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Divorcio del sueño: si tu pareja no te deja dormir, esto te interesa

4 minutos
Dormir en camas o habitaciones separadas no es una señal de crisis, sino una estrategia para mejorar el descanso.
Divorcio del sueño: si tu pareja no te deja dormir, esto te interesa
Publicado: 29 octubre, 2025 20:00

La imagen de una pareja durmiendo abrazada puede parecer muy romántica, pero es probable que la realidad sea muy diferente. Para muchas personas, las noches se tratan de una sinfonía de ronquidos o una batalla por las sábanas que les impiden dormir bien.

En particular, las mujeres son las más afectadas, ya que diversos estudios han encontrado que duermen peor en pareja que los hombres. Por eso, muchas parejas optan por una alternativa poco convencional pero efectiva al descansar: el “divorcio del sueño”. Te contamos de qué se trata.

El problema de dormir juntos: menos descanso para las mujeres

Las perturbaciones del sueño más comunes al dormir en pareja, como los ronquidos, los distintos horarios para acostarse o las preferencias opuestas pueden dificultar el descanso. Pero lo cierto es que no afectan a todas las personas por igual. Muchas investigaciones han encontrado que las mujeres tienden a dormir peor que los hombres cuando lo hacen en pareja. 

Las causas son variadas. Por un lado, cuando sus parejas roncan, las mujeres tienen un sueño más fragmentado, tal como menciona un estudio del European Respiratory Journal. Por otro, influye que tienen una mayor sensibilidad al cortisol, la hormona del estrés que mantiene la vigilia. Esto significa que suelen mantener un estado de alerta inconsciente y se despiertan ante el menor ruido o movimiento de la pareja.

Por si fuera poco, los científicos han encontrado que la melatonina (una hormona que contribuye al sueño) se secreta antes en las mujeres que en los hombres. Esto significa que el reloj biológico femenino puede estar “desajustado”, lo que en consecuencia afecta su calidad de sueño y provoca que duerman peor que los hombres.

“Muchas de estas razones se relacionan directamente con las hormonas que nos hacen mujeres y nos permiten tener hijos; y, por supuesto, tener hijos y cuidarlos también influyen en el grado de privación de sueño que experimentan las mujeres”.

Marjorie Soltis, neuróloga y especialista en medicina del sueño

Una solución: el “divorcio del sueño”

Frente a esta dificultad para dormir bien, aparece la opción de hacer un “divorcio del sueño”, es decir, dormir separados para mejorar la calidad del descanso. Puede ser tanto en camas separadas dentro de la misma habitación como en habitaciones diferentes.

No se trata de un indicador de falta de amor o de problemas conyugales. En realidad, es un método para que ambos puedan tener las horas de sueño reparador que necesitan. Y, para las mujeres en particular, puede significar menos despertares nocturnos a causa de la pareja.

Los beneficios de dormir separados

“El término puede sonar alarmante, pero no se trata de terminar una relación; se trata de priorizar la salud del sueño y abordar los problemas de sueño que puedan estar erosionando la relación, como los ronquidos, las vueltas en la cama o los diferentes horarios de sueño”.

Dra. Seema Khosla de la Academia Estadounidense de Medicina del Sueño

Cuando la pareja duerme separada, pueden notar beneficios tanto individuales como en la relación. Lo más probable es que ambos tengan un mejor humor, más energía y capacidad para concentrarse.

Esto también conduce a que sus interacciones sean más amables, ya que terminarán con ese resentimiento nocturno que se acumula hacia la persona que impide el descanso. Y, en algunos casos, hasta puede mejorar su intimidad, porque ambos buscan más conexión durante el día.

Cómo plantear un “divorcio del sueño” a tu pareja

Si consideras que dormir separados puede ayudarte, lo mejor es abordar el tema con tu pareja. Aunque sea delicado, te ofrecemos unos consejos para lograrlo de forma constructiva:

  • Céntrate en los beneficios: explícale cómo un mejor descanso beneficiará a ambos. Puedes decirle algo como: “si ambos descansamos mejor, tendremos más energía para disfrutar de nuestro tiempo juntos”.
  • Enfócate en el “nosotros”: en lugar de culpar a tu pareja porque no te permite dormir como deseas, prueba con un enfoque colaborativo, como: “he notado que ninguno de los dos está descansando bien y creo que nos está afectando”.
  • Propón un período de prueba: para eliminar la presión y evaluar si les funciona, sugiere hacerlo como un experimento. “¿Qué te parece si probamos dormir en habitaciones separadas durante una semana, a ver cómo nos sentimos?”.

Priorizar el sueño no es un acto egoísta, sino una forma de cuidarse a sí mismo y, por extensión, a la relación. Domir juntos o separados no es más que una decisión personal. Aunque existan estigmas al respecto, la idea de que las parejas deben dormir juntas no es una regla inquebrantable. Recuerden que la mejor manera de descansar es la que les funcione a ambos, para sentirse con buen ánimo a diario y tener una pareja más feliz.

