Cómo calmar a un bebé que llora sin parar

Las lágrimas de un niño pueden tener varios significados. Y, aunque algunas veces, resulta difícil entender cuál es la causa, es importante que los padres traten de comprender qué puede estar pasando y cuáles son las necesidades del bebé. De esta manera será menos complicado calmar su llanto.

Si bien oír llorar tu bebé puede ser muy estresante, debes tener en cuenta que es la única manera en que tu pequeño  puede expresar lo que siente. Por eso, antes de perder la calma, lo mejor es respirar profundo y dejar que la intuición haga su parte. En este artículo te contamos las posibles razones de su lloriqueo y qué podrías hacer para calmarlo. ¡Toma nota!

Razones por las que un bebé llora sin parar

El llanto es la manera como tu bebé se comunica y lo hará con mucha frecuencia, sobre todo en sus primeros meses de vida. Y es que llegar al mundo después de pasar 9 meses en la comidad de tu barriga no debe ser para nada fácil.

Según una publicación de Kids Health, es normal que un recién nacido llore alrededor de unas 3 horas al día durante las primeras 6 semanas. Por ello, es importante aprender a reconocer qué está pasando en su diminuto cuerpo y qué le puede generar esas lágrimas, para, así, atenderlo lo más pronto posible.

La buena noticia es que, con el tiempo, aprenderás a identificar las causas y, por lo general, una vez se atienda su necesidad, el pequeño volverá a la calma. A continuación, mencionamos cuáles son las causas más comunes que pueden generar incomodidad y lágrimas en el bebé.

Necesita comer

Alimentarse e hidratarse son acciones primordiales del ser humano. Un bebé, al no poder hacerlo por su cuenta, llorará cuando sienta esta necesidad. Así, hasta que sus padres no entiendan su deseo de comer y éste sea atendido, no se calmará.

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Tiene sueño

Los ruidos y la luz son elementos que interrumpen el buen sueño. Si dejas que tu bebé intente descansar en un espacio incómodo, no podrá detener su llanto hasta que esté en un lugar más tranquilo donde pueda conciliar el sueño. En ese caso, lo mejor es que lo mantengas acurrucado en tus brazos hasta que se duerma.

Dolores o cólicos

En los peores casos, el llanto puede ser fruto de un dolor. Los bebés son propensos a tener cólicos, alergias y demás malestares desde pequeños. Por ello,  lo mejor es que tengan un chequeo de salud periódicamente. Si el llanto se debe a algún tipo de molestia, revisa qué le puede ocurrir y evalúa si la solución la tienes en tu hogar o en un centro médico.

¿Qué hacer para calmar a un bebé que llora?

El llanto de un recién nacido es tan agotador que puede causar estrés a los padres. Si buscas cómo calmar a un bebé, es necesario que respires profundo y trates de relajarte. De lo contrario, podrás empeorar la situación.

Un poco de cariño calma a cualquier persona. Por eso, la mejor respuesta para remediar esta situación es con gestos de cariño y amor. Algunos ejemplos son los masajes, cuando tu hijo tiene cólicos. También, acariciar su cabello o hacerle cosquillas podrá hacer que veas más sonrisas y menos lágrimas en tu pequeño.

Por otro lado, puedes intentar con alguna canción que le guste. Cada vez que notes lágrimas en las mejillas de tu hijo, prueba cantarle una de sus canciones favoritas para dormir y a modo de juego. Así, se sentirá más seguro y amado por la persona que lo acompaña.

Además de estas opciones, un artículo de National Health Service sugiere poner en práctica los siguientes consejos para consolar y hacer sentir mejor a tu pequeño:

• Si estás amamantando, ofrécelo pecho.
• Poner ruido blanco para evitar que algunos sonidos lo inquieten.
• Usar alguna manta o peluche de apego para que se sienta seguro.
• Dar un paseo en el coche.
• Probar con un baño tibio.

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¿Por qué es importante saber cómo calmar a un bebé?

La salud de una persona se puede ver afectada por sus emociones. En el caso de un bebé, él o ella solo puede expresar alguna molestia o tristeza a través del llanto. No ser atendido podría hacer que su molestia aumente y el momento sea aún más estresante.
Al saber cómo calmar a un bebé, podrás tener una mejor relación con tu pequeño. Así, lo atenderás de forma más precisa y eficaz, creando un vínculo de confianza. Además, evitarás los momentos de angustia que te puedan causar sus lágrimas.

No hay nada que alegre más a un padre que ver la sonrisa de su hijo. Si aprendes cómo calmar a tu bebé, esta práctica será una de las razones para verlo sonreír más seguido. Por eso, háblale con amor, jueguen juntos, dedícale tiempo. Eso los ayudará a tener un lazo irrompible.

Cómo ves, aprender a calmar a un bebé puede parecer dificultoso, sobre todo para los padres primerizos. Sin embargo, te podrás ir dando cuenta con el tiempo de que es parte de la experiencia. Con paciencia y amor irás conociendo cómo reconocer las necesidades de tu hijo. ¡Confía en tu intuición!

Por último, estos consejos pueden ayudar a cualquier persona que está atravesando la maternidad o paternidad. Coméntale a esos conocidos la importancia de comprender a su bebé y hacerlo feliz, para que compartan mejores momentos juntos sin muchas lágrimas. Recuerda que si el llanto es incontrolable, lo mejor es consultar con el pediatra.