Lo que debes saber de los remedios caseros y consejos para depurar el hígado
La información de este artículo proviene de fuentes científicas que presentan datos basados en evidencia. El artículo ha sido revisado y/o escrito por profesionales de la salud para garantizar la más amplia precisión médica basada en estudios científicos actuales, cumpliendo además con los estándares Fact Checked. Más información
Los remedios caseros y los consejos para depurar el hígado se han divulgado desde hace varias décadas. El argumento es que este órgano reduce su función debido a la acumulación de toxinas que provienen de malos hábitos como la alimentación, el uso habitual de productos químicos, el tabaquismo, el consumo de alcohol, entre otros.
Y aunque es cierto que todo esto compromete en mayor o menor medida la salud hepática, hay mitos asociados a la depuración que pueden llegar a comprometer la salud. ¿Qué hay que saber al respecto? ¿Es posible desintoxicar este órgano?
Remedios caseros y consejos para depurar el hígado: ¿funcionan?
Por mucho tiempo, los remedios caseros y los consejos para depurar el hígado han sido tema de interés para miles de personas en todo el mundo. Esto se debe a la idea extendida de que este órgano se enferma debido a su exposición a diferentes fuentes de toxinas.
Así las cosas, se han revelado dietas, jugos, tés, suplementos y otra variedad de productos que prometen «depurar» o «purificar» este órgano para reestablecer su salud. No obstante, estos pensamientos están errados. ¿Por qué motivo?
Pues bien, hay que tener en cuenta que, en condiciones normales, el hígado impide que las sustancias dañinas se acumulen en el cuerpo. Entre sus múltiples funciones, es un órgano que filtra las toxinas y los desechos para su posterior excreción.
Dicho esto, no requiere de un «impulso» o una «fórmula especial» para desintoxicarse. En lugar de esto, conviene llevar un estilo de vida saludable que promueva a largo plazo su salud. Con ello no solo se garantiza la eliminación de toxinas, sino también un estado de bienestar general.
Hasta la fecha no hay evidencias científicas sobre la seguridad y eficacia de los métodos para depurar el hígado. Por el contrario, se advierte de los peligros de una práctica inadecuada de estas estrategias.
Los remedios para depurar el hígado pueden ser peligrosos
Un gran número de remedios para depurar el hígado se elaboran a partir de plantas y elementos de origen natural. De ahí la idea de que son «inofensivos» y que pueden tomarse de forma regular. Pero nada más lejos de la realidad, pues su ingesta sí supone riesgos potenciales.
Tal y como lo explica un artículo divulgado en National Center for Biotechnology Information, los suplementos dietéticos y de hierbas no están regulados por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA). Sumado a esto, algunos han exhibido efectos hepatotóxicos cuando se toman en grandes dosis o de forma prolongada.
Otro de sus riesgos proviene de la idea de que son mejores que los fármacos o tratamientos recetados por el médico cuando hay un problema hepático. En realidad no son un sustituto de las terapias profesionales y también acarrean riesgos y contraindicaciones.
De todos modos, sí hay plantas, suplementos e ingredientes asociados a una buena salud hepática. Por sí mismos no depuran el hígado, pero sí apoyan su función de desintoxicación del cuerpo. Los más populares son los siguientes:
- Cardo mariano (silimarina).
- Ginseng.
- Té verde.
- Regaliz.
- Cúrcuma.
- Ajo.
- Jengibre.
- Danshen.
- Ginkgo biloba.
- Astrágalo.
Consejos para ayudar al hígado a depurar el cuerpo
No hay un método específico para depurar el hígado, ya que por sí mismo cumple esta función cuando nada interfiere con su salud. Sin embargo, sí hay algunos consejos que promueven su bienestar para que filtre los desechos del organismo sin problema. ¡Ponlos en práctica!
- Mejorar los hábitos alimentarios: incrementa el consumo de frutas, vegetales, cereales integrales, frutos secos, semillas y carnes magras. Además, limita la ingesta de ultraprocesados y azúcares.
- Aumenta el consumo de agua: la recomendación es de alrededor de dos litros de agua al día, pero esta cantidad puede variar según las características individuales. Los deportistas, las embarazadas, los niños, entre otros, pueden requerir un poco más.
- Evitar los malos hábitos: el consumo de tabaco, el alcohol, el sedentarismo y otros malos hábitos perjudican la salud hepática. Por tanto, debes evitarlos en la medida de lo posible.
- Evitar la automedicación: el daño hepático puede ser el resultado de un consumo desmedido de medicamentos, incluso de venta libre. Por eso, siempre hay que tomarlos bajo supervisión médica y de forma puntual.
- Hacer ejercicio físico: la actividad física desempeña un papel relevante en la salud. En el caso del hígado, coadyuva en la prevención y el tratamiento del hígado graso.
- Protegerse al manipular productos químicos: los compuestos volátiles de las pinturas, los productos de limpieza, los perfumes, los aerosoles, entre otros, pueden derivar problemas en el hígado a mediano y largo plazo. Por tanto, lo idóneo es protegerse con el uso de guantes, mascarilla y gafas.
¿Qué hay que recordar?
Pese a la popularidad de los métodos detox para el hígado, no hay evidencias que avalen la teoría de la desintoxicación o depuración. Una vez el hígado se enferma o presenta dificultades en sus funciones, lo mejor es acudir al médico.
Las limpiezas hepáticas no pueden restaurar la salud de este órgano. Por eso, lo mejor es adoptar un estilo de vida saludable que contribuya a su bienestar. Así, puede desintoxicar el organismo como parte de sus funciones habituales.
Te podría interesar...