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¿La mejor edad? ¡La que tienes ahora!

5 minutos
Puesto que cada edad tiene sus cosas buenas y malas debemos aprender a disfrutar del momento y valorar nuestras posibilidades actuales, puesto que el día de hoy no volverá
¿La mejor edad? ¡La que tienes ahora!
Escrito por Yamila Papa Pintor
Última actualización: 25 mayo, 2023

Algunos dicen que los 20, otros que los 30 y están los que dicen que la mejor edad son los 60.

Si bien estas afirmaciones pueden ser subjetivas y basarse en ciertos aspectos específicos de una década vivida, lo cierto es que para nosotros la mejor edad es la que tenemos ahora.

¿Por qué? En este artículo te lo contamos.

¿Cuál es la mejor edad de la vida?

Podríamos dividir nuestra existencia en 5 grandes grupos. Cada uno de ellos tiene sus cosas buenas por las cuales sería comprensible elegirlo como “la mejor etapa”:

  • La niñez (no hay obligaciones ni preocupaciones: solo juegas y ríes).
  • La adolescencia (el mayor momento de aprendizaje y cambios, se forjan amistades reales).
  • Entre los 20 y los 40 años (consigues tus logros principales, como familia, trabajo, amor, etc.).
  • Entre los 40 y los 60 años (eres consciente de lo que has conseguido hasta ahora, disfrutas de los nietos si los tienes).
  • A partir de los 60 años (tienes más tiempo libre y puedes gastar tu dinero en viajes o gustos).

Ver también: Amores en la edad madura: cuando dos almas sabias se encuentran

Estudio de campo: La mejor edad son los 34 años

Según una investigación llevada a cabo por la compañía de seguros Yale, el mejor momento de tu vida es cuando cumples 34 años. Por lo menos eso expresaron los evaluados).

Si acabas de llegar a los 30 y crees que a partir de ahora todo pasa demasiado deprisa, ten en cuenta que, al parecer… ¡Lo mejor no ha llegado!

En esta etapa de la vida solemos estar más satisfechos con lo que hemos logrado. Además, podemos conseguir aumentos de sueldo al mejorar nuestro puesto (ser ascendidos o acceder a un empleo mejor remunerado basado en nuestra experiencia).

En algunos casos, hasta tenemos nuestra casa propia y formamos nuestra familia.

Hasta no haber alcanzado esa edad algunos consideran que no se han cumplido las metas en todos los ámbitos. Estos son pareja, hijos, trabajo, estudio, realización personal, etc.

La mejor edad son los 34, pero…

No obstante, en el estudio se mostraron otras respuestas que llamaron la atención de los investigadores.

Una buena cantidad de los consultados dijeron que la mejor edad era a los 20 porque en ese momento llegan la independencia y la libertad. Además, se conocen nuevas personas, las relaciones suelen ser más reales y se elige la carrera para estudiar.

Sin embargo, atención, había 3 grupos más:

  • Los que decían que los 40 eran mejores porque la familia ya estaba formada y los hijos empezaban a crecer solos.
  • Aquellos que admitían los 50 como mejor época porque la tranquilidad llegaba al quedarse en casa con la pareja y no tener deudas de hipotecas.
  • También estaban los que afirmaban que los 60 son el momento perfecto, porque se deja de trabajar. Así, se tiene tiempo para viajar, cuidar de los nietos y dedicarse a la jardinería, por ejemplo.

Por lo tanto… ¡Este estudio tampoco nos ayuda a develar el misterio de cuál es la mejor edad!

Cada edad tiene lo suyo y hay que celebrarlo

No somos los mismos a los 10 que a los 28 o que a los 57, eso está más que claro. Cambiamos en lo físico, en lo mental, en las experiencias y en los hábitos.

El paso del tiempo nos va modificando, a veces nos mejora y otras no. Cada aspecto de la vida es distinto según los años que tengamos:

Ejercicio

El momento ideal para hacer un deporte de alto rendimiento se suele ubicar a los 20 años. Y es que suele ser entonces cuando tenemos más energía explosiva y resistencia pulmonar o cardíaca. Con todo, hay algunas disciplinas que empiezan a una edad más temprana, como el fútbol o la gimnasia).

En la “vida normal” es más probable hacer ejercicio intenso entre los 18 y los 28, aproximadamente. Antes no tenemos fuerza suficiente y después la capacidad va en disminución.

A eso debemos sumarle que llegando a los 30, solemos tener familia y obligaciones que cumplir. Por lo tanto, no suele quedar tiempo para el deporte (un error, pero es la verdad).

La etapa donde menos ejercicio se suele hacer es entre los 30 y los 45 o 50. Después “se vuelve al ruedo” con actividades más tranquilas como el yoga, pilates, natación o caminatas por el parque.

Funcionamiento cognitivo

La mente va cumpliendo años al igual que nosotros y eso se nota en nuestras actividades cotidianas.

  • Cuando éramos niños nos acordábamos de muchas cosas, porque nuestro cerebro era joven.
  • En la adolescencia solemos recordar aquello relacionado con las emociones o que nos importa.
  • Al momento de iniciar nuestra carrera universitaria el cerebro es lo suficientemente maduro como para recordar, analizar, comprender y guardar información.
  • Tras cumplir 35 puede que nos sea cada vez más difícil memorizar datos. Por eso, si queremos estudiar, es posible que necesitemos más tiempo para absorber lo que dicen los libros.
  • A los 40 la memoria funcional suele empezar a disminuir progresivamente. Esto ocurre sobre todo si no la ejercitamos. Sin embargo, también es probable que tengamos tanto conocimiento que lo podamos poner en práctica de manera eficaz. Por ejemplo, los ganadores de Premio Nobel en su mayoría ya habían cumplido 4 décadas.

A medida que vamos envejecimiento las neuronas también lo hacen y nos es más difícil recordar fechas, nombres o teléfonos.

Te recomendamos leer: 5 mejores ejercicios para mejorar nuestra memoria

Sexualidad

Podemos pensar que entre los 17 y los 25 el apetito sexual es insaciable y que luego va disminuyendo. Sin embargo, esto no es cierto.

Podemos seguir sintiendo deseo de intimidad a los 50, 60, etc. años.

De hecho algunos afirman que estas son buenas épocas. ¿Por qué? Pues porque se han dejado de lado los traumas, los tabúes y el miedo por mostrar el cuerpo.

Además, seguramente se tenga una pareja de hace años y los hijos ya no están en mente (ni para tenerlos ni porque estén en la habitación contigua).

Ahora que ya conoces todos estos datos, ¿cuál es la mejor edad? ¡Claro que es la que tienes ahora!

Como hemos visto todas tienen sus cosas buenas, así que aprovecha.

Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.