles de estrés están asociados con una menor calidad de semen, tanto en cantidad como en cuanto a la concentración de los espermatozoides.

Por tanto, hay que combatir esta tensión en primer lugar. Algunas actividades que se recomiendan para manejar el estrés son hacer ejercicio o yoga, meditar o reunirse con amigos y familiares. También es recomendable buscar ayuda terapéutica.

3. Consumir alimentos que ayudan a producir más esperma y semen

La alimentación influye en el esperma. En este sentido, si un hombre lleva una dieta poco saludable, es posible que no eyacule tanto como le gustaría. Por eso, se recomienda evitar la ingesta excesiva de carne roja procesada, lácteos altos en grasas, grasas saturadas y ácidos grasos trans, azúcares y snacks, porque pueden tener un efecto negativo en su producción y la fertilidad.

Por otra parte, es recomendable mejorar los hábitos alimenticios, según el consejo del médico o el nutricionista. En líneas generales, estos son algunos de los alimentos para mejorar la calidad del esperma y el volumen seminal:

• Mariscos.
• Frutas y verduras en general.
• Frutos secos, como nueces, almendras y avellanas.
• Pescados, como corvina, lenguado, merluza, salmón y sardinas.
• Cereales integrales, como trigo sarraceno, avena, arroz integral, cebada integral, quinoa y mijo.
• Lácteos bajos en grasas, como leche desnatada, yogur descremado y quesos bajos en grasas.

4. Tomar suplementos

Según un estudio de la revista Nutrients, algunos suplementos dietéticos podrían mejorar la calidad del líquido seminal producido y la fertilidad. Por ende, en caso de que el médico así lo autorice, se podría considerar la inclusión de suplementos dietarios que contengan los siguientes nutrientes:

• Zinc
• Omega 3
• Vitamina C
• Coenzima Q10
• Ácido fólico (vitamina B9)
• Suplementos de calcio y vitamina D
• Aminoácidos (L-carnitina, L-citrulina y L-arginina)

5. Evitar el cigarrillo

El consumo de cigarrillo acarrea muchos efectos negativos en la salud. La nicotina que contiene el tabaco afecta el funcionamiento de las glándulas sexuales, que controlan la cantidad del semen.

En consecuencia, mientras más cigarrillos se fuman por día, peor es su volumen, la morfología de los espermatozoides, su motilidad y concentración. En conclusión, es importante reducir este hábito y, en lo posible, dejar de fumar.

6. Hacer ejercicio

El sedentarismo afecta de múltiples formas la salud de las personas, e incluso puede disminuir la producción seminal. De hecho, varios estudios sugieren que hacer actividad física de baja o media intensidad ayuda a aumentar el volumen de este fluido, tal como recopila la revisión de The Wold Journal of Men’s Health.

Además, mejora el número, la morfología y la motilidad de los espermatozoides. Sin embargo, cabe destacar que, cuando el ejercicio físico es extenuante o intenso, podría tener el efecto contrario. Por lo tanto, es recomendable realizar actividades como caminatas, ciclismo o danza durante, al menos, 150 minutos semanales.

7. Bajar de peso

El sobrepeso y la obesidad están relacionados con una eyaculación escasa. Es decir, que un índice de masa corporal alto y un aumento de la circunferencia de la cintura se asocian de forma negativa con la cantidad de líquido seminal, la concentración y el número total de espermatozoides.

Es recomendable adoptar estrategias para bajar de peso, como hacer ejercicio, tener una dieta adecuada y hábitos saludables. En lo posible, con la orientación de un nutricionista.

8. Evitar beber alcohol en exceso

La relación entre el alcohol y la fertilidad se estudia desde hace muchos años. Tener dependencia a las bebidas alcohólicas podría afectar el volumen del líquido seminal, los niveles de testosterona y la cantidad de esperma. Por esta razón, el consumo crónico y abusivo puede tener consecuencias en la calidad de la eyaculación.

9. Dormir lo suficiente

La duración del sueño y su calidad pueden influir en la calidad del semen y del esperma. Los hombres que duermen menos de seis horas diarias y aquellos que lo hacen más de nueve horas tienen una menor cifra y motilidad de espermatozoides, además de menos cantidad de líquido seminal.

Lo ideal es dormir más de siete horas diarias y la mejor hora para ir a dormir es antes de las 11 de la noche.

10. Usar ropa interior holgada

Usar calzoncillos anchos, como un bóxer, puede mejorar la comodidad y, además, contribuir en la salud sexual. En este sentido, el uso de este tipo de ropa interior se asocia con mayor cantidad de líquido seminal. Además, se relaciona con menos anomalías en los espermatozoides. Evita la ropa ajustada en la zona testicular lo máximo que puedas.

11. Tener abstinencia sexual

Tal vez sepas que, cuando se solicitan muestras de semen para analizar, sugieren tener abstinencia sexual de dos a siete días. Esto se debe a que puede variar la cantidad eyaculada y la concentración de esperma. De hecho, cuanto más eyaculaciones tengas, menor será su volumen. Por el contrario, mientras más días de abstinencia hagas, su volumen puede aumentar de forma significativa.

12. Practicar edging

El edging es una práctica que consiste en llegar al límite del orgasmo, pero retrasarlo mediante distintas técnicas, para aumentar el placer. Como la abstinencia sexual puede incrementar la eyaculación, su ejercitación prolongada podría cumplir una función similar.

En este sentido, puedes probar aguantar el orgasmo lo más que puedas para que, cuando eyacules, sea en mayor cantidad. Intenta pensar en otra cosa durante el acto sexual o tonificar la zona pélvica con los ejercicios de Kegel, para tener mayor control de la eyaculación y dilatar el momento en que suceda.

¿Cuándo ir a un médico?

Eyacular poco no tiene por qué significar algo malo ni relacionarse con infertilidad. Sin embargo, si tienes preocupación al respecto, la cantidad ha disminuido de repente o notas otros síntomas que la acompañan, tales como cambios en el color o la textura, es aconsejable asistir con un médico o urólogo para realizar un espermiograma.

Con ese estudio, se analiza el movimiento, el número o la forma de los espermatozoides, factores que sí pueden influir en la fertilidad. Además, se puede detectar si existe una causa o enfermedad que ocasione poco fluido, como testosterona baja, diabetes o eyaculación retrógrada.

En tal caso, el profesional puede sugerir alguna medicación, ya sea gonadotropinas en caso de infertilidad o antidiabéticos en caso de padecer diabetes, o terapia de testosterona, entre otras. También, puede indicar alguna terapia que complemente las recomendaciones dadas aquí.

Un estilo de vida sano ayuda

Es normal que muchos hombres se sientan inquietos por una poca cantidad de líquido seminal. Pero es importante recordar que puede variar según la persona y no quiere decir que exista un problema de salud.

Si esta situación te preocupa, adoptar buenos hábitos de vida y aplicar herramientas para gestionar el estrés puede contribuir a una buena salud en general, incluida la salud testicular. Si observas una disminución repentina del volumen, no dudes en consultar con un médico.

De todas maneras, ten presente que una eyaculación escasa no disminuye tu masculinidad ni afecta el placer de tu pareja. Lo más valioso en una relación íntima es el vínculo y el disfrute compartido, más allá de la cantidad de líquido al eyacular.