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7 cosas que nunca debes hacerle a tu vagina

4 minutos
El exceso de limpieza de la zona vaginal puede terminar siendo perjudicial, ya que alteramos su flora bacteriana. Salvo excepciones, el olor que desprende la vagina es completamente natural
7 cosas que nunca debes hacerle a tu vagina
Bernardo Peña

Revisado y aprobado por el psicólogo Bernardo Peña

Escrito por Okairy Zuñiga
Última actualización: 31 mayo, 2023

La vagina es un órgano muy sensible a alteraciones ambientales y susceptible al desequilibrio. Ciertamente, ya debes conocer algunos de los factores que pueden perjudicar la salud de esta zona. Por ejemplo, la falta de higiene, el uso de ropas apretadas o el sexo sin protección.
Sin embargo, hay muchas mujeres que se preocupan demasiado por el aspecto de sus genitales y cometen errores en su cuidadoPor ello, hoy queremos repasar contigo algunas de las cosas que nunca debes hacerle a tu “mejor amiga”.

1. Usar protectores diarios todos los días

Estos productos fueron creados para absorber las secreciones que normalmente salen por el canal vaginal al principio y final de cada menstruación. Usarlos todos los días puede perjudicar la salud íntima porque deja esta región más caliente y húmeda.

El resultado es que transforma la vulva en el medio perfecto de cultivo de bacterias. Además, favorece la aparición de infecciones vaginales y el aumento de flujo vaginalSi eres una usuaria regular de esta clase de productos, te recomendamos disminuir su uso o cambiarlos con mayor frecuencia. Lo ideal es hacerlo cada cuatro horas.

Ver también: 5 remedios caseros para controlar el olor y exceso de flujo vaginal

2. Intentar librarte de tu olor natural

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Esta región tiene un olor particular y esto es completamente normal. Tal vez a ti te incomode y te parezca que huele mal. No es así; ¿qué tal si haces la prueba y le preguntas a tu pareja para ver qué opina?

La vagina es un órgano cerrado caliente y húmedo. Además, produce una transpiración ocasionando un olor que es natural y sano. Nunca subestimes tu olor ni lo trates de ocultar. Solo debes preocuparte cuando:

  • El olor sea más fuerte de lo normal
  • El olor venga acompañado de picazón
  • Si presentas descargas de flujo fuera de lo común

3. Usar cualquier cosa como lubricante

No se puede usar cualquier cosa como lubricante porque puede ser infecciosa. Si quieres usar lubricante, necesitas un aceite de alta calidad con pH neutro.
No te hará nada bien usar productos improvisados como mantequillas o aceites de cocina. Además, existe la probabilidad de que te causen quemaduras y alteren tu pH natural. Nunca insertes objetos extraños, alimentos o algún dispositivo no hecho para ese fin dentro de ella.

4. Duchas vaginales

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Se entiende que quieras mantener todo tu cuerpo limpio y sin malos olores. No obstante, debes tener presente que el exceso de limpieza no le hace nada bien a tu vaginaAlgunas mujeres gustan de duchas vaginales para asear sus partes íntimas, siendo esto totalmente innecesario.

De hecho, puede resultar bastante peligroso porque puede causar un desequilibrio horrible de las bacterias típicas. Algunos ginecólogos culpan a este hábito de la inflamación pélvica y la vaginosis bacteriana, según afirma este estudio de la Universidad de Washington.

Lee también: 9 alimentos que benefician tu zona íntima

Lo mejor que puedes hacer para mantener tu vagina limpia es lavarla con agua y jabón con pH neutro. A continuación, seca con una toalla de algodón limpia, sin hacer demasiada fricción ni restregar.

5. No expongas tu vagina a vapores

“Cocinar” tu vagina en un spa es una tendencia en estos días, y sí, esa palabra describe perfectamente lo que se hace. Te sientas en un tipo específico de spa sin ropa interior, en asientos especiales que tienen vapores que salen de ellos, emanando directamente a tu zona íntima.

Con cualquier tipo de tratamiento caliente se mejora la circulación de la sangre en el área, pero de estos métodos se han visto salir quemaduras e irritaciones. Y, de cualquier forma, no hay pruebas científicas de la eficacia de ese procedimiento.

6. En las relaciones sexuales

No es nada nuevo que, si no tienes una pareja estable, debes, por el bien de tu vagina y salud sexual en general, usar preservativos, tal y como sugiere este estudio del Instituto Nacional de Higiene, Epidemiología y Microbiología (Cuba). Además existen juegos que se llevan a cabo a la hora de tener una relación sexual en los que las parejas son muy creativas.

No es recomendable utilizar sirope de chocolate y crema chantilly o productos similares, sobre todo en la parte interna. Cualquier cosa que contenga azúcar puede cambiar las bacterias y las proporciones de levaduras y pueden causar infecciones.
Esas sustancias también pueden ser irritantes para la piel vaginal. Si deseáis incorporar juegos con nuevos sabores, buscad productos pensados en ello.

7. Asearte de la forma incorrecta al ir al baño

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Es fundamental para la higiene íntima femenina secarse después de orinar. Limpiarse incorrectamente es la causa más común de infecciones. El ano, al estar muy cerca de la vagina, puede transportar bacterias de un lado a otro, instalándose en la mucosa vaginal que es muy sensible a contaminaciones. La forma correcta de limpiarse es de la vagina hacia el ano, es decir, de adelante hacia atrás.

Presta especial atención a la salud de tu vagina

La piel de la vagina es la más fina y sensible de todo el cuerpo. Así que acciones en apariencia inofensivas pueden ocasionarle daños.  Hay hábitos que se aprenden desde niñas y lo practicamos así durante el resto de nuestra vida. No obstante, existen cosas que nunca debemos hacer si queremos evitar situaciones incómodas. Poniendo en práctica estos consejos evitarás desequilibrios en tu ecosistema vaginal, para que cuides tu salud y sigas sintiéndote bella.


Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.


  • Alemán Mondeja, Linet Diana, Caridad Almanza Martínez, and Octavio Fernández Limia. “Diagnóstico y prevalencia de infecciones vaginales.” Revista Cubana de Obstetricia y Ginecología 36.2 (2010): 62-103.
  • Chávez, Natividad, et al. “Duchas vaginales y otros riesgos de vaginosis bacteriana.” Revista peruana de medicina experimental y salud pública 26.3 (2009): 299-306.
  • González, Carolina, et al. “Flora vaginal en pacientes que asisten a consulta ginecológica.” Revista de la Sociedad Venezolana de Microbiología 26.1 (2006): 19-26.

Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.