La imagen de una pareja durmiendo abrazada puede parecer muy romántica, pero es probable que la realidad sea muy diferente. Para muchas personas, las noches se tratan de una sinfonía de ronquidos o una batalla por las sábanas que les impiden dormir bien.

En particular, las mujeres son las más afectadas, ya que diversos estudios han encontrado que duermen peor en pareja que los hombres. Por eso, muchas parejas optan por una alternativa poco convencional pero efectiva al descansar: el “divorcio del sueño”. Te contamos de qué se trata.

El problema de dormir juntos: menos descanso para las mujeres

Las perturbaciones del sueño más comunes al dormir en pareja, como los ronquidos, los distintos horarios para acostarse o las preferencias opuestas pueden dificultar el descanso. Pero lo cierto es que no afectan a todas las personas por igual. Muchas investigaciones han encontrado que las mujeres tienden a dormir peor que los hombres cuando lo hacen en pareja. 

Las causas son variadas. Por un lado, cuando sus parejas roncan, las mujeres tienen un sueño más fragmentado, tal como menciona un estudio del European Respiratory Journal. Por otro, influye que tienen una mayor sensibilidad al cortisol, la hormona del estrés que mantiene la vigilia. Esto significa que suelen mantener un estado de alerta inconsciente y se despiertan ante el menor ruido o movimiento de la pareja.

Por si fuera poco, los científicos han encontrado que la melatonina (una hormona que contribuye al sueño) se secreta antes en las mujeres que en los hombres. Esto significa que el reloj biológico femenino puede estar “desajustado”, lo que en consecuencia afecta su calidad de sueño y provoca que duerman peor que los hombres.

“Muchas de estas razones se relacionan directamente con las hormonas que nos hacen mujeres y nos permiten tener hijos; y, por supuesto, tener hijos y cuidarlos también influyen en el grado de privación de sueño que experimentan las mujeres”.

Marjorie Soltis, neuróloga y especialista en medicina del sueño

Una solución: el “divorcio del sueño”

Frente a esta dificultad para dormir bien, aparece la opción de hacer un “divorcio del sueño”, es decir, dormir separados para mejorar la calidad del descanso. Puede ser tanto en camas separadas dentro de la misma habitación como en habitaciones diferentes.

No se trata de un indicador de falta de amor o de problemas conyugales. En realidad, es un método para que ambos puedan tener las horas de sueño reparador que necesitan. Y, para las mujeres en particular, puede significar menos despertares nocturnos a causa de la pareja.

Los beneficios de dormir separados

“El término puede sonar alarmante, pero no se trata de terminar una relación; se trata de priorizar la salud del sueño y abordar los problemas de sueño que puedan estar erosionando la relación, como los ronquidos, las vueltas en la cama o los diferentes horarios de sueño”.

Dra. Seema Khosla de la Academia Estadounidense de Medicina del Sueño

Cuando la pareja duerme separada, pueden notar beneficios tanto individuales como en la relación. Lo más probable es que ambos tengan un mejor humor, más energía y capacidad para concentrarse.

Esto también conduce a que sus interacciones sean más amables, ya que terminarán con ese resentimiento nocturno que se acumula hacia la persona que impide el descanso. Y, en algunos casos, hasta puede mejorar su intimidad, porque ambos buscan más conexión durante el día.

Cómo plantear un “divorcio del sueño” a tu pareja

Si consideras que dormir separados puede ayudarte, lo mejor es abordar el tema con tu pareja. Aunque sea delicado, te ofrecemos unos consejos para lograrlo de forma constructiva:

  • Céntrate en los beneficios: explícale cómo un mejor descanso beneficiará a ambos. Puedes decirle algo como: “si ambos descansamos mejor, tendremos más energía para disfrutar de nuestro tiempo juntos”.
  • Enfócate en el “nosotros”: en lugar de culpar a tu pareja porque no te permite dormir como deseas, prueba con un enfoque colaborativo, como: “he notado que ninguno de los dos está descansando bien y creo que nos está afectando”.
  • Propón un período de prueba: para eliminar la presión y evaluar si les funciona, sugiere hacerlo como un experimento. “¿Qué te parece si probamos dormir en habitaciones separadas durante una semana, a ver cómo nos sentimos?”.

Priorizar el sueño no es un acto egoísta, sino una forma de cuidarse a sí mismo y, por extensión, a la relación. Domir juntos o separados no es más que una decisión personal. Aunque existan estigmas al respecto, la idea de que las parejas deben dormir juntas no es una regla inquebrantable. Recuerden que la mejor manera de descansar es la que les funcione a ambos, para sentirse con buen ánimo a diario y tener una pareja más feliz.


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