6 lugares más sucios de las escuelas y cómo cuidar a tus hijos

Revisado y aprobado por el médico Leonardo Biolatto

Escrito por Aylin Stefany Rodriguez Vinasco

Última actualización: 30 septiembre, 2023

¿Alguna vez te has preguntado cuáles son los lugares más sucios de las escuelas? Seguro que sí y nosotros lo sabemos. Quienes tienen hijos en edad escolar entienden muy bien que las enfermedades infecciosas se contraen con relativa facilidad en estos espacios.

Es fundamental identificar las zonas con alta presencia de virus y bacterias en los colegios, con miras a que las autoridades tomen acciones. Por ejemplo, hace algunos años el foco estaba sobre todo en los baños, los cuales pasaron a ser uno de los espacios más seguros en este sentido, ya que en la actualidad se limpian con mucha frecuencia.

Estos son los 6 sitios más sucios de las escuelas

Algunas de las partes más sucias de las escuelas lo son debido al uso excesivo que le dan los pequeños y porque están al aire libre, haciendo que se adhieran partículas de polvo, esmog, virus y bacterias. Esto significa que siempre es posible redoblar las acciones de limpieza.

1. Pomos y manijas

Los pomos y las manijas de las puertas, así como las llaves, son objetos de lo más sucios en las escuelas. La razón detrás de ello es que se convierten en puntos de alto contacto y que, a menudo, se tocan con las manos no tan limpias.

Es por esto que los gérmenes se acumulan con mayor rapidez en estas superficies, lo que facilita la propagación de enfermedades entre los estudiantes entre un contacto y otro. Por ello, lo más recomendado es reforzar hábitos como el lavado continuo de manos.

2. Áreas de juego al aire libre

Las áreas de juego suelen estar expuestas a la intemperie; esto hace que acumulen tierra, polvo, hojas, virus y bacterias, que luego terminan en las manos, la ropa y los juguetes de los niños.

Considerando que, al recoger toda esta suciedad en sus cosas, los niños la trasladarán al interior de la escuela, es necesario redoblar la limpieza en las zonas de juegos. Es importante también colocar lavamanos en las entradas para reducir la cantidad de gérmenes, así como tapetes para minimizar el ingreso de suciedad en los zapatos.

3. Mesas y pupitres

Los estudiantes no solo escriben sobre las mesas y los pupitres; también comen y juegan allí. Por ello, además de virus y bacterias, sobre estas superficies hay restos de comida y microorganismos. Si no se limpian con regularidad, estas superficies pueden convertirse en caldos de cultivo. Lo más recomendable sería limpiar estos elementos de manera continua e instruir a los estudiantes para hacer el mejor uso posible de ellos.

4. Pasamanos de escaleras

Los pasamanos de las escaleras son otros de los lugares más sucios de las escuelas. Como ocurre con los pomos y las manillas de las puertas, muchos estudiantes los tocan a lo largo del día. Esto es lo que facilita la transmisión de gérmenes.

Además, suelen acumular polvo y suciedad. Por fortuna, es un elemento que suele incluirse en la limpieza general, pues no es un secreto su susceptibilidad a alojar visitantes no deseados.

5. Fuentes de agua

Las fuentes de agua son otros de esos lugares considerados como los más sucios en las escuelas, porque es donde los estudiantes van a beber. En busca del líquido, los niños pueden tocar la boquilla del agua con sus manos sucias, sus labios o los picos de las botellas. Hay un alto riesgo de contaminación cruzada y proliferación de bacterias y virus.

6. Cocina y áreas de preparación de alimentos

En las escuelas que sirven alimentos, la cocina y las áreas de preparación son críticas para la higiene alimentaria. Si no se mantienen limpias, pueden convertirse en fuentes de contaminación.

Según lo explicó la Universidad de Guadalajara, una inadecuada limpieza de la cocina y un mal manejo de los alimentos puede causar enfermedades e infecciones por salmonela y E. coli, entre otras bacterias.

¿Cómo cuidar a los niños de los lugares más sucios en las escuelas?

Más que sitios, también hay otras superficies que compiten por ser las más sucias de las escuelas. Entre ellas, las del material educativo que los chicos comparten con sus compañeros, las bandejas reutilizables y los objetos electrónicos (ratones, teclados y monitores).

Si bien al interior de las instituciones educativas se toman bastantes medidas para evitar contagios y enfermedades, ¿qué más se puede hacer para cuidar a los niños de los virus y bacterias? ¡Vamos a verlo!

1. Fortalecer el lavado de manos luego de usar el baño, sonarse la nariz, toser o estornudar, de dar la mano o jugar con otros compañeros.
2. Cuidar la preparación de los alimentos, lavarse las manos antes de cocinar, enjuagar muy bien los ingredientes que se utilizarán, cocinar los alimentos en su totalidad y cuidar su procedencia.
3. Fortalecer el sistema inmunitario con una sana alimentación y actividad física.
4. Tener las vacunas al día para minimizar el riesgo de contraer enfermedades contagiosas comunes en las escuelas.
5. Reforzar la limpieza y desinfección de los espacios de alto tránsito de las escuelas, por parte de los directivos de la institución.

Recuerda que es imposible aislar a tus hijos de todos los riesgos que hay en lugares sucios. Así que no se trata de evitar que asista a la escuela o que no tenga contacto con su entorno, sino de reforzar sus defensas para minimizar el riesgo de contagios.