Mordedura de araña: primeros auxilios y cuándo ver al médico
Ante un ataque imprevisto y una mordedura de araña podemos reaccionar, primero con asombro y dolor. Luego, nos preguntaremos si es peligrosa, si debemos acudir al médico o qué hacer.
Es importante aclarar que no todas las especies de arácnidos agreden al ser humano; algunas incluso son tan pequeñas que no podrían penetrar la piel. Sin embargo, otras pueden atacar y sus picaduras resultar peligrosas.
En este artículo conoceremos cuáles son los arácnidos por los que debemos preocuparnos, cómo reconocerlos, cuáles son los síntomas más comunes y qué hacer en caso de una mordedura de araña.
¿Son venenosas las arañas?
La mayoría de los arácnidos no suelen ser peligrosos; ni siquiera muerden o agreden. Y muchos son pequeños, tanto que sus colmillos no tendrían fuerza para penetrar la piel humana.
Pero cuando esto ocurre, por lo general solo se producen lesiones leves. Claro que también se reportan bastantes casos de mordeduras de arañas que pueden ser graves. Todo dependerá de la especie.
Viuda negra (Latrodectus mactans)
La viuda negra habita en distintas partes del mundo: Norteamérica, Europa, norte de Asia. Mide cerca de 4 centímetros y se puede identificar fácilmente por la mancha roja en su abdomen.
La incidencia de la picadura de viuda negra es de 3-4 casos por cada 100 000 personas. Sin embargo, la mortalidad es de 1 %, según los estudios.
Reclusa parda (Loxosceles reclusa)
Es conocida como araña marrón por su color. Se distribuye por casi todo el continente americano; también se identifica por una mancha de color más claro en el lomo. Mide cerca de una pulgada y es una de las más peligrosas.
Tarántulas (Theraphosidae)
Las tarántulas están bastante extendidas a lo largo del mundo. No tienen un hábitat particular, pues pueden encontrarse en áreas selváticas o desérticas. Suelen esconderse en huecos en la tierra, en troncos o debajo de piedras.
Se identifican por sus grandes dimensiones (casi del tamaño de una mano humana), así como por su textura peluda y colmillos salientes. No obstante su aspecto intimidante, no suelen ser agresivas.
De igual modo, el veneno de distintas especies de tarántula no se considera peligroso. Sin embargo, la mordedura de esta araña puede ser dolorosa y causar reacciones alérgicas en personas sensibles a su toxina.
Araña errante brasileña (Phoneutria)
A pesar de su nombre, no está limitada a un solo país, sino que vive a lo largo de Centroamérica y Sudamérica. Es tan grande como una tarántula, pero mucho más rápida y agresiva. Está considerada entre las más venenosas del mundo.
Araña vagabunda (Eratigena agrestis)
Se distribuye en todo el hemisferio norte, aunque prefiere los climas un poco secos. Se considera una especie peligrosa, no solo porque la mordedura de esta araña puede producir reacciones graves, sino porque se encuentra incluso en ambientes domésticos: huecos de las ventanas, escondidas en muebles y enseres en el garaje, en armarios.
Araña camello (Solifugae)
Se les llama así tanto por su color arena como por el hecho de que se encuentran en climas desérticos. Aunque también suelen habitar en matorrales y áreas boscosas de América, Asia y África.
Se caracterizan por presentar una pinza en la cabeza y por tener un cuerpo más bien alargado. Miden entre 5 y 8 centímetros, aunque algunas llegan a sobrepasar los 15. Si bien no son venenosas, con la pinza puede producir heridas serias.
Araña lobo (Lycosidae)
Esta especie habita prácticamente en todo el mundo. Se distingue por sus dos grandes ojos en medio de la cara.
Suelen ser del tamaño de las tarántulas y de aspecto parecido. Se pueden encontrar en espacios domésticos: en el jardín, en las ranuras de los marcos de puertas y ventanas. Su veneno no es peligroso para el ser humano, aunque sí produce algunas reacciones alérgicas.
