Metionina en la dieta: ¿para qué sirve?

Escrito y verificado por la nutricionista Anna Vilarrasa

Última actualización: 25 mayo, 2023

La importancia de la metionina en la dieta es clave, ya que los alimentos son la única manera que tenemos de obtener ese aminoácido. Ejerce un papel fundamental en el crecimiento y desarrollo normales.

Aunque padecer déficit de metionina es raro, podría provocar retraso en el crecimiento, pérdida de la musculatura, daño hepático, letargia y lesiones cutáneas. En el siguiente artículo conoceremos sus funciones y las mejores fuentes alimentarias de este valioso aminoácido. 

¿Qué es la metionina?

La metionina es un aminoácido que contiene azufre en su composición. Los aminoácidos son los bloques que forman las estructuras de las proteínas, el componente estructural con más importancia en el cuerpo. 

Además, la metionina es uno de los 9 aminoácidos esenciales para los adultos. Esto no quiere decir que sean más importantes que el resto, pues el cuerpo los necesita a todos para poder formar sus estructuras y ejercer determinadas funciones.

Sin embargo, los aminoácidos esenciales se diferencian de lresto porque debemos obtenerlos a través de la dieta. El organismo no es capaz de sintetizarlos por él mismo. De no comer las cantidades necesarias, podríamos tener un déficit.

Las mejores fuentes de metionina en la dieta

La metionina en la dieta se encuentra, sobre todo, en los alimentos de origen animal, pues las proteínas animales son completas. Esto quiere decir que nos aportan todos los aminoácidos esenciales en las cantidades necesarias. Por lo tanto, los aportes seguros y más altos de metionina estarán en: 

• Carne: pollo y pavo, ternera y cerdo. 
• Pescado: destacando en variedades como el atún, las anchoas, la caballa, la sardina o el eglefino. 
• Huevos.
• Lácteos: queso parmesano, romano, gruyére, tilsit o edam entre otros. También en la leche entera en polvo.

Pero no son los alimentos animales las únicas fuentes. Existen algunos alimentos vegetales que nos pueden aportar proteína completa. Este es el caso de la soja, los garbanzos, la quinoa, los pistachos o el amaranto.

La metionina se encuentra en cantidades más elevadas en el arroz, la quinoa, la avena, las nueces de Brasil y el sésamo. Y en cantidades más pequeñas en las legumbres como las alubias.

Así que será suficiente comer la cantidad adecuada de cereales integrales, legumbres, semillas y frutos secos para obtenerla también en una dieta vegana. 

Cómo introducir la metionina en nuestro menú diario

La metionina en la dieta tiene que estar presente cada día, igual que el resto de aminoácidos tan necesarios para el cuerpo. La mejor forma de asegurarnos una ingesta adecuada es comer buenas fuentes de proteínas en cada comida principal del día.

Aunque es muy beneficiosa para la salud y tiene muchos efectos en el organismo, ningún nutriente es mágico por si solo. Lo más importante es que se presente de forma equilibrada y a través de una dieta saludable.

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Como hemos visto, existen muchos alimentos que son perfectas fuentes de proteínas y que podemos comer a diario de forma equilibrada. Así que alcanzar las cantidades de metionina recomendadas no debería ser un problema para personas sanas y con dietas adaptadas a sus necesidades.

Por otro lado, un exceso de metionina es perjudicial y ejerce efectos secundarios negativos. Por eso solo se recomienda tomarla en forma de suplementos bajo supervisión profesional.

Los posibles efectos negativos en la salud están ligados a la aparición de homocisteína, el cual es otro aminoácido que aparece como resultado del metabolismo de la metionina.

Altos niveles de homocisteína en el organismo pueden causar daños inflamatorios asociados a enfermedades vasculares y neurológicas. Sin embargo, es necesario indicar que algunas personas son más susceptibles que otras.

Principales funciones de la metionina en el organismo

Como parte componente de las proteínas, la metionina es necesaria para construir muchas de las principales estructuras corporales: huesos, tejidos, músculos. Además, también forma parte de enzimas, hormonas y  membranas, y es necesaria como precursora de vitaminas.

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A nivel específico, la metionina tiene otras funciones que detallamos a continuación:

• Antioxidante: somos capaces de transformar la metionina en cisteína. Esta, a su vez, es precursora del glutatión, un gran antioxidante. El glutatión puede contrarrestar los radicales libres y aumenta la vida de algunas vitaminas antioxidantes, como son la vitamina C y la vitamina E. 
• Protectora del sistema cardiovascular: los aminoácidos sulfúricos, como la metionina y la cisteína, juegan un papel importante en la degradación de los lípidos. Por esto puede ser de ayuda para disminuir el colesterol en la sangre y prevenir la formación de placa arterial.
• Inmunoestimulante: Ejerce de soporte a la acción normal del sistema inmunitario. Es necesaria una ingesta habitual y normal de cisteína y metionina en la dieta para sintetizar las proteínas del sistema inmunitario. 
• Construcción de tejidos específicos: la metionina tiene un gran contenido en azufre. Este oligoelemento es necesario para mantener en buen estado algunos tejidos corporales, como la piel, el cabello y las uñas. 
• Desintoxicante: gracias al azufre, también tiene una actividad desintoxicante . Es capaz de eliminar sustancias perjudiciales como los metales pesados. 

La metionina en la dieta: de buenas fuentes y en cantidades adecuadas

Como parte constituyente de las proteínas, la metionina tiene unas funciones muy importantes en nuestro organismo. Tiene que estar presente en nuestra dieta diaria, pues además, es una molécula que nuestro cuerpo no puede sintetizar por él mismo.

Una dieta rica en alimentos proteicos de calidad nos garantiza las cantidades diarias recomendadas. Y aunque un exceso de metionina podría estar relacionado con algún problema de salud, es muy difícil sobrepasar las cantidades seguras a través de los alimentos.