¿Es peligroso recibir un golpe en el hígado?

Recibir un golpe en el hígado puede conducir a graves complicaciones en la salud. Una de las más peligrosas es el shock hipovolémico. ¿Cómo actuar ante esta lesión? Te contamos todo al respecto.
¿Es peligroso recibir un golpe en el hígado?
Diego Pereira

Revisado y aprobado por el médico Diego Pereira.

Escrito por Diego Pereira

Última actualización: 31 mayo, 2023

Recibir un golpe en el hígado es algo común en muchas circunstancias, en especial en la lucha libre. Suele realizarse para finalizar un encuentro, debido a la posibilidad de inducir a la hipotensión y al desmayo.

Sin embargo, en un pequeño porcentaje de pacientes estos traumatismos pueden llegar a ser mortales. ¿Te interesa saber un poco más sobre el tema? En el siguiente espacio vamos a responder todas tus dudas. ¡Sigue leyendo!

Información sobre el hígado

El hígado es un órgano intraabdominal que lleva a cabo numerosas funciones vitales para el ser humano. La mayoría tienen carácter metabólico, ya que en este órgano se incorporan y se procesan numerosos nutrientes provenientes de la dieta. Está ubicado en el cuadrante superior y derecho del abdomen.

Debido a esto, la irrigación (cantidad de vasos sanguíneos que llevan nutrientes y retiran desechos) del hígado es abundante. El sistema arterial viene dado por las ramas de la arteria hepática, que a su vez proviene de una rama de la aorta abdominal. El sistema venoso está dado por la vena porta.

Al igual que varios órganos importantes, está cubierto por una delgada capa de tejido conectivo denominada cápsula de Glisson. La inervación del tejido, que proporciona la sensibilidad al dolor por cualquier tipo de irritación, viene dado por varias estructuras, en especial el nervio vago y el nervio frénico.

Todos estos detalles anatómicos permiten entender porqué se produce un intenso dolor al recibir un golpe en el hígado. La estimulación directa de los nervios antes mencionados, así como también el sangrado producto de lesiones vasculares, son capaces de producir intenso dolor.

Causas principales de la contusión hepática

Existen numerosas situaciones en las que puede producirse una contusión hepática. Esta es cualquier lesión que afecte de forma considerable la estructura y función del órgano, sin que exista una herida abierta asociada. Algunas de estas condiciones son las siguientes:

  • Golpe en el hígado como maniobra de boxeo, conocida en inglés como liver punch.
  • Accidentes, en especial los automovilísticos.
  • Situaciones de violencia en general.

De ellos, merece especial atención el liver punch. Se trata de una técnica bien conocida y aplicada en este deporte, y suele utilizarse como golpe final para terminar un combate. Se realiza aquí por estar en un espacio anatómico fácil de acceder y sin demasiada protección ósea, ya que el hígado solo está cubierto de forma parcial por las costillas.

Además, tiene la «ventaja deportiva» de inducir un cuadro clínico conocido como síncope vasovagal. Se trata de una condición en la que el sistema nervioso y cardiovascular responden de forma exagerada a algunos estímulos, lo que provoca hipotensión transitoria, aumento de la frecuencia cardíaca y desmayo.

Este último fenómeno se explica por una disminución rápida de la irrigación cerebral producto de la hipotensión. En la mayoría de los casos, los afectados se recuperan de forma rápida. Un cuerpo debilitado por una lucha de boxeo puede ser más susceptible de sufrir este evento.

Causas principales de la contusión hepática
La causa más frecuente del golpe en el hígado son las peleas de boxeo. Sin embargo, también puede ser el resultado de un traumatismo por accidentes de tránsito o violencia.

Síntomas del golpe en el hígado

Los síntomas dependen de la gravedad del golpe en el hígado, lo que influye sobre las estructuras anatómicas comprometidas. Si se trata de un traumatismo leve, es probable que solo exista dolor a la palpación abdominal sobre el sitio de impacto. Este tiende a desaparecer con el paso de algunas horas, a pesar de que puede requerir el uso de analgésicos comunes.

Además, la lesión de algunas estructuras vasculares pequeñas pueden producir extravasación de sangre hacia los tejidos blandos. El resultado más directo es la formación de un hematoma, que puede tardar varios días en absorberse por sí mismo. No suele requerir tratamiento si se trata de una lesión leve, aunque requiere evaluación médica.

El dolor puede empeorar durante maniobras de esfuerzo en las horas y días siguientes, como sucede al cargar objetos pesados o toser.

Síntomas graves de un golpe en el hígado

Los síntomas graves, por lo general, son el producto de lesiones en vasos sanguíneos importantes, por lo que la consecuencia directa es la hemorragia. Al ser el hígado un órgano tan vascularizado, esta puede avanzar de forma rápida. En consecuencia, la detección prehospitalaria de los síntomas influye en el pronóstico de estos pacientes.

