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Mitos y verdades sobre el sexo anal

4 minutos
Incursionar en nuevas prácticas sexuales siempre será un adicional interesante en una relación llena de monotonía. Anímate a descubrir los mitos y verdades que esconde el sexo anal.
Mitos y verdades sobre el sexo anal
Isbelia Esther Farías López

Escrito y verificado por la filósofa Isbelia Esther Farías López

Última actualización: 27 septiembre, 2022

La penetración por detrás es una práctica muy común en la actualidad, pero está rodeada de muchas incógnitas. ¿Has escuchado sobre el tema, pero nunca lo has practicado? ¿Quieres adentrarte en nuevas experiencias? ¿Tu pareja te lo ha propuesto, pero estás indecisa? Te contamos los mitos y verdades sobre el sexo anal para que puedas disfrutarlo sin preocupaciones.

El término sexo anal se emplea especialmente para definir la práctica sexual. Involucra todos los aspectos relacionados con la estimulación erótica en esa zona tan sensible del cuerpo. Esta consiste en la penetración del pene en el ano de otra persona, sea hombre o mujer.

Actualmente, el sexo por detrás, como también se le llama, es una práctica rodeada de muchos tabúes. Tanto o más como los tuvo en su momento el sexo oral. Por ello, es importante saber qué de cierto hay en algunas creencias generalizadas, y cuáles podemos descartar.

Mitos y verdades sobre el sexo anal

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Muchos de los malentendidos alrededor de la práctica provienen de las películas para adultos.

El sexo, como tal, ha roto varias barreras de represión con que la sociedad lo ha cubierto. Sin embargo, no ocurre lo mismo con el sexo anal. El misterio llega a impedir, incluso, que se investiguen y aclaren algunas afirmaciones.

  • Una creencia muy popular es que no se requiere preservativos, pues no hay posibilidades de reproducirse. No obstante, sí existe probabilidad de contagio de infecciones. Es fundamental el uso de condones y su renovación si se alternan la penetración anal y la vaginal.
  • Otro mito común es que el sexo anal es sucio. Sin embargo, el ano es una zona con tantas bacterias como puede haber en la boca o bajo las uñas. Con una buena higiene y uso de preservativos, el riesgo disminuye.

Implicaciones para la salud

Se dice que la penetración anal daña el área, irrita el tejido rectal, provoca fisuras, hemorroides y cáncer de ano. Esto es totalmente falso o, al menos, el sexo anal no siempre es la raíz de estas afecciones.

Sin embargo, como toda práctica sexual, si no se toman las medidas necesarias, el sexo anal puede aumentar las posibilidades de que se presente una afección rectal ya establecida. Por ello, los lubricantes son una herramienta imprescindible a la hora de practicarlo.

Otro de los temores que se le tiene al sexo por detrás es que pueda ser doloroso. La realidad es que como cualquier otro músculo, el esfínter anal no produce dolor al ser penetrado. Tiene que estar bien relajado y lubricado antes del acto.

Es importante el mutuo acuerdo y que la persona que recibirá la penetración desee experimentarlo y establezca sus límites. Aquí, también vuelve a resaltarse la importancia de los lubricantes. De lo contrario, el sexo anal sí puede resultar muy doloroso.

¿Las mujeres no lo quieren? ¿Es asunto de homosexuales?

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Un estigma común es asociar el sexo anal solo con los hombres que practican sexo con hombres. En realidad, se trata de un acto que puede ser muy placentero para las mujeres.

Otro mito que rodea al sexo anal es que solo es una práctica de homosexuales. Además, se dice que en las parejas heterosexuales, la mujer no lo disfruta tanto como el hombre.

  • La verdad es que es una alternativa muy común que, bien llevada a cabo, causa placer tanto a hombres como a mujeres. Incluso, muchas mujeres emplean estimuladores y vibradores anales para aumentar el disfrute.
  • Importante será aclarar que el gusto por el sexo anal no distingue la orientación sexual de los practicantes. Contrario a lo que se cree, los homosexuales no lo realizan de manera tan habitual como se ha difundido en la sociedad.
  • Los hombres heterosexuales que disfrutan con que su pareja les introduzca vibradores o el dedo vía anal, no tienen por qué tener una homosexualidad encubierta, como se tiende a creer comúnmente.
  • El ano es una zona con gran cantidad de terminaciones nerviosas, por lo que su estimulación produce placer. La penetración por detrás produce satisfacción por su relación directa con el cerebro. Es muy cierto que se puede conseguir el orgasmo con esta práctica.
  • Una verdad es que el sexo anal fortalece los vínculos de la pareja. Sin embargo, es cierto que no garantiza una sexualidad plena si uno de los dos amantes no está convencido.

Conversa con tu pareja acerca de los mitos y verdades sobre el sexo anal. Evalúa las posibilidades de experimentarlo desmintiendo prejuicios y asumiendo las medidas correspondientes. No olvides que lo principal para mantener una buena salud sexual es usar protección y acudir con regularidad al médico.


Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.


  • Inmaculada Teva, María Paz Bermúdez, María Teresa Ramiro, Satisfacción sexual y actitudes hacia el uso del preservativo en adolescentes: evaluación y análisis de su relación con el uso del preservativo, Revista Latinoamericana de Psicología, Volume 46, Issue 2, 2014, Pages 127-136, ISSN 0120-0534, https://doi.org/10.1016/S0120-0534(14)70016-0. Disponible en: http://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0120053414700160
  • Medina Jimenez, Alberto Alejandro. (2012). Por el culo: políticas anales. Sexualidad, Salud y Sociedad (Rio de Janeiro), (12), 264-269. https://dx.doi.org/10.1590/S1984-64872012000600012
  • OMS, (3 de agosto de 2016). Infecciones de transmisión sexual. Disponible en: http://www.who.int/es/news-room/fact-sheets/detail/sexually-transmitted-infections-(stis)

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