Beneficios de la seda y del cobre en las fundas de las almohadas
Revisado y aprobado por la enfermera Leidy Mora Molina
Para nuestra salud es importante dormir lo suficiente en cuanto a tiempo y también que sea un sueño de calidad. Por ello debemos velar por todo lo que está relacionado con alcanzar dicho fin. Esto incluye las fundas de las almohadas.
Las mismas pueden estar confeccionadas con diversos materiales. Muchas son de fibras vegetales, como el algodón o el lino, y otras son de tejidos sintéticos o mixtos, como el poliéster y el nylon.
Algunos materiales se consideran más beneficiosos que otros por las propiedades que aportan. En el presente artículo conoceremos, de manera particular, cuáles son los provechos que tiene la seda y el cobre en las fundas de las almohadas.
¿Qué propiedades tienen las fundas de almohadas de seda?
La seda es una fibra de origen animal. Es producida a partir de la proteína secretada por las larvas de diferentes especies de polillas. La más común es la de la mariposa Bombyx mori, conocida como gusano de seda.
Además de ser utilizada para fibras o telas, la fibra de seda tiene una amplia diversidad de aplicaciones en la industria y en la medicina, según se señala en diferentes investigaciones realizadas al respecto.
Por otra parte, la seda contiene proteínas y aminoácidos entre los que destaca la sericina, la que guarda afinidad con otras proteínas producidas por los humanos. Según estudios, esta sustancia también tiene variedad de usos alimenticios, farmacológicos y cosméticos.
En tal sentido, la sericina presenta diferentes funciones y características, como resistencia a la oxidación, protección de la radiación ultravioleta, inhibición de la actividad de la tirosina y la cinasa, propiedades anticoagulantes, antibacterianas y cicatrizantes.
Beneficios de las fundas de almohadas de seda
Desde el punto de vista de su textura, sin dudas que la seda es una fibra muy agradable al tacto. Por ello se le usa en prendas de vestir, así como en sábanas, fundas y hasta antifaces para dormir.
Pero no es solo por su suavidad, sino que una funda de seda también tiene diversos beneficios para la piel y el cabello. Entre estos tenemos los siguientes:
- Ayuda a prevenir la aparición de arrugas.
- A diferencia del algodón no absorbe las cremas faciales, por lo que no se verán afectados los resultados de los tratamientos que te aplicas en la piel.
- La seda no absorbe la humedad ni el serum, por lo que no se reseca la piel.
- Es hipoalergénica.
- No afecta si tienes acné o eccema, evitando incluso que se propague la irritación a otras zonas.
- La seda no produce fricción, por lo que no daña la cutícula capilar.
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¿Qué propiedades tienen las fundas de almohadas con cobre?
Tal vez, pensar en dormir en funda de almohada con cobre pueda no resultar muy atractivo de buenas a primeras. Pero no hay nada que temer con respecto a la textura, pues están tratadas de modo tal que resultan tan suaves como la seda.
Cuando la piel entra en contacto con las fibras de cobre, los iones de este metal se liberan en las capas más externas de la piel, contribuyendo con el proceso de renovación natural.
Beneficios de las fundas de almohadas con cobre
Es de destacar que el uso de fundas de almohada con partículas de cobre, incrustadas en poliéster o nylon, tiene una base científica. Se han realizado diversas investigaciones al respecto, en las que se demuestran los efectos benéficos del material:
- Tiene propiedades antimicrobianas.
- Permite controlar el acné, previniendo rebrotes.
- Activa la producción de colágeno, mejorando la elasticidad y firmeza de la piel.
- Coadyuva en el proceso de cicatrización.
- Previene el daño por fricción en el cabello.
- Ayuda a reducir y prevenir la aparición de arrugas y líneas de expresión.
Con respecto a este último punto, según un estudio clínico realizado en 2012, se comprobó que los participantes que durmieron sobre una funda de almohada con cobre durante un periodo de 2 meses percibieron disminución significativa de las arrugas alrededor de los ojos.
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¿Cuál debería usar: seda o cobre?
Con respecto a la seda, se destaca su suavidad y el hecho de que mantiene una agradable temperatura, incluso por horas. Por su parte, el tratamiento al que se somete el cobre también hace que se mantenga la suavidad, añadiendo otras propiedades.
Ambos tejidos, con seda y con cobre, coinciden en los beneficios relacionados con el cutis y el cabello, así como en el tratamiento del acné, la prevención de arrugas y el efecto antibacteriano.
Aun cuando es relativamente nuevo el uso en fundas de almohadas, se ha colocado cobre en vendajes de heridas y calcetines para el pie de atleta, así como para prevenir o curar llagas en los pies en pacientes con diabetes.
La almohada es parte de la higiene del sueño
Hay dos aspectos fundamentales con respecto a las almohadas: de qué está hecho el relleno y de qué es la funda. Y así como es importante elegir la almohada perfecta, lo es también tener la funda ideal.
Por otra parte, es clave lavar y desinfectar bien las fundas de las almohadas, ya que están en contacto con la cara, los ojos, la nariz y la boca. No olvidemos que en las mismas se pueden formar o aparecer ácaros.
En el caso de las fundas de seda, para lavarlas se deben tener en cuenta recomendaciones para prendas delicadas, tales como lavar a mano, usar detergentes suaves, enjuagar con agua fría, no exprimir y evitar la secadora, así como la plancha.
Si vas a hacer una inversión en este sentido, debes saber que las fundas de almohada de cobre y seda son un poco más costosas. Por supuesto, no olvides que una adecuada higiene del sueño va mucho más allá de esto.
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