Conoce los beneficios de practicar ciclismo de montaña
Si eres apasionado por los deportes extremos y por ejercitarte en espacios naturales, practicar ciclismo de montaña puede ser un excelente llamado a llenar tu vida de aventura. Explorar la montaña en dos ruedas no solo es una actividad que le pondrá adrenalina a tu vida: también será un gran aliado para la salud física, mental y emocional.
Si en algún momento ha pasado por tu cabeza la idea de comenzar en esta práctica, te conviene tener en cuenta algunas cuestiones. A continuación, te contaremos las razones por las que practicar ciclismo de montaña es una opción fantástica para tu cuerpo y mente.
¿Qué es el ciclismo de montaña?
Si creías que para practicar ciclismo de montaña solo basta con tomar la bicicleta que usas en la ciudad y dirigirte a la montaña, debes considerar que va mucho más allá de esto. El ciclismo de montaña, también conocido como MTB por sus siglas en inglés —mountain bike—, es considerado un deporte de riesgo.
Se trata de una competición que se realiza en circuitos naturales, casi siempre a través de bosques o caminos estrechos, con pendientes empinadas y bajadas muy rápidas. Existen distintas especialidades de este deporte:
- Cross Country o Rally (XC): es la variante más conocida y consiste en la competencia por terrenos ascendentes y descendentes.
- Downhill: es un término relacionado con recorridos en descenso.
- Uphill: a diferencia de la anterior, se trata de carreras de ascenso. Gana quien logra recorrer la mayor distancia en el menor tiempo posible.
- Cross Country Olympics: es una competición que sigue normas olímpicas.
- XCR: se trata de una competencia en la que se dan relevos al final de la carrera.
- XCE: consiste en una modalidad en la que se elimina al último en llegar a la meta.
A través del tiempo han ido surgiendo cada vez más variantes de este deporte extremo. Entre el sinfín de modalidades que existen, cada una tiene sus reglas y su encanto.
Beneficios del ciclismo de montaña
Más allá de los beneficios que enumeraremos a continuación, debes saber que el ciclismo de montaña no es una disciplina apta para cualquier persona. Como explica una publicación de la Sociedad Española de Medicina del Deporte, no se recomienda esta actividad para quienes padecen de alguna de estas condiciones:
- Insuficiencia cardíaca o respiratoria o renal.
- Reumatismos crónicos.
- Hemofilia.
- Diabetes insulinodependiente.
- Afecciones del aparato locomotor que afecten el equilibrio.
Así como las enumeradas hay otras contraindicaciones para considerar. No obstante, también son muchísimas sus bondades y consecuencias positivas para la salud. Aquí presentamos las más importantes.
Ayuda a controlar el peso
Este deporte extremo te permitirá mantener una buena figura. Si tu meta es bajar unos kilos y tonificar el cuerpo, el ciclismo de montaña es un buen plan para lograrlo. Su práctica constante te ayudará a quemar grasa, tonificar la musculatura y, como indica una publicación de la Fundación del Corazón, será útil para controlar el peso corporal.
Los entrenamientos de largo recorrido hacen que el organismo aporte mucha más sangre oxigenada a los músculos que trabajan durante la práctica física. Además, el hecho de gastar más energía hará que el cuerpo queme más grasas, como explica un estudio publicado por Annals of Nutrition & Metabolism.
Te conecta más con la naturaleza
La conexión con la naturaleza a veces puede ser la mejor terapia. A diferencia del ciclismo urbano, el ciclismo de montaña te ayudará a disfrutar más de forma íntima de los bosques, selvas y demás espacios naturales.
Además, un paseo por la montaña significa también un descanso de los escenarios a los que te enfrentas en el día a día. ¡Un respiro de la rutina!
Favorece la salud cardiovascular
En general, el ciclismo está muy recomendado para pacientes con enfermedades cardiovasculares, siempre que se sigan las indicaciones del médico. Si se realiza de forma frecuente, dicha práctica reduce el riesgo de tener enfermedades coronarias, según un estudio publicado por American Family Physician.
Por si fuera poco, estos ejercicios influyen de forma positiva en la circulación y el colesterol malo (LDL) de la sangre se reduce de manera significativa, como indica una publicación de Manual Merck sobre la actividad física. Además, el pedaleo estimula la circulación y ayuda así a prevenir la aparición de várices y estrías.
Fortalece el sistema inmunitario
El ciclismo de montaña es una actividad ideal para evitar el sedentarismo, el cual es nocivo para las defensas del organismo. Según un estudio publicado por Cirugía y Cirujanos, el ejercicio promueve un estado antiinflamatorio que previene la aparición de diversas enfermedades.
Beneficia la salud mental y emocional
Esta actividad deportiva tiene un gran impacto en el funcionamiento cerebral. Esto se debe a que en el ciclismo, como en la mayoría de los ejercicios físicos, se liberan endorfinas, conocidas como «la hormona de la felicidad».
Estos neurotransmisores funcionan como analgésicos naturales que te hacen sentir con mejor ánimo y generan una sensación de bienestar. Este vínculo es confirmado por un estudio publicado por Sports Medicine en 2012.
Prueba el ciclismo de montaña para mejorar tu salud
Como última recomendación, vale remarcar la importancia de consultar con un médico en caso de padecer uno de los factores de riesgo asociados al ciclismo en general. De este modo, podrás saber si su práctica implica o no riesgos para tu salud.
Tomando todas las precauciones pertinentes, ahora tienes más motivos para comenzar a ejercitarte a través del ciclismo de montaña. Anímate: el cuerpo y la mente te lo agradecerán.
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