Hongo chaga: beneficios y precauciones

Revisado y aprobado por la farmacéutica Franciele Rohor de Souza

Escrito por Daniela Echeverri Castro

Última actualización: 10 julio, 2023

El hongo chaga, cuyo nombre científico es Inonotus obliquus, es un hongo parásito que suele crecer en la corteza de los abedules de lugares de climas fríos, como Rusia, Canadá, Siberia, Europa del norte y Alaska.

También se conoce con nombres como «masa negra», «poliporo de clinker» o «nariz de cartón», ya que produce un crecimiento leñoso que se asemeja al carbón quemado. No obstante, tiene en su parte interior un núcleo blando de tonalidad naranja.

De acuerdo con un artículo publicado en Biofactors, los extractos obtenidos de este hongo tienen potencial antioxidante, antibacteriano, antialérgico y antiinflamatorio. Por ello se ha popularizado como un complemento medicinal. ¿Para qué se utiliza?

Beneficios del hongo chaga

Desde hace cientos de años el hongo chaga se usa con fines medicinales en Siberia y países asiáticos. En particular, destaca por su capacidad para estimular el sistema inmunitario y promover el bienestar. Según una publicación en International Journal of Molecular Sciences, esto se debe a su contenido de derivados del ácido betulínico y complejos de melano-glucano.

Además, es una fuente de compuestos fenólicos y polisacáridos que le confieren importantes beneficios. Por ejemplo, contribuyen a estimular la microbiota intestinal, ya que provocan cambios hacia un perfil de bacterias saludables. Sumado a esto, tiene otros efectos positivos en la salud. Veamos.

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Antiinflamatorio e inmunomodulador

En estudios hechos en animales, el hongo chaga fue útil para promover la formación de citocinas beneficiosas. Las mismas se encargan de regular el sistema inmunitario, ya que estimulan los glóbulos blancos. Por eso, se dice que este ingrediente es útil para evitar la presencia de agentes patógenos en el cuerpo.

Estas investigaciones también han determinado que el chaga inhibe la producción de citoquinas dañinas, las que se asocian a altos niveles de inflamación y enfermedades. En un estudio divulgado en Journal of Ethnopharmacology, los extractos del hongo redujeron la inflamación y el daño intestinal en ratones al detener la actividad de citocinas inflamatorias.

Regulador de los niveles de glucosa

No es una cura para la diabetes ni tampoco un tratamiento de primera elección. Pero, como lo expone un estudio compartido en Food and Chemical Toxicology, el hongo chaga tiene actividad hipoglucémica y antioxidante. Por ahora, las investigaciones se han hecho principalmente en animales.

Según los hallazgos, los extractos de este hongo disminuyen los niveles de glucosa en sangre y la resistencia a la insulina. De todos modos, se aconseja un uso moderado y bajo supervisión profesional, ya que se desconoce si con seguridad causa estos efectos en humanos. Además, hay riesgo de posibles interacciones con fármacos para la diabetes.

Posible reductor de los niveles altos de colesterol

La concentración de antioxidantes del chaga parece explicar este beneficio. Un estudio de 8 semanas en ratas con colesterol alto permitió observar que el extracto de este hongo favorece la disminución de los niveles elevados de colesterol malo (LDL), colesterol total y triglicéridos.

A través de Journal of Ethnopharmacology se hallaron resultados similares. De acuerdo con la investigación, estos extractos no solo bajan los niveles de colesterol malo, sino que elevan la presencia de colesterol bueno (HDL) en sangre. Aún así, son necesarios más estudios en humanos.

Actividad antitumoral

Hasta la fecha, el hongo chaga no ha sido aprobado como tratamiento para el cáncer. Aunque el marketing se encargó de promoverlo como un aliado contra esta enfermedad, lo cierto es que no hay suficientes evidencias para sacar conclusiones sólidas sobre su potencial antitumoral.

De todos modos, los estudios en animales y en probetas han arrojado resultados prometedores. Por ejemplo, una investigación revelada por Phytotherapy Research determinó que el extracto de chaga fue útil contra las células de cáncer de colon.

Entre tanto, un estudio en Heliyon dio como resultado una reducción del 60 % del tamaño de un tumor en ratones. También hay evidencias sobre su capacidad preventiva contra el cáncer de las células hepáticas, de pulmón, de mama y de próstata.

¿Cómo se consume el hongo chaga?

Hay que considerar que el hongo chaga no es un superalimento. Por lo tanto, su consumo no reemplaza los beneficios de una alimentación sana y balanceada. Tampoco sustituye los tratamientos médicos ni supone una cura para las patologías. Para un uso prudente, lo mejor es consultar al médico.

En la actualidad es posible encontrar suplementos de chaga en tiendas herbolarias especializadas. Por lo general, viene disponible en pequeños trozos que se introducen en agua para elaborar una infusión. También hay presentaciones en cápsulas y polvo. La dosis sugerida la suele indicar el fabricante.

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Precauciones y posibles efectos secundarios del hongo chaga

Los suplementos de hongo chaga deben emplearse con precaución, ya que no están regulados por la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA). Además, dada la falta de estudios en humanos, se desconoce con certeza su nivel de seguridad y dosis apropiada. De hecho, se ha determinado que puede tener interacción con algunos medicamentos.

Por lo anterior, debe ser evitado por personas que tienen prescripción de insulina o que están en tratamiento para la diabetes. También hay que tener cuidado en caso de estar tomando medicamentos anticoagulantes, antiplaquetarios o fármacos para el sistema inmune.

Las mujeres embarazadas o en periodo de lactancia, al igual que las personas con enfermedades crónicas, deben evitar el uso de los derivados del hongo. Toda duda al respecto debe resolverse con el médico.

¿Qué hay que recordar sobre el hongo chaga?

El hongo chaga tiene un amplio historial como suplemento medicinal. Se valora por sus propiedades antiinflamatorias, antioxidantes y antibacterianas. Sin embargo, hasta la fecha hay pocas evidencias sobre su seguridad y eficacia en humanos. Debido a esto, se debe emplear con precaución.

En caso de enfermedades o de estar bajo un tratamiento médico, lo mejor es consultar antes de tomar este producto. Por otro lado, pese a la publicidad que le han dado, no debe sustituir los medicamentos. ¡Tenlo en cuenta!