Guía para identificar los piojos y sus rastros en la cabeza
Revisado y aprobado por la enfermera Leidy Mora Molina
Identificar los piojos es fundamental, tanto para prevenir su aparición como para combatir una infestación. Pese a que esto último es muy desagradable, es necesario decir que se trata de una situación muy común.
Contrario a lo que muchos piensan, estos animales no se instalan en la cabeza por falta de higiene. Cualquier persona se puede contagiar de ellos si entra en contacto con alguien que los tiene. Por eso es tan importante aprender a identificar a los piojos.
Este problema es mucho más frecuente entre los niños. Una vez que aparecen, no es nada fácil deshacerse de ellos.
¿Cómo identificar a los piojos?
En principio, la mejor manera de identificar a los piojos es teniendo claro cuál es su aspecto. Se trata de insectos que tienen el tamaño de una semilla de ajonjolí. Su color va de pardo a blancuzco. No vuelan ni saltan, sino que se arrastran.
Los piojos se adhieren a la piel del cuero cabelludo. Sin embargo, también se mueven muy rápido, por lo que a veces escapan al ojo. Tienen 6 patas que terminan en pequeñas garras. Las hembras, que ponen los huevos, son un poco más voluminosas que los machos.
La mejor manera de identificar los piojos es separando el cabello en partes y usando una luz fuerte y una lupa para detectarlos. No es fácil, pero con un poco de pericia se logra.
Ciclo de vida
Lo usual es que un piojo ponga entre 8 y 10 huevos al día. Estos tardan entre 7 y 12 días en eclosionar y dar lugar a la cría, que tiene el tamaño de la cabeza de un alfiler.
En pocas jornadas estos animales ya están listos para aparearse y comienzan un nuevo ciclo. El tiempo de vida de cada ejemplar es de entre 3 y 4 semanas.
¿Qué es la liendre y cómo se reconoce?
A los huevos de los piojos se les conoce con el nombre de liendres. Por lo general, es más fácil detectarlas que identificar a los piojos en la cabeza, ya que estos últimos son muy rápidos y saben ocultarse.
Las liendres tienen forma ovalada y un color entre blanco y amarillento. Se ubican en los costados de los tallos del cabello. Algunas de ellas están inactivas, bien porque son solo cascarones o porque contienen un piojo muerto.
En muchos casos, las liendres se confunden con caspa o con costras. Lo indicado es levantar una hebra de cabello desde el cuero cabelludo. Si es caspa, se desprenderá. Sino, se mantendrá aferrada al tallo del pelo.
Es habitual que haya mayor cantidad detrás de las orejas y en la zona de la nuca.
Los rastros en la cabeza
Puede ser que una infestación se detecte en función de los efectos que produce en la persona afectada. En consecuencia, es muy importante estar atentos a las siguientes señales:
- Sensación de cosquilleo en la cabeza.
- Picor frecuente en el cuero cabelludo.
- Incremento del cosquilleo y el picor en horas de la noche, ya que los piojos son más activos en la oscuridad.
- Llagas en la cabeza provocadas por el rascado. Estas pueden sobreinfectarse.
Si las anteriores señales están presentes, lo más aconsejable es revisar la cabeza en detalle para identificar a los piojos. Cuando las liendras son escasas, significa que aún no se ha producido una infestación en estricto sentido.
Prevenir los piojos
Lo más habitual es que los piojos se contagien por contacto de cabeza a cabeza. Esta es la razón por la que son más frecuentes en los niños pequeños, ya que ellos suelen tener ese tipo de contacto en sus juegos.
Así mismo, estos animales se pueden adquirir cuando la cabeza entra roza con prendas o elementos en los que hay piojos, como almohadas y cojines. Si se sabe que hay alguien con la infestación, se puede acudir a un repelente de piojos. Este no es infalible, pero sí puede ayudar.
Por lo demás, las siguientes recomendaciones son útiles para prevenir un contagio:
- Evitar el contacto cabeza a cabeza. En particular, hay que enseñarle esto a los niños.
- No compartir objetos de uso personal como gorras, peines, cascos, audífonos, ligas para el cabello, bufandas.
- Evitar recostarse en sofás, camas, alfombras o almohadas que hayan sido usadas por alguna persona que tenga piojos.
- Revisar la cabeza de todas las personas que conviven juntas después de identificar los piojos en una de ellas. Esto debe hacerse cada 3 o 4 días.
- Lavar toda la ropa de cama y de vestir de la persona infestada con agua caliente. Lo mismo se debe hacer con los productos para el arreglo del cabello, como peines y cepillos.
- Aspirar las alfombras y los muebles tapizados en la casa y en el coche.
- Cualquier objeto que haya estado en contacto con la persona infestada también se puede poner en una bolsa. Esta debe sellarse por 7 días.
Ser constantes en el tratamiento
El primer paso es identificar los piojos, pero luego de esto puede pasar un buen tiempo para deshacerse de esta plaga. Lo indicado es utilizar un tratamiento de venta libre para combatir estos molestos animalitos. Suele dar resultados, aunque se requiere constancia.
Es muy importante revisar la cabeza de forma regular y continua, ya que algunas veces con solo unas cuantas liendres que queden se inicia de nuevo la proliferación. Para luchar de manera más eficaz, lo más recomendable es cortarse el cabello.
Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.
- Ramonell, R. M., & Sebastián, A. M. (2004). Infestación por piojos en los escolares de los colegios públicos de Palma e intervención educativa (1983–2003). Atención Primaria, 34(1), 60.
- Hodgson, E. W., & Wille, C. (2021). Piojos en los Humanos.
- de Pablo Màrquez, Bernat. "Actualización en pediculosis capitis." Medicina de Familia. SEMERGEN 45.2 (2019): 128-133.
Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.