Por lo general, puede existir distensión abdominal, palidez cutánea, fuerte dolor a la palpación en el sitio de impacto (o en todo el abdomen) y aumento de sensibilidad en la zona. Con el tiempo, la pérdida de sangre puede llevar a un cuadro clínico de hipotensión severa denominada shock hipovolémico, que puede comprometer la vida del paciente en cuestión de minutos.

Esta última condición puede identificarse si se presentan, además, los siguientes signos y síntomas:

  • Hipotensión arterial.
  • Aumento de la frecuencia cardíaca (taquicardia).
  • Estado mental alterado, pudiendo aparecer confusión y somnolencia.
  • Extremidades frías.
  • Pulsos débiles.

Tipos de traumas en el hígado

Existen muchas clasificaciones de traumatismos. Una que resulta bastante práctica es la que considera si fue una herida penetrante o no penetrante. La principal diferencia radica en la presencia de lesiones abiertas en la piel a través de la cual se accedió al órgano afectado.

Las heridas penetrantes suelen ser ocasionadas por armas de fuego o armas blancas, y en ellas el sangrado resulta más evidente. Sin embargo, es probable que a pesar de que la lesión deje de sangrar hacia el exterior, todavía se estén generando hemorragias internas difíciles de controlar y que pueden pasar desapercibidas.

En el caso de las no penetrantes, estas son frecuentes en ciertas condiciones como las luchas de boxeo. También son peligrosas, ya que llaman menos la atención en un principio, y puede que no se detecten los síntomas antes de que el shock hipovolémico se haya generado.

Este tipo de hemorragias pueden producirse dentro y fuera del hígado. Si suceden por fuera, se denominan hematomas subcapsulares (ya que aparecen por debajo de la cápsula de Glisson).

Según la clasificación de lesiones hepáticas que utilizan los cirujanos, estas son las menos graves. Aquellas que afectan a los lóbulos hepáticos en su interior son las más importantes.

A veces, el sangrado puede ser secundario a una fractura ósea, en especial las costillas. Puede que uno de estos fragmentos impacte sobre el hígado y lo perfore por dentro.

¿Cuándo buscar atención médica por un golpe en el hígado?

Es recomendable acudir al médico para una valoración en cualquier caso de traumatismo hepático. De acuerdo a los aspectos clínicos, el profesional podría indicar otros estudios complementarios, como los siguientes:

Por supuesto, la mayoría de estos exámenes solo pueden realizarse si el paciente se encuentra estable. En casos de inestabilidad hemodinámica (es decir, que comprometa el sistema cardiovascular y, por ende, la vida) es probable que se opte por intervenciones quirúrgicas con objetivos diagnósticos y terapéuticos.

En caso de presentar cualquiera de los síntomas graves antes mencionados, en especial aquellos relacionados con un shock hipovolémico, debe buscarse atención médica inmediata. Algunos pacientes son más susceptibles de sufrir hemorragias y complicaciones, como aquellos que sufren de hemofilia.

Exploración por TAC
La tomografía computarizada es una de las pruebas sugeridas en caso de golpe en el hígado. Sin embargo, se pueden sugerir otros estudios.

Tratamientos

Este aspecto es controvertido, aunque depende de la gravedad de los síntomas. Por lo general, los médicos podrían tomar las siguientes conductas dependiendo del tipo de traumatismo:

  • Leve y moderado: observación del paciente en el área de emergencia, con controles periódicos mediante estudios complementarios y tratamiento sintomático.
  • Grave: intervención quirúrgica y traslado a una unidad de cuidados intensivos.

La laparotomía exploradora es una técnica mínimamente invasiva que permite la visualización de las lesiones sin recurrir a una exploración abdominal típica. En caso de detectarse lesiones susceptibles de ser resueltas mediante este método, el equipo de cirujanos lo harán durante el procedimiento.

Existe otro método denominado angiografía con embolización. Se trata de un procedimiento que implica la visualización de las estructuras vasculares lesionadas mediante la inyección de un contraste. Después, con el uso de catéteres especiales, es posible colocar objetos capaces de sellar los vasos rotos y sangrantes.

Posibles complicaciones por golpe en el hígado

La incidencia de complicaciones es muy variable, pero aumenta a medida que es mayor el sangrado. Este valor oscila entre un 7 y 25 %, y las principales condiciones clínicas son las siguientes:

  • Fístulas biliares: se trata de la aparición de conductos que permiten la comunicación anormal de dos cavidades, y pueden ser internas o externas. A veces, llevan a importantes trastornos hidroelectrolíticos.
  • Bilomas: es la acumulación de bilis contenida por una cápsula de tejido conectivo, y que puede localizarse tanto dentro como fuera del hígado.
  • Abscesos: es similar al caso anterior, pero implica la acumulación de pus. Es producto de un proceso infeccioso.
  • Shock hipovolémico. 

Recibir un golpe en el hígado sí puede resultar peligroso. A pesar de que la gran mayoría no conlleva a consecuencias importantes, la valoración médica es imprescindible para reducir la mortalidad en pacientes con lesiones graves.


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