5 síntomas comunes de retención de líquidos
Revisado y aprobado por el médico Nelton Abdon Ramos Rojas
¿Sabes cuáles son los síntomas comunes de retención de líquidos? Seguramente, al pensar en ello, quizás tengas en cuenta la característica hinchazón de las piernas, pero tengas algunas dudas respecto a qué otras molestias pueden presentarse a la vez.
Descuida, a continuación te comentaremos cuáles son los síntomas comunes de retención de líquidos y otros datos de interés que te permitirán tanto prevenir como abordar mejor este problema, para que no afecte tu bienestar. ¿Listo? ¡Vamos con ello!
La retención de líquidos es un problema común
La retención de líquidos no es una enfermedad, sino un síntoma que puede surgir a partir de diversas causas. Puede presentarse como consecuencia de un problema circulatorio, alteraciones hormonales, pero también por el consumo excesivo de sal y otras cuestiones.
En vista de que puede causar incomodidades en el día a día, es conveniente consultar con el médico, para conocer la causa, qué medidas es oportuno aplicar y cuál es el tratamiento más recomendable para el caso.
Generalmente, la retención de líquidos afecta las extremidades inferiores. Sin embargo, también puede afectar otras zonas del cuerpo, como el abdomen, las extremidades superiores e incluso, el rostro, en algunos casos.
Aunque algunas veces esta molestia puede pasar desapercibida, casi siempre desencadena una serie de reacciones en el organismo debido al descontrol que produce en los procesos inflamatorios.
Por esta razón, y para evitar complicaciones, es importante conocer cómo se manifiesta y qué hábitos lo pueden ayudar a controlar.
Síntomas de retención de líquidos que no debes ignorar
Los casos leves de retención de líquidos pasan desapercibidos o se confunden con un ligero aumento de peso corporal. Sin embargo, cuando se empieza a complicar, se producen una serie de síntomas que pueden reducir la capacidad para llevar a cabo algunas tareas cotidianas.
1. Inflamación de las extremidades
El primero de los síntomas comunes de retención de líquidos es la inflamación de las extremidades inferiores y superiores. Estas lucen con más volumen de lo habitual y pueden presentar dificultades circulatorias debido a la presión que sufre el sistema valvular por el exceso de agua.
Otras zonas que pueden inflamarse por una retención de líquidos son el abdomen, el pecho y el rostro.
2. Sensación de pesadez
Debido a este trastorno es común sentir una fuerte sensación de pesadez en el cuerpo, sobre todo al realizar algunas actividades de exigencia física.
La acumulación anormal de líquidos produce una carga extra en el peso corporal, lo que afecta la salud muscular, linfática y circulatoria.
3. Celulitis
Hay muchos factores que influyen en la aparición de la celulitis en los glúteos y las piernas. No obstante, producto de la retención, esta puede volverse más notoria y difícil de tratar.
Aunque muchos tratamientos externos ayudan a reducirla, es primordial tratar la acumulación de líquidos para poder notar una mejoría.
*Para obtener el tratamiento adecuado a tu caso, lo más adecuado es que consultes con el médico de cabecera o directamente con el dermatólogo.
4. Cansancio y malestar general
Cuando hay algo que falla en el organismo, este procurará compensar los desequilibrios haciendo un mayor esfuerzo, lo cual suele conducir al cansancio. Por ello, otro de los síntomas comunes de retención de líquidos es el cansancio y el malestar general.
5. Reducción de la orina
Como los riñones no consiguen procesar de forma óptima los líquidos que hay en el organismo, la orina se reduce y aumenta el riesgo de infecciones en el sistema urinario.
¿Cómo prevenir la retención de líquidos?
Hay muchos hábitos y remedios que pueden ayudar a prevenir y tratar este problema. Aunque muchos factores influyen en su aparición, mejorar el estilo de vida puede minimizar de forma significativa el riesgo.
Limitar el consumo de sal
El consumo excesivo de sal produce desequilibrios en el organismo que conducen a la retención de líquidos.
Por este motivo es importante limitar su consumo, no solo evitando la sal de mesa, sino reduciendo la ingesta de alimentos que contienen sodio añadido, tales como:
- Embutidos.
- Quesos curados.
- Conservas en lata.
- Golosinas y snacks.
- Alimentos ultraprocesados.
- Bebidas alcohólicas y carbonatadas.
Incrementar el consumo de agua
Un bajo consumo de agua y bebidas saludables es un motivo principal por el que se produce la retención. Beber agua regula la circulación y optimiza el trabajo de los riñones.
Consumir alimentos diuréticos
Hay una amplia variedad de alimentos diuréticos que pueden apoyar los procesos que remueven el exceso de líquidos del cuerpo. Algunos de los más recomendados son:
- Piña.
- Sandía.
- Melón.
- Jengibre.
- Alcachofa.
- Remolacha.
- Espárragos.
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Evitar el uso de prendas ajustadas
La ropa demasiado ajustada impide la correcta circulación de la sangre y puede influir en la aparición de edema, varices y otras dificultades.
Hacer ejercicio físico
El sedentarismo puede producir desequilibrios inflamatorios en el organismo y dar como resultado problemas de circulación y retención.
Hacer ejercicio físico regular, por lo menos durante 20 o 30 minutos al día, activa la circulación, mejora el proceso de oxigenación celular y apoya los procesos que ayudan a mantener el organismo limpio y en equilibrio.
Si tienes retención de líquidos, debes mejorar tus hábitos
Ahora que ya conoces los síntomas comunes de retención de líquidos, puedes tenerlos en cuenta por si en algún momento llegas a experimentarlos.
Si consideras que sufres de retención de líquidos a menudo, comienza a mejorar tus hábitos de vida cuanto antes. En la medida que lo hagas, notarás una gran mejoría a diario. No obstante, no te olvides de consultar con el médico y de seguir sus indicaciones.
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