Las 3 diferencias entre «vintage» y retro que más se ignoran
Los estilos vintage y retro suelen confundirse bastante entre sí, pero tienen un par de diferencias a considerar. En esta nota, vamos a describir qué es cada uno y cuáles son esos detalles que, aunque podrían parecer imperceptibles, hacen que cada estilo sea único y especial.
Saber estas diferencias te ayudarán a elegir cuál de estos estilos es el que, en realidad, prefieres aplicar en la decoración de tu hogar o en tu estilo de vestir. ¡Sigue leyendo y descubre de qué es lo que te estamos hablando!
¿Qué es vintage y qué es retro?
Sin duda alguna, cuando hablamos de vintage nos referimos a cosas antiguas que tienen un valor que crece con el tiempo. En muchos casos, sin ser catalogados como antigüedades, pueden ser obras de arte u objetos de colección.
Este anglicismo se deriva del francés vendange, el cual se refiere a un vino de cierto año que se destaca por su calidad. Sin embargo, hay que tener cuidado porque algo viejo no es necesariamente vintage y algo vintage no es necesariamente una antigüedad. Para que así sea, un objeto o prenda debe tener 100 años o más.
Ahora bien, cuando hablamos de algo retro, hablamos de un estilo que se inspira en tendencias de años pasados u obsoletas para revivirlas; a partir, de pequeños toques innovadores. Así las cosas, algo retro no es antiguo como tal, pues no tiene que haberse fabricado años atrás.
¿Cuáles son las diferencias entre vintage y retro?
Comprendiendo qué es el estilo vintage y qué es el retro, vamos a indagar, con lupa de detalles, cuáles son las principales diferencias entre uno y otro. Por ello, a continuación, vamos a empezar a detallar a fondo, las diferencias entre lo retro y lo vintage para que los conceptos queden mucho más claro.
1. Uno pertenece a una época pasada y el otro se inspira en ella
Cuando el objeto o la prenda de la que hablamos fue creado o diseñado mínimo 20 años atrás, hablamos de algo vintage. Antes se consideraban así las piezas generadas entre los años 20 y los años 70, con el paso del tiempo, ingresan a esta categoría otros objetos de años como los 80 y los 90.
A diferencia, lo retro no tiene que haberse fabricado años atrás, pero sí que puede inspirarse en ellos. Los años en los que más se inspira lo retro son los 50, los 60 y los 70, por lo que suelen predominar materiales como la madera en pisos, muebles y accesorio; el plástico en tonos muy brillantes y vivos como el rojo, y papel pintado en las paredes con estampados geométricos, muy comunes en esos años.
2. Lo vintage es un estilo de vida, lo retro es una inspiración
La segunda de las diferencias entre vintage y retro es que el primero es un estilo de vida para muchas personas. Hay quienes se dedican a coleccionar objetos y prendas, de años anteriores, para lucir y mostrar; mientras que el segundo es el resultado de la inspiración de un diseñador o un creador.
Para que te quede más claro, te tenemos un ejemplo. Si en casa de la abuela hay una nevera que fue fabricada en los años 60, entonces es un objeto vintage; pero si tú compras una nevera nueva que se inspira en los modelos de este año, entonces es retro.
3. Cada uno representa un estilo diferente
Al ser creados o diseñados en años pasados, la mayoría de objetos vintage pertenecen al estilo moderno. Por ello, predominan las líneas rectas, los materiales industrializados como el acero y el vidrio y los colores brillantes como el rojo y el azul. Eso sí, hay que precisar que con el paso de los años, encontramos cosas vintage que tienen más bien un estilo clásico.
Por su parte, lo retro se ubica más en un estilo contemporáneo. En este caso, se mezclan algunas líneas clásicas con aspectos más actuales en cuanto a formas y colores. De hecho, algunas marcas se han popularizado en el mercado, al sacar líneas de productos retro con materiales más actuales y tonos neutros y fríos. Un ejemplo muy exitoso son las líneas de electrodomésticos, como las cafeteras.
Ahora sí, ya sabes cuáles son las diferencias entre vintage y retro
Como puedes darte cuenta, lo vintage y lo retro sí que guardan sus diferencias. Ahora que ya las sabes, es momento de tomar las mejores decisiones. Un plus del que no hablamos antes, pero que debes saber, es que decorar una casa al estilo vintage puede ser costoso, porque los objetos de esta época ya se han valorizado bastante, en comparación con los retro.
Por ende, cuando hablamos de moda, lo vintage puede ser más económico que lo retro, porque obtener prendas antiguas representa acudir al mercado de segunda mano, lo que disminuye los costos, en comparación con prendas recién fabricadas.
Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.