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Araña saltarina o saltadora (Salticidae)
Esta es de las arañas domésticas más comunes. Es pequeña (menos de 2 centímetros), pero su cuerpo es robusto.
Tiene manchas claras en la parte superior. Aparece repentinamente en las plantas de interior o del jardín. La mordedura de la araña saltadora no es venenosa, aunque causa reacciones si se es alérgico.
Síntomas de las mordeduras de araña
A veces no se nota la mordedura de la araña, sino hasta un rato después. No obstante, cuando esto sucede y logran penetrar la piel e inocular la toxina, se pueden generar diversas complicaciones de salud.
Por supuesto, tales reacciones varían de acuerdo con la especie del arácnido en cuestión. Entre los síntomas de las mordeduras de araña, algunos comunes y otros no tan frecuentes son los siguientes:
- Enrojecimiento de la piel con inflamación.
- Picazón o ardor con sensación de calor.
- Ronchas.
- Heridas visibles con desgarramientos de la piel.
- Ampolla en el lugar de la punción.
- Dolor de cabeza.
- Calambres musculares.
- Fiebre con escalofríos.
- Babeo (por mordedura de la errante brasileña.
- Piel púrpura alrededor de la picadura (reclusa marrón).
- Supuración de la herida (vagabunda).
- Rigidez abdominal, cólicos, náuseas y vómitos (viuda negra).
- Aceleración de la frecuencia cardíaca (tarántula).
- Ganglios del cuello inflamados (araña lobo).
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Primeros auxilios en caso de mordedura de araña
Cuando se detecta que es alguna de las especies no venenosas, se pueden aplicar diversas medidas tras la mordedura de araña. Entre las mismas cabe mencionar a las siguientes:
- Limpiar y desinfectar el área para prevenir infecciones bacterianas agregadas.
- Aplicar hielo local, en y alrededor de la picadura durante algunos minutos.
- Mantener elevado el miembro picado para reducir la inflamación.
- Tomar algún antihistamínico de venta libre, como la difenhidramina.
Todo esto funciona mejor si se aplica dentro de las primeras 24 horas posteriores a la mordedura de la araña.
Riesgos y complicaciones de la mordedura de araña
Los síntomas de la mordedura de araña suelen ceder con el tiempo, incluso sin tratamiento. A lo sumo, algunos permanecen unos días o una semana. Pero se debe buscar atención médica si el malestar no desaparece o se hace más intenso.
Es posible que el médico recete algún tratamiento con antibióticos, corticosteroides o analgésicos si hay infección, espasmos musculares o para disminuir el dolor. También se recomienda aplicar una inyección de refuerzo para prevenir el tétanos. Esto puede requerirse en las mordeduras de araña camello.
Eventualmente, en algunas ocasiones se puede practicar cirugía para retirar tejido. Una de las posibles complicaciones de la mordedura de arañas vagabundas es la necrosis.
Esto también sucede con la picadura de la Loxosceles reclusa, que provoca lesiones necróticas rápidamente progresivas que llevan incluso a la amputación de la extremidad afectada. Asimismo, pueden originar manifestaciones sistémicas, como coagulopatías, hemólisis intravascular e insuficiencia renal.
Las mordeduras de algunas especies pueden provocar daño tisular, aunque en muy raras ocasiones. Asimismo, no son frecuentes los fallecimientos; sin embargo, se han reportado casos de muertes atribuidas a la errante brasileña.
¿Cuándo acudir a servicios de emergencia?
Hay que llamar o acudir a servicios de emergencia si la mordedura fue de una araña que se sospecha puede ser peligrosa (como la viuda negra o la reclusa marrón). Del mismo modo, si la persona muestra alguno de los siguientes signos:
- Anafilaxia o shock anafiláctico.
- Problemas para respirar.
- Dolor intenso o agudo.
- Área de la inflamación que se propaga con líneas rojas.
Ante la duda, siempre será mejor tener una evaluación profesional. Los médicos están capacitados para distinguir una picadura de otra y aplicar el abordaje terapéutico correspondiente.
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