Remedios caseros para el dolor de piernas
Cuando las piernas duelen o están inflamadas la sensación que experimentamos llega a ser insoportable. Las causas del dolor de piernas son diversas, aunque los síntomas sean bastante similares.
Vale la pena analizar primero a qué se debe el dolor y luego buscar remedios caseros. De todo ello vamos a hablar en este artículo. Si sufres dolor de piernas, presta mucha atención.
Causas y signos del dolor de piernas
El dolor de piernas puede tener orígenes diferentes. Normalmente no es síntoma de enfermedad grave, pero sí puede resultar incapacitante. Entre los detonantes de piernas doloridas debemos destacar:
- Retención de líquido (edemas)
- Insuficiencia cardíaca
- Estar muchas horas en la misma postura
- Esguinces o desgarros
- Inflamación del nervio ciático
- Artritis
- Celulitis
- Diabetes
- Ingesta de algunos medicamentos
Junto al dolor pueden aparecer otras molestias, como hinchazón, sensación de pesadez, molestias, hormigueos y calambres
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Recetas caseras para el dolor de piernas
Una vez sepas cuál es la razón del dolor de piernas, es preciso que consultes con un médico. Solo él te puede indicar un tratamiento adecuado.
Sin embargo, puedes complementar ese tratamiento con remedios naturales y ciertos buenos hábitos que mejorarán el cuadro. Toma nota de algunos de ellos.
Agua tibia
Este remedio está indicado cuando el dolor está causado por el síndrome de piernas cansadas debido al sedentarismo o a un trabajo muy rutinario cuando llegues a casa sumérgelas en la tina o un recipiente grande para que el agua cubra lo más posible.La temperatura debe ser lo más caliente que puedas soportar. Añade un puñado de sal gruesa, sales de baño o hierbas antiinflamatorias como la malva. Deja actuar media hora.
Masajes
Puede ser una vez que saques las piernas del agua o al terminar de bañarte. A finalizar el día este “mimo” beneficiará la circulación de la sangre y reducirá la hinchazón.
Podrás dormir cómodamente. Emplea unas gotas de aceites esenciales (geranio, menta y romero los más aconsejados) y realiza movimientos circulares suaves.
El aceite de coco es uno de los más adecuados para tratar dolores en las extremidades inferiores. Se trata de un eficaz calmante que se emplea en la medicina natural. Puedes aplicarlo hasta 3 veces al día si las molestias son severas.
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Comer y beber bien
La mala alimentación y la falta de nutrientes puede estar causándote dolor en las piernas. Come de forma saludable y añade a tu dieta diaria frutas y verduras crudas (5 piezas al día).
A su vez, es imprescindible beber 2 litros de agua para evitar la retención de líquidos y que la comida tenga poca cantidad de sal.
Consumir infusiones naturales
Las plantas nos pueden ayudar a reducir la inflamación y mejorar la circulación. Muchas especies son muy saludables y tienen efectos casi inmediatos. Las infusiones más recomendables son las de romero, cola de caballo y diente de león. Puedes ingerir hasta 2 tazas por día, una siempre por la noche.
Entre las hierbas estrella para aliviar los dolores de piernas se encuentra el ginko biloba. Se trata de un excelente tratamiento para los problemas circulatorios en general y de las piernas en particular.
Se puede consumir el té de la planta, hasta 3 tazas al día. Otra presentación es la tintura. La dosis es de 20 gotas, 2 veces al día. Siempre es bueno consultar con un profesional antes de ingerirla.
Comer nueces
Son muchas las propiedades de este fruto seco debido a sus ácidos grasos saludables. En la medicina china, por ejemplo, las nueces se comen en ayunas para favorecer el riego sanguíneo de las piernas y reducir el dolor en las extremidades. Toma 3 nueces antes del desayuno durante 2 semanas seguidas.
Hacer actividad física
Si estás muchas horas de pie o sentado te convendrá practicar deporte, al menos, 2 veces a la semana. Por ejemplo, la natación o el aquagym son perfectas opciones de baja intensidad y que pueden practicarse a cualquier edad y condición.
Otras alternativas son las caminatas, andar en bicicleta y bailar. Lo importante es que entres en movimiento y que las piernas cambien la posición a la que están siempre acostumbradas.
También sería bueno que tomases descansos cada 2 horas en el trabajo o en casa. Si estás en el escritorio, levántate y da una vuelta alrededor de la oficina. Si estás parada, trata de sentarte un poco o caminar.
Cuando llegues a casa eleva las piernas con un cojín, una silla o colocando los talones en la pared. Así la sangre acumulada se redirigirá a otras partes del cuerpo.
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Hacer friegas de vinagre
El vinagre de manzana es ideal para las personas que sufren de varices. Las venas varicosas son un problema muy habitual, sobre todo en mujeres con sobrepeso, embarazadas o mayores de 60 años. Para reducir el dolor, el hormigueo y la hinchazón, así como la sensación de pesadez y el picor, usa este producto.Estimulará la circulación de la sangre y mejorará los síntomas. Simplemente tienes que embeber un trozo de lienzo o tela con vinagre y masajear enérgicamente en la zona afectada. No enjuagues y deja que el líquido se absorba.
Enfriar y calentar
El contraste entre el calor y el frío puede ser un buen remedio para reducir el dolor de piernas y disminuir la hinchazón. Es un método que, por ejemplo, usan los deportistas para las inflamaciones musculares.
Primero se debe aplicar una compresa fría durante 15 minutos (por ejemplo, una bolsa con cubos de hielo). Después se colocan compresas calientes durante otros 15 minutos (puede ser la almohadilla eléctrica, introducir las piernas en agua caliente o mojar una toalla en agua hirviendo). Reactivará la circulación.
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