«Face taping»: una técnica utilizada para suavizar las arrugas con cinta adhesiva
Escrito y verificado por la dermatóloga Maria del Carmen Hernandez
El face taping tomó su lugar en las redes sociales. Se multiplican tutoriales, sobre todo en TikTok, explicando una técnica que, en teoría, ayudaría a reducir las arrugas. Y, en el peor de los escenarios, al menos serviría para disimularlas en el caso de tener que asistir a un evento.
No es un método nuevo, pero recobró fuerza. En el teatro y en las presentaciones de performances se usa con regularidad. Algunos médicos la indican para la rehabilitación de la parálisis facial. Aquí la novedad y la noticia es que se promociona como un lifting casero, no invasivo y ¿efectivo?
¿Qué es el face taping?
El concepto se refiere a una técnica estética que implica el uso de cinta adhesiva en la cara, con el objetivo de proporcionar un efecto de estiramiento. En el face taping se tensa la piel de modo temporal, brindando un aspecto más firme al rostro.
Así, puede emplearse bajo un maquillaje para disimular arrugas. Aunque la propuesta a mediano plazo es emplear las cintas con regularidad, con el fin de que la piel denote menos envejecimiento o, al menos, se atenúen las líneas de expresión.
Si bien la técnica se puede realizar en cualquier momento del día, para la búsqueda del efecto duradero se prefiere la noche, colocando las cintas antes de dormir. En teoría, de este modo se reducen los movimientos nocturnos en la cama que provocan más arrugas.
Los trozos de cinta se colocan, de modo prioritario, en la frente y las mejillas. El material adhesivo utilizado es variable de acuerdo a quien divulgue la técnica. A veces se usa cinta común, pero también se emplean cintas médicas o de fisioterapia.
Empresas especializadas del sector belleza han desarrollado productos diseñados para este fin que se pueden adquirir online o en farmacias.
¿Es efectivo el face taping?
No hay estudios científicos a largo plazo que evalúen la efectividad de este método. Por lo tanto, es imposible determinar si funciona o no.
Lo primero a considerar es que la formación de arrugas en el rostro responde a un proceso multifactorial que afecta proteínas y células. Por ende, un abordaje antienvejecimiento para la piel debería considerar todos estos factores que influyen en la aparición de las líneas de expresión:
- Envejecimiento natural: la pérdida de colágeno y elastina en la piel reduce la tensión de la misma.
- Exposición al sol: la radiación ultravioleta (UV) acelera el proceso, por el llamado fotoenvejecimiento.
- Pérdida de grasa facial: con el paso de los años, la grasa de ciertas zonas de la cara se reduce, lo que puede llevar a la flacidez.
- Estilo de vida: el tabaquismo, el consumo regular de alcohol y una alimentación pobre en antioxidantes contribuye al envejecimiento prematuro.
- Genética: la predisposición genética juega un papel en la cantidad de arrugas que formaremos.
Entonces, el face taping podría tensar la piel para compensar la pérdida de grasa y el deterioro del colágeno y la elastina, pero no le devolvería el tenor a largo plazo. Es decir, algunos beneficios serían temporales, más no podría afirmarse que se detiene el envejecimiento cutáneo.
¿Puedo tener algún beneficio al usar la técnica?
Si consideramos que estamos ante una alternativa temporal y que no depositaremos grandes expectativas en ella, quizás nos podamos beneficiar en algo. En combinación con muchos otros cuidados, mantener los músculos en su lugar por más tiempo tendría el potencial de estimular la tirantez del cutis.
Sobre todo sí se aplica en el horario de la noche. Al usar las cintas en el rostro junto a una posición para dormir boca arriba, evitaríamos el efecto gravedad nocturno que propicia la formación de arrugas, como explica una publicación de Aesthetic Surgery Journal.
Y si nos animamos a un maquillaje cargado para disimular los implementos colocados en el rostro, quizás nos sea de utilidad ante un evento o una sesión de fotografía que tengamos programada. Claro que hay que considerar que este maquillaje debe estar realizado a la perfección, de modo que las cintas no sean obvias y se disimulen.
¿Es seguro?
La seguridad del face taping, en general, es aceptable. Significa que no habrá mayores problemas en que coloques algo de adhesivo en tu rostro de manera ocasional.
Sin embargo, hay consideraciones a tener en cuenta, pues ciertas personas podrían experimentar algunos de los siguientes efectos adversos:
- Irritación cutánea: la cinta adhesiva en la piel, de acuerdo a su material, puede causar alergia, urticaria y enrojecimiento. Lo idóneo sería hacer una prueba pequeña, en un sector delimitado, para luego pasar a un uso más extensivo.
- Restricción del flujo sanguíneo: si la cinta se usa muy apretada, generando tensión excesiva, limitará la irrigación de la piel en esa zona. Al final, será un efecto contrario al que buscamos, pues se restringirá la nutrición de las células del rostro.
- Brotes de acné: limitar la capacidad de «respiración» de la piel y tapar los poros en demasía, sería un factor de riesgo para las personas con diagnóstico de acné. En ellas, las cintas tendrían la capacidad de desencadenar un brote agudo de la enfermedad.
- Lesiones en la piel: además de la irritación, al quitar las cintas puedes hacerlo de un modo brusco que genere escoriaciones en el rostro. Esas heridas no serán mayores, pero afectarán la estética y, si no se cuidan, podrían infectarse.
¿Qué alternativas tengo al face taping?
Ya sabes que el face taping te dará algún beneficio momentáneo, pero nada más. Si te preguntas qué puedes implementar para realmente enlentecer el envejecimiento de la piel, a largo plazo, debes saber que las técnicas más efectivas son las más invasivas y las más costosas.
Por un lado, tenemos los procedimientos cosméticos mínimamente invasivos. Entre ellos, la inyección de bótox es la estrella. La toxina botulínica logra efectos notorios y con un tiempo aceptable de permanencia de los cambios.
También los rellenos dérmicos con ácido hialurónico brindan beneficios, así como el peeling químico. Aunque, como ya mencionamos, no son técnicas caseras y demandan una inversión importante.
De todos modos, siguen siendo alternativas a la cirugía de rejuvenecimiento o lifting facial. Y, de hecho, también resultan menos invasivas que la colocación de hilos tensores en el rostro.
Por su parte, el empleo de productos antienvejecimiento superficiales es otra opción menos costosa, no invasiva y con algunos efectos notorios en las arrugas. Puedes optar por productos con retinoides, ácido hialurónico o hidroxiácidos en cremas, sérums, lociones o emulsiones.
Los efectos del face taping son pasajeros
Antes de colocarte cinta adhesiva en la cara, debes saber el face tiping es una técnica con efectos sutiles y pasajeros. Incluso su uso prolongado es poco realista y, en algunos casos, puede generar más daños que beneficios. Podrías considerarlo para un uso ocasional, en los días previos a un evento importante, por ejemplo, pero no como una solución a largo plazo.
Si de todos modos deseas probarlo, toma las medidas de precaución básicas: emplea cintas hipoalergénicas, no las coloques a demasiada presión y retíralas con cuidado. Si descubres irritación tras el empleo, no continúes con la técnica.
Para más efectividad a largo plazo, modifica tus hábitos de vida. Cuídate de la exposición solar, hidrátate, no fumes ni bebas alcohol. Y ante la duda, consulta con un dermatólogo para que te asesore sobre el mejor método para tu piel.
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