12 comportamientos rudos que debes evitar en el gimnasio
El gimnasio es un lugar donde las personas buscan mejorar su salud y obtener bienestar, a través del ejercicio físico. Sin embargo, a pesar de ser un espacio dedicado al entrenamiento, a menudo existen actitudes o tratos de nuestra parte, o de otros usuarios, que pueden ser considerados rudos o poco amigables.
En este artículo exploraremos algunos de estos comportamientos y proporcionaremos consejos sobre cómo ser un miembro respetuoso y respetado en el gimnasio.
1. No tomar una ducha antes de entrenar
El gimnasio es un espacio donde vamos a sudar y es normal que todos esperemos tomar un baño después, pero es importante entender que también es necesario tomar una ducha antes de entrenar. La higiene previa al ejercicio evita que se concentren malos olores y bacterias en tu ropa y en los equipos.
2. No limpiar los equipos después de usarlos
Una de las quejas más comunes en los gimnasios es la falta de limpieza e higiene en los aparatos. El sudor y la suciedad pueden acumularse con rapidez, creando un ambiente poco higiénico para otros usuarios.
Para evitar esto, es fundamental utilizar una toalla y desinfectante para limpiar cualquier máquina o herramienta después de que la utilices. Deja el equipo en las mismas condiciones en las que te gustaría encontrarlo.
3. Ocupar máquinas sin usarlas
Sé consciente del tiempo que pasas en una máquina del gimnasio. No es raro ver a personas ocupando una caminadora o pesa mientras descansan o usan sus teléfonos durante largos períodos.
Esto puede ser frustrante para quienes están esperando para entrenar. Trata de ser eficiente con tu tiempo y cede el equipo cuando no lo estés empleando de manera activa.
4. Hacer ruido excesivo
Gruñir o hacer bulla al levantar pesas puede ser molesto para otros miembros del gimnasio. Si bien un cierto nivel de esfuerzo es comprensible, trata de mantener el ruido al mínimo y evita los gritos innecesarios. Recuerda que es un lugar compartido donde todos merecen un ambiente tranquilo.
5. Tomarse y tomar fotografías sin permiso
Hoy en día, es común ver a personas tomando fotografías a otras personas o haciéndose selfies en el gimnasio. Sin embargo, debes ser consciente de la privacidad y el consentimiento de los demás. Evita tomar fotos de otros miembros sin su permiso, ya que puede ser invasivo y hacer que los demás se sientan incómodos.
También debes evitar tomarte fotos si estás en una máquina o estación de entrenamiento, puesto que retrasas las rutinas de tus compañeros.
6. No compartir el espacio
El gimnasio es un sitio concurrido y compartir el espacio es esencial. No bloquees áreas de entrenamiento o bancos con tus pertenencias personales. Además, si estás utilizando pesas o barras, asegúrate de no invadir más espacio del necesario.
7. Dar consejos no solicitados
Aunque es natural querer ayudar a otros, dar consejos no solicitados en el gimnasio puede ser molesto. No todos tienen el mismo nivel de experiencia ni los mismos objetivos de entrenamiento. Si alguien te pide un consejo, siéntete libre de compartir tus conocimientos de manera amable y respetuosa, pero evita ofrecer sugerencias no deseadas.
8. No respetar el uso de auriculares
La música puede ser una fuente de motivación para muchas personas en el gimnasio y los auriculares son una herramienta común para disfrutarla. Escuchar música sin ellos puede ser incómodo para el resto de usuarios; en especial, si lo haces con un volumen alto.
La mayoría de personas que los usan esperan no ser molestadas ni desconcentradas. En ese sentido, se debe evitar interrumpir la música de otros con conversaciones o preguntas innecesarias.
9. Llegar tarde a las clases o sesiones programadas
Si participas en clases grupales es fundamental llegar a tiempo. Arribar tarde puede interrumpir la dinámica del entrenamiento y molestar a los demás participantes. Planifica tu tiempo para que puedas estar listo y presente antes de que comience la sesión.
10. No recoger las herramientas después de usarlas
Después de utilizar pesas libres, mancuernas, cuerdas u otros equipos, asegúrate de devolverlos a su lugar correspondiente. Dejarlos tirados por el suelo puede ser peligroso y molesto para otros. Mantén el área ordenada y segura.
11. Ignorar las normas de vestimenta
La mayoría de los gimnasios tienen normas de vestimenta que incluyen el uso de calzado y ropa especial para entrenar. Ignorar estas normas es irrespetuoso hacia el personal del gimnasio y los demás. Asegúrate de vestirte de manera adecuada para evitar problemas innecesarios.
12. Ir a entrenar bajo efectos de alcohol u otras sustancias
Es importante entender que el gimnasio es un espacio de trabajo para nuestro cuerpo y mente, por lo tanto, es necesaria la seriedad y el respeto. Hacer ejercicio con máquinas o equipos mientras estás ebrio o con resaca puede ocasionar accidentes y lesiones. Además, perjudica los resultados que buscamos.
Entrenemos también el respeto
Tratar a las personas como nos gustaría que nos traten, e incluso mejor, es la mayor muestra de empatía que se puede dar en cualquier espacio. Practicar el respeto es un excelente hábito que evita muchos problemas.
En resumen, el gimnasio es un espacio donde la cortesía es fundamental. Evita estos comportamientos rudos y contribuye a un ambiente más agradable y armonioso para todos.
Al seguir estas pautas, no solo mejorarás tu propia experiencia en el gimnasio, sino que también ayudarás a crear un entorno más amigable y motivador en general. ¡Entrena duro y con respeto!
Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.