13 posibles causas del dolor en la parte inferior izquierda del estómago

La presencia de dolor en cualquier parte del abdomen es un signo de alarma. Por fortuna, el tratamiento oportuno de sus causas disminuye el riesgo de futuras complicaciones.
13 posibles causas del dolor en la parte inferior izquierda del estómago
Leonardo Biolatto

Revisado y aprobado por el médico Leonardo Biolatto.

Última actualización: 06 julio, 2023

El dolor abdominal constituye uno de las principales motivos de consulta médica a nivel mundial. El mismo puede presentarse de forma generalizada o estar focalizado en punto específico del abdomen. En este sentido, te diremos 13 posibles causas de dolor en la parte inferior izquierda del estómago.

Por lo general, en el cuadrante inferior izquierdo del abdomen se ubica la porción distal del colon descendente, el sigmoide y el recto. Además, alberga una porción del intestino delgado y las vías ureterales, así como el ovario izquierdo en las mujeres y el canal inguinal en los hombres.

Estudios afirman que alrededor de 7 millones de personas acuden a urgencias por dolor abdominal al año en Estados Unidos. El malestar local puede presentarse por alguna afección que se produce por debajo del punto de dolor o por un trastorno que se irradia a la zona.

Causas del dolor en la parte inferior izquierda del estómago

El dolor en la parte inferior izquierda del estómago suele ser de origen benigno. Las molestias leves en esta zona no representan un motivo de emergencia y suelen desaparecer al cabo de un par de días. No obstante, si el dolor persiste o se intensifica es vital buscar atención médica lo antes posible.

1. Diverticulitis

La diverticulitis es la principal causa de dolor en la parte inferior izquierda del estómago. En este sentido, los divertículos son pequeñas dilataciones o herniaciones que se proyectan en la pared del intestino grueso. Estos se forman por un aumento de la presión en ciertos puntos débiles del colon.

La diverticulitis se refiere a la inflamación o infección de los divertículos del colon. Investigaciones sugieren que la diverticulitis se asienta en el 95 % de los casos a nivel del colon sigmoides, con dolor en la parte inferior izquierda del estómago.

Este trastorno es común en las personas mayores de 40 años y se asocia con dietas ricas en carbohidratos. Algunos de los síntomas habituales son los siguientes:

  • Malestar y sensibilidad abdominal.
  • Fiebre y escalofríos.
  • Náuseas y vómitos.

De igual forma, el dolor abdominal suele aparecer posterior a la ingestión de alimentos y aliviarse luego de la defecación. La diarrea y el estreñimiento son alteraciones menos frecuentes asociadas a la diverticulitis. El tratamiento dietético y farmacológico suele aliviar los síntomas en la mayoría de las personas.

Dolor en el abomen.
El dolor de los trastornos intestinales suele ser tipo cólico. Es decir, intermitente con algunos periodos de descanso.

2. Gases

La presencia de gas en el tracto gastrointestinal es resultado del proceso de digestión y absorción de los alimentos. De igual forma, la expulsión de eructos y flatulencias es un fenómeno normal. No obstante, los gases pueden originar malestar y dolor abdominal al estar contenidos en exceso dentro de las vísceras.

En la mayoría de los casos, los hábitos alimenticios poco saludables son los principales responsables de su acumulación. Además, otras causas asociadas son las siguientes:

  • Aerofagia o consumo de aire al comer.
  • Ingestión de alimentos ricos en fibra.
  • Consumo de bebidas gaseosas y cerveza.
  • Comer en exceso o de forma acelerada.
  • Masticar chicle.
  • Fumar.

Por otro lado, el exceso de gases en el colon puede asociarse a una amplia variedad de trastornos médicos. Tal es el caso de la enfermedad de Crohn, el síndrome de intestino irritable y las alteraciones de la microbiota intestinal.

3. Indigestión

La indigestión o mala digestión es denominada por los profesionales de salud como dispepsia. Por lo general, esta afección se asocia con una producción excesiva de ácido y la irritación de las mucosas esofágica, gástrica e intestinal.

El malestar estomacal habitualmente se percibe en la parte alta del abdomen. Sin embargo, las personas pueden presentar dolor en la parte inferior izquierda del estómago. Algunos de los síntomas asociados con la indigestión son los siguientes:

  • Distensión abdominal.
  • Sensación de saciedad molesta luego de comer.
  • Acidez estomacal.
  • Eructos y flatulencias.
  • Náuseas.

Este trastorno suele ser leve y los síntomas disminuyen rápidamente al instaurar el tratamiento. No obstante, las personas deben consultar con un médico especialista en gastroenterología si la indigestión persiste o se le añaden nuevos síntomas.

