¿La sal marina le aporta 10 beneficios a tu cuerpo?
Revisado y aprobado por la médico Maricela Jiménez López
Hasta hace poco, la sal marina era vista por muchos consumidores como una alternativa saludable para sustituir la tradicional sal de mesa. De hecho, se le atribuían 10 y más beneficios para la salud.
Sin embargo, con el ánimo de cuidar la salud de todos, expertos en nutrición han desmentido muchas de las afirmaciones que se estaban haciendo sobre su consumo. A continuación, haremos un repaso sobre los efectos de la sal marina y sus recomendaciones de consumo.
¿Qué es la sal marina?
La sal marina se obtiene de la evaporación del agua de mar o de los lagos de agua salada. Debido a su textura gruesa y crujiente, suele emplearse en la gastronomía para la elaboración de varios tipos de recetas. Asimismo, por este mismo motivo se agrega a exfoliantes corporales y otros productos.
Debido al boom que tuvo gracias a muchos anuncios publicitarios, este tipo de sal se popularizó como una alternativa para la sal de mesa tradicional, cuya ingesta se asocia con varios problemas de salud. De hecho, muchos llegaron a afirmar que era una sal con menos sodio y que estaba repleta de nutrientes beneficiosos.
No obstante, como lo señala una publicación en American Heart Association, tanto la sal de mesa como las sales marinas contienen aproximadamente 40 % de sodio en peso y, por tanto, las recomendaciones de consumo no difieren entre una versión y otra.
¿La sal marina aporta más beneficios que la sal de mesa?
La respuesta concreta es no. Aunque muchos la han etiquetado como un súper alimento, lo cierto de todo es que la composición nutricional de la sal varía no varía mucho en comparación con la sal de mesa. Su gran diferencia, de acuerdo con la Clínica Mayo, está en su sabor, textura y procesamiento.
Así, mientras que la sal marina se obtiene de la evaporación del agua del océano con un procesamiento mínimo, la sal de mesa suele extraerse de depósitos de sal subterráneos y atraviesa una serie de tratamientos donde se eliminan minerales y añaden aditivos.
Ahora bien, según información en Journal of Sensory Studies, es cierto que, dependiendo de la fuente de agua, la sal marina queda con ciertos oligoelementos y elementos, entre los que se incluyen el potasio, el hierro y el calcio.
Sin embargo, sus cantidades son mínimas y habría que comer grandes porciones para poder acercarse a la cantidad que aportan otros alimentos de estos mismos minerales.
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¿Cuáles son los 10 beneficios que se atribuyen a la sal marina?
Quizá por la confusión que generaron los anuncios publicitarios con respecto a la sal marina, muchas personas asumieron que era una sal con grandes beneficios para la salud. Sin embargo, en este punto sabemos que se trata de una exageración, ya que la composición nutricional es casi la misma que la sal de mesa.
Lo cierto de todo es que el sodio, independientemente de la fuente que se obtiene, es un mineral necesario para mantener la salud. De acuerdo con información publicada en Advances in Nutrition, en dosis adecuadas, es decir, no más de 5 gramos al día, puede ayudar a las siguientes funciones:
- Equilibrar los líquidos y electrolitos del organismo.
- Regular la presión arterial.
- Contribuir a la función nerviosa y muscular.
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Beneficios no comprobados de la sal marina
Por su contenido de minerales, que difieren en comparación con la sal de mesa, a la sal marina le han atribuido muchos beneficios para la salud. Sin embargo, muchas de estas propiedades fueron exageradas en su momento y, actualmente, la mayoría están desmentidas. Los supuestos beneficios son los siguientes:
- Fortalece las defensas.
- Ayuda a alcalinizar el cuerpo y regula el pH de la sangre.
- Combate el asma.
- Disminuye los niveles de colesterol y presión arterial.
- Combate la depresión.
- Regula la digestión.
- Mejora la calidad de sueño.
- Previene el envejecimiento prematuro.
- Ayuda a reducir la necesidad de insulina.
- Alivia las enfermedades cutáneas.
Hasta la fecha, no hay evidencias que demuestren que comer sal marina tiene estos beneficios sobre la salud. Por eso, al igual que otros tipos de sales, debe comerse con moderación, y bajo ninguna circunstancia se debe considerar una cura o tratamiento alternativo para las enfermedades.
Recomendaciones de la organización mundial de la salud (OMS)
La OMS advierte que un consumo excesivo de sodio está asociado con hipertensión y un mayor riesgo de enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares. Por esta razón, aconseja tener en cuenta lo siguiente:
- Que los adultos consuman menos de 5 g (menos de una cucharadita) de sal por día.
- En lo posible, se debe emplear sal fortificada con yodo, pues es esencial para el desarrollo saludable del cerebro en el feto y para la función de la tiroides.
- Dejar de creer que la sal marina es mejor que la sal de mesa solo porque es “natural”.
- Revisar las etiquetas de los alimentos, pues muchos son ricos en sodio.
- No agregar sal durante la preparación de los alimentos.
¿Qué debe quedar claro sobre esta sal?
Esos múltiples beneficios que se le atribuían a la sal marina no son ciertos. En realidad, este tipo de sal es bastante similar a la sal de mesa tradicional, con la diferencia que no ha sido procesada y tampoco está fortificada con yodo.
Así pues, el hecho que sea natural no quiere decir que sea mejor para la salud. Al igual que otras fuentes de sodio, su consumo excesivo puede acarrear consecuencias negativas. ¡Tenlo en cuenta!
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