Top coat para las uñas: para qué sirve y cómo se usa
Una vez finalizada la manicura, el reto es conservarla intacta lo máximo posible. Por fortuna, para ayudar en esta tarea, actualmente se utiliza el top coat. Se trata de un producto que sella el esmalte para protegerlo y prolongar su durabilidad. De paso, le aporta brillo a las uñas para que luzcan perfectas.
Hay que destacar que es incoloro y no altera ni el color ni el decorado que se ha aplicado con anterioridad. Además, está disponible con acabado brillante o mate. A continuación, te contamos en detalle para qué sirve, cómo utilizarlo y qué debes tener en cuenta al aplicarlo. ¡Sigue la lectura!
¿Qué es top coat?
El top coat, también llamado «capa superficial», es un producto que se utiliza como acabado final durante las manicuras. Su función es crear una capa protectora que evita que el esmalte se deteriore antes de tiempo por el contacto o roce con diversas superficies.
Así mismo, consigue acelerar el secado de los esmaltes y hace que las uñas luzcan intactas por más semanas. Su composición evita que las pinturas aplicadas en las uñas se descascaren o sufran agrietamientos. De paso, aporta brillo (aunque hay con acabado mate).
Top coat es un término anglosajón que se puede traducir literalmente como capa o cubierta (coat), superior (top).
¿Cómo se usa el top coat?
Como lo hemos comentado, el top coat se utiliza tras finalizar la aplicación del esmalte de uñas. Lo idóneo es dejar secar bien las uñas para que el esmalte no presente deterioro o desgaste. El producto se aplica en una capa muy fina que se extiende bien por toda la uña.
Hay que evitar usar demasiada cantidad, ya que pueden quedar grumos, bultos o detalles que sobresalen y que dañan la manicura. En sí, la aplicación es similar a la de un esmalte convencional.
- Comienza desde arriba y en el centro de la uña.
- Luego, desliza hacia la media luna, para pasar a los laterales y volver al extremo. Trabaja un lado a la vez.
Recomendaciones para aplicar el top coat
Si eres de las que se hacen la manicura en casa, ten en cuenta las siguientes recomendaciones cuando uses el top coat:
- Procura que la capa sea delgada, lo más que se pueda.
- Para esto, y con miras a agilizar el secado y conseguir un mejor acabado, debes mojar poco el pincel.
- No hagas mucha presión con el pincel; si el esmalte no está bien seco, esto evitará que se arruine.
- Espera de 5 a 10 minutos para que acabe de sellar y secar.
- No soples, pues con esto solo conseguirías arrojar gotas de saliva a las uñas.
- Si dispones de una lámpara para secado, puedes usarla para terminar de sellar el esmaltado.
Aunque el top coat es de secado rápido, deja pasar por lo menos una hora antes de mojar tus manos, sobre todo si vas a utilizar agua caliente.
¿Para qué sirve el top coat? Beneficios
En sí, el top coat es un producto incoloro. A pesar de esta característica, sus efectos pueden notarse en su acabado brillante o mate, según las preferencias de cada una. Más allá de esto, tiene una función protectora sobre el esmalte, ya que lo sella y evita que se dañe.
De ahí que se considere uno de los elementos imprescindibles en toda manicura. Sus beneficios están asociados con la durabilidad y el acabado de esta. Abarcan lo siguiente:
- Ayuda a cubrir pequeñas imperfecciones.
- Sella el esmalte.
- Acelera el secado.
- Conserva el color por más tiempo.
- Te evita tener que hacer retoques.
- Previene la aparición de agrietamientos y filtraciones.
- Protege de golpes, roces y enganches.
- Puede aportar brillo extra o dar un acabado mate.
- No altera el color que hayas decidido aplicar.
¿Qué tipos hay en el mercado?
Hay diferentes tipos de top coat. No solo es cuestión de gustos, sino también de necesidad. A continuación, los detallamos.
- De secado rápido: en menos de un minuto está listo; ideal para las mujeres que viven a toda prisa o para manicuras rápidas de última hora.
- De acabado brillante: hace que tus uñas reluzcan.
- Top coat mate: al contrario del anterior, realza el color del esmalte, pero sin resaltar el brillo.
- Fortalecedor para uñas frágiles: te cuida, además de que te aporta el acabado necesario, fijando el esmalte.
- Endurecedor: sella el esmalte y previene las grietas.
Y hay más: enriquecidos con queratina, para estimular el crecimiento, para protección de los rayos UV, entre otras fórmulas.
¿En qué se diferencia el top coat de la base y del brillo?
Es importante aclarar que el top coat no funciona ni como base ni como brillo. Aunque pueden tener colores y texturas similares, se diferencian en sus funciones y, más aún, en el momento de ser aplicados durante el proceso de la manicura.
Como algunas saben, la base es el primer paso y se aplica para favorecer la fijación del color, dar uniformidad a la superficie y evitar líneas o surcos. Asimismo, hidrata, protege las uñas de los daños del esmalte y ayuda a su cuidado.
He allí dos diferencias; la base se coloca al inicio, el top coat al final. La base protege la cutícula y el top coat protege el esmalte y todo el proceso de la manicura. Sin embargo, como vimos anteriormente, hay top coats que también contribuyen con la salud.
Considerando esto, lo ideal es utilizar ambos productos para que la manicura se prolongue por más tiempo y para favorecer el cuidado de las uñas naturales.
Por otra parte, también hay que aclarar es que el top coat no es lo que a menudo llamamos brillo. Si bien pueden tener ese acabado, el brillo convencional no aporta la protección del top coat, ni alarga la durabilidad del esmalte.
Un producto que ayuda al cuidado integral de tus uñas
De seguro, como muchas personas, buscas que tus uñas crezcan fuertes y saludables. En este sentido, incorporar una capa de top coat en la manicura aporta bastante.
Puedes pedirle a tu manicurista de confianza que finalice el proceso con una capa de este producto. Si lo haces en casa, adquiere uno para sustituir el brillo convencional. Como ves, es fácil de aplicar y tiene interesantes beneficios.
Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.