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5 estrategias para lograr que tus hijos usen la tecnología de forma equilibrada

4 minutos
Enseñar a los niños a usar la tecnología con límites es determinante para fortalecer su autocontrol y evitar efectos negativos a nivel cognitivo y emocional. 
5 estrategias para lograr que tus hijos usen la tecnología de forma equilibrada
Última actualización: 19 octubre, 2025

La tecnología ya es una parte inevitable de nuestra cotidianidad. Sin embargo, la crianza de hijos en la era digital conlleva numerosos desafíos que los padres no siempre saben cómo afrontar. Es cierto que los dispositivos e Internet ofrecen numerosas oportunidades para el aprendizaje y el desarrollo de habilidades, pero la otra cara de la moneda es que la exposición temprana y su uso sin límites tiene efectos negativos.

Un número creciente de estudios coincide en que el uso excesivo de aparatos tecnológicos en niños de 2 a 12 años tiende a conducir a una disminución de la actividad física, alteraciones del sueño, problemas de comportamiento, bajo rendimiento académico, fatiga visual y dificultades de aprendizaje. Ante esta realidad tan inquietante, puede que te preguntes, ¿cómo lograr que los niños equilibren su tiempo entre pantallas y otras actividades?

1. Establece límites saludables

Lo primero y más importante es comprender que no se trata de prohibir el uso de tecnología, sino de enseñarle a tu hijo a utilizarla con responsabilidad y moderación. Para ello, es preciso tener en cuenta las siguientes recomendaciones:

  • Define horarios y cantidad de tiempo en que los niños pueden utilizar dispositivos. Ten en cuenta que el tiempo recomendable puede variar de acuerdo a la edad. Por ejemplo, de los 2 a los 5 años no debería superar una hora al día. A partir de los 6 años hay más flexibilidad, pero el horario no debe perjudicar el sueño, la actividad física ni las interacciones sociales. No permitas el uso de aparatos en momentos específicos del día, como a la hora de las comidas, antes de dormir o en el tiempo de estudio.
  • Apóyate con herramientas de control parental para facilitar la supervisión y garantizar un mejor uso de acuerdo a la edad.

2. Crea espacios libres de tecnología

Una de las razones por las que los niños se enganchan tanto con los dispositivos es porque lo ven como su fuente de entretenimiento. Por eso es fundamental fomentar espacios sin pantallas que también sean fuente de diversión y aprendizaje. Procura crear zonas y espacios de juego, lecturas, dibujo, deportes u otras actividades que les permita explorar sus intereses sin depender de la conectividad.

3. Enseña sobre los riesgos en línea

No siempre vas a poder supervisar lo que tus hijos hacen cuando están conectados. Debido a esto, es crucial que tengas una conversación sobre los peligros que pueden enfrentar en Internet. Enséñales a reconocer aquellas situaciones de riesgo como hablar con desconocidos, exponer información personal o acceder a contenidos inapropiados.

4. Supervisa los contenidos que visitan

Tan importante es controlar los tiempos en línea como saber qué contenidos están consumiendo. En Internet hay acceso a casi todo tipo de información y los menores están expuestos a plataformas, vídeos, redes y aplicaciones que no siempre son apropiadas para su edad y desarrollo. Interésate por lo que hacen cuando están conectados, coloca filtros si es necesario y dialoga para ayudarles a desarrollar criterio propio.

5. Enseña con el ejemplo

Es difícil que los niños usen la tecnología con equilibrio si los padres no predican con el ejemplo. Cuando pasas horas frente al celular, ya sea revisando redes sociales o atendiendo llamadas sin pausa, tus hijos empiezan a normalizar ese comportamiento. Luego, al intentar controlarles su tiempo en pantalla, te puedes enfrentar a una contradicción.

Por este motivo, debes procurar desconectarte en los tiempos que también le exiges a ellos: a la hora de las comidas, en momentos exclusivos para la familia, al mantener conversaciones, etcétera.  Asimismo, procura mostrar interés por otras actividades como salir a caminar, leer o practicar algún hobby.

La meta es construir una relación sana con la tecnología

Tus hijos están creciendo en un mundo digital que forma parte de sus procesos de aprendizaje, ocio y relaciones. Esta realidad no la puedes cambiar y prohibir no es una solución. Por ello, tu papel es involucrarte para guiar a un uso responsable y consciente, entendiendo que hay muchas maneras de sacar ventaja, pero que también hay peligros latentes y límites. Al final, se trata de asegurar una interacción sana y equilibrada con la tecnología.

Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.