4. Hernias

Las hernias se definen por la salida de una víscera intestinal rodeada de peritoneo a través de un orificio natural. En la parte anterior del abdomen es posible encontrar hernias epigástricas, umbilicales e inguinales. Estas suelen producir dolor al inclinarse, pujar, toser o levantar objetos.

Por lo general, las hernias son más comunes en los hombres que en las mujeres. De igual forma, en los varones adultos las hernias inguinales son las más frecuentes. Estas aparecen a lo largo del conducto inguinal y pueden palparse en la parte baja del abdomen o en el escroto.

Algunos de los síntomas asociados son los siguientes:

  • Bulto o protuberancia a los lados del pubis o en la ingle.
  • Sensación de presión y ardor en el área afectada.
  • Dificultad para moverse.
  • Aumento de tamaño del escroto.

En la mayoría de los casos, las hernias de gran tamaño o dolorosas requieren resolución quirúrgica. Además, se debe acudir lo antes posible al médico si se presenta fiebre, coloración oscura en la región afectada y debilidad corporal.

5. Cálculos renales

Los cálculos renales o nefrolitiasis son pequeñas piedras duras formadas por sales y minerales en el interior de los riñones. Estos suelen causar un dolor intenso al salir del riñón y descender por los uréteres hasta la vejiga.

Por lo general, el dolor se presenta en el costado del abdomen y luego desciende a la parte inferior izquierda o derecha del estómago. De igual forma, la sensación dolorosa puede transmitirse a la ingle y a la cara interna del muslo.

Algunos de los síntomas que acompañan a esta afección son los siguientes:

  • Micción dolorosa.
  • Orina oscura.
  • Sangre en la orina.
  • Náuseas y vómitos.
  • Fiebre y escalofríos.

Los cálculos renales pueden ser de calcio, oxalato, estruvita, cistina y ácido úrico. El tratamiento depende de la gravedad del cuadro clínico y se basa en la destrucción y expulsión de los cálculos atrapados en la vía.

6. Herpes zóster o culebrilla

La culebrilla o herpes zóster es una erupción cutánea dolorosa causada por el virus de la varicela zóster. Este agente viral es capaz de mantenerse latente en el cuerpo humano posterior al cuadro inicial de varicela, para luego reactivarse.

Por lo general, es más frecuente en personas mayores de 50 años. El síntoma característico es un sarpullido en banda formado por pequeñas vesículas y ampollas agrupadas.

Otros síntomas habituales de esta enfermedad son los siguientes:

  • Ardor y dolor punzante en la piel
  • Hormigueo y entumecimiento.
  • Picazón intensa.
  • Enrojecimiento de la piel.

La neuralgia posherpética es la complicación más frecuente. El tratamiento está orientado a reducir el dolor y aliviar la erupción cutánea. En la actualidad, la vacuna contra el herpes zóster es útil para reducir el riesgo de padecer esta afección.



7. Torsión testicular

La torsión testicular es una afección frecuente en varones entre 12 y 18 años. Esta se produce cuando el testículo gira sobre sí mismo y enrolla el cordón espermático. De esta forma, se produce una obstrucción del flujo sanguíneo al testículo caracterizada por hinchazón y dolor intenso.

En algunos pacientes, el dolor testicular puede extenderse a la parte inferior izquierda y derecha del estómago. Además, los hombres afectados suelen presentar los siguientes síntomas:

  • Aumento en la sensibilidad de la piel que rodea al escroto.
  • Náuseas y vómitos.
  • Ascenso del testículo afectado.
  • Fiebre y escalofríos.

La torsión testicular es un cuadro clínico grave que requiere atención de emergencia. Ante la sospecha es fundamental buscar ayuda médica lo antes posible. Por lo general, la cirugía permite prevenir el daño testicular y preserva la fertilidad del paciente.

8. Torsión ovárica

La torsión ovárica o torsión anexial es el giro del cuerpo del ovario sobre su propio eje. Esta afección también puede involucrar a las trompas de Falopio. El cuadro produce interrupción de la irrigación sanguínea en el área de la torsión.

El dolor suele presentarse en la parte inferior izquierda o derecha del estómago de acuerdo al ovario afectado. El mismo suele aparecer de forma súbita como un cólico intenso e intermitente. Además, algunas mujeres tienen náuseas y vómitos.

Estudios afirman que el embarazo, las terapias hormonales y los quistes ováricos son las principales causas de este trastorno. La torsión ovárica es poco común y aparece durante la edad reproductiva femenina. Ante la sospecha de esta enfermedad se debe buscar atención con un ginecólogo lo antes posible.

9. Cólicos menstruales

El dolor menstrual es denominado por los profesionales de salud como dismenorrea. Este puede aparecer como retorcijones o calambres en la parte baja del abdomen, antes y durante la menstruación. La intensidad del dolor varía de una mujer a otra.

De igual forma, el dolor puede empeorar en caso de flujo menstrual excesivo, expulsión de coágulos y presencia de fibromas. Es importante consultar con un especialista en caso de que el dolor limite las actividades y los síntomas se agraven con el tiempo.

10. Endometriosis

La endometriosis es resultado del crecimiento anormal del endometrio, el tejido que recubre la cara interna del utero. En este caso, crece por fuera del útero y llega a afectar a las trompas de Falopio, los ovarios y el tejido pelviano circundante. Por lo general, se asocia con irritación y malestar en la parte baja del abdomen.

De igual forma, el dolor suele hacerse más intenso durante los episodios menstruales. Además, las molestias perduran varios días después de la menstruación. Otros síntomas frecuentes son los siguientes:

  • Dispareunia o dolor durante las relaciones sexuales.
  • Molestias pelvianas al orinar o defecar.
  • Sangrado menstrual abundante.
  • Diarrea o estreñimiento.
  • Fatiga y nauseas.

Este trastorno constituye una de las causas más comunes de infertilidad en las mujeres. El diagnóstico y el tratamiento oportuno reduce los síntomas y disminuye el riesgo de complicaciones a largo plazo.

11. Quiste de ovario

Los quistes ováricos son sacos de diversos tamaños llenos de líquido que se forman en el interior o en la superficie del ovario. En la mayoría de los casos son pequeños y no generan molestias en la mujer. Además, suelen desaparecer al cabo de un par de meses.

Por otro lado, los quistes ováricos grandes suelen causar dolor intenso en la parte inferior izquierda y derecha del estómago. Algunos pueden romperse, causando sangrado interno y rápido deterioro de la salud.

Los signos de alarma que indican la necesidad de atención son los siguientes:

  • Dolor pelvico o abdominal subito e intenso.
  • Malestar acompañado de náuseas y vómitos.
  • Piel fría y húmeda.
  • Respiración acelerada.
  • Confusión y debilidad.

12. Embarazo ectópico

El embarazo ectópico es resultado de la implantación anormal del ovocito fuera del útero. Por lo general, las trompas de Falopio son el principal sitio afectado. Este óvulo no será capaz de desarrollarse de forma adecuada, aumentando el riesgo de daño a los órganos.

El dolor en la parte baja del abdomen y el sangrado vaginal son los signos tempranos de esta entidad. De igual forma, las mujeres afectadas pueden presentar salida de flujo acuoso, necesidad de defecar y dolor intenso en el hombro. La palidez, la confusión y la debilidad indican la necesidad de atención de emergencia.

Dolor en el embarazo ectópico.
El dolor en el embarazo ectópico es incipiente en la mujer y puede complicarse en poco tiempo.

13. Enfermedad inflamatoria pélvica (EIP)

Este cuadro se trata de la inflamación del aparato reproductor femenino. Las enfermedades de transmisión sexual (ETS) son la causa más común e incluyen a la gonorrea y la clamidia. De igual forma, puede producirse por cualquier bacteria que ascienda por la vagina hasta el útero.

Las mujeres afectadas suelen no presetar ningun síntoma o los mismos son muy leves, dificultando el diagnóstico temprano. Algunos de las manifestaciones asociadas a la enfermedad inflamatoria pélvica son las siguientes:

  • Dolor leve a severo que se extiende a la parte inferior izquierda y derecha del estómago.
  • Molestias durante las relaciones sexuales.
  • Secreción vaginal abundante con mal olor.
  • Fiebre y escalofríos.
  • Molestias al orinar.
  • Sangrado vaginal anormal.

Ante la sospecha de una ETS es fundamental consultar con un especialista lo antes posible. El tratamiento oportuno de este tipo de infecciones es la clave en la prevención de la EIP.

¿Cuándo buscar atención médica?

El dolor en la parte inferior izquierda del estómago es un signo claro de que algo no va bien en el organismo. De igual foma, la presencia de fiebre elevada, hipersensibilidad en el área afectada, heces con sangre, vómitos persistentes y pérdida de peso inexplicable aumentan la necesidad de atención de urgencia.

Las personas deben estar atentas a la presencia de sangrado y síntomas de shock circulatorio. La respiración ajetreada, la piel fria y pálida, la frecuencia cardíaca elevada y la debilidad corporal son síntomas de alarma que requieren el ingreso bajo vigilancia médica y la hospitalización.


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