Receta de albóndigas en salsa

Tiernas, sabrosas y con una buena salsa para mojar. Nada mejor para un día frío o para colmar el antojo de un plato casero y gratificante.
Receta de albóndigas en salsa

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 14 julio, 2023

Pocos platos son tan universales como la receta de albóndigas en salsa. Es muy habitual preparárselas a los más pequeños, ya que el éxito suele estar asegurado. Pues se trata de una comida que gusta a todas las edades y que incluso se puede encontrar en la carta de muchos restaurantes.

Algunas personas quizás no las preparan porque no conocen la receta o porque piensan que será algo complicado. Si este es vuestro caso, tomad nota que, con unos sencillos pasos, obtenemos un plato como el de los mejores chefs. ¡Empezamos!

Albóndigas en salsa

Existen muchas formas de elaborar esta comida tan universal que son las albóndigas. Hoy en día es posible variar hasta la propia masa. Si bien las de toda la vida se han hecho con carne, en la actualidad se pueden elaborar de pescado, de queso, de tofu o de vegetales variados.

También las salsas que las acompañan admiten algunas variaciones, como las más clásicas de tomate, vino blanco o verduras.

A continuación conocemos esta última y os enseñamos cómo preparar paso a paso una de las versiones más habituales en muchas casas durante décadas.

Ingredientes para hacer las albóndigas

  • 1/2 kilo de carne picada (mitad de cerdo y mitad de ternera).
  • 1 diente de ajo.
  • 100 mililitros de leche.
  • 50 gramos de miga de pan de molde.
  • 2 cucharadas de perejil picado.
  • 1 huevo mediano.
  • Harina para rebozar.
  • Aceite de oliva.
  • Sal y pimienta.

Ingredientes para la salsa

  • 3 zanahorias.
  • 2 cebollas.
  • Media taza de caldo de pollo o agua (125 mililitros).
  • 100 mililitros de vino blanco.
  • Sal y pimienta.

Estas cantidades sirven para unas 4 raciones.

Preparación

  • Empezamos la elaboración de la receta con las albóndigas. Para ello, ponemos el pan de molde a remojar en la leche.
  • En un bol aparte, introducimos el diente de ajo picado fino, la carne, el huevo, el pan remojado (bien escurrido) y el perejil. Sazonamos con sal y pimienta. Mezclamos todo bien para que quede una masa homogénea.
  • A continuación, vamos cogiendo porciones de carne con las manos y les damos la forma redondeada. Pasamos las albóndigas por harina y las colocamos en un plato.
  • Una vez las tenemos todas formadas, calentamos aceite abundante en una sartén y las freímos. Cuando están doradas las retiramos del fuego y reservamos.
  • Acto seguido pasamos a cocinar la salsa. Pelamos y lavamos las cebollas y las zanahorias. Las cortamos en láminas finas y las sofreímos en una cazuela con dos cucharadas de aceite.
  • Cuando tengan un poco de color, añadimos una cucharada de harina y la tostamos durante 1 minuto sin parar de remover. Salpimentamos al gusto, agregamos el vino y el caldo (o el agua). Dejamos que se cocine todo junto durante unos 20 o 25 minutos.
  • Pasado este tiempo, retiramos del fuego, colocamos las verduras en el vaso de la batidora y trituramos. Pasamos esta salsa a una cazuela, incorporamos las albóndigas y hacemos una última cocción de 10 minutos, todo junto.

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Recomendaciones para servir las albóndigas en salsa

Para poder disfrutar al máximo de esta receta es aconsejable comerla al momento. Si lo deseamos, podemos espolvorear un poco de perejil picado para decorar y se pueden comer solas o con algún tipo de acompañamiento.

En muchas casas se presentan con patatas, ya sean fritas, al horno o en puré (muy fácil de hacer en casa). También quedan bien con arroz blanco, guisantes hervidos o coles de Bruselas asadas.

Ahora bien, podemos ser originales y servir las albóndigas en una comida con varias tapas para picar, dentro de un delicioso panecillo o como salsa de un plato de espaguetis. Si se quieren elaborar con antelación, tan solo será necesario calentarlas antes de empezar a comer y servirlas en el último momento, cuando todavía están calientes.

Para hacerlo con seguridad, es imprescindible tener en cuenta los consejos del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos:

  • Refrigerar las albóndigas de forma rápida tras su cocción. No dejar pasar más de dos horas fuera de la nevera y no más de 1 hora si la temperatura ambiente es superior a 32 grados centígrados.
  • Calentarlas de manera suficiente y homogénea antes de consumirlas. Es importante asegurarse que se alcanzan los 75 grados centígrados, como mínimo, en todas las piezas.
  • Si seguimos estas recomendaciones, podemos conservar las albóndigas en el frigorífico unos 3 o 4 días.

Otra forma de preservarlas es en el congelador. En este caso, los especialistas del Gobierno norteamericano, apuntan que pueden aguantar en buenas condiciones entre 3 y 4 meses.

Trucos para cocinar albóndigas de 10

Ya hemos visto que los pasos para preparar esta receta son bastante sencillos y, si se siguen al pie de la letra, no es difícil obtener un plato para chuparse los dedos. Pero existen algunos pequeños detalles que pueden mejorar el resultado final o bien introducir algunas variaciones para obtener unas albóndigas en salsa al gusto.

  • La carne picada puede ser de ternera, de cerdo o una mezcla de ambas. Incluso es posible prepararlas con carne de pollo si se prefiere usar un producto más magro. En el momento de hacer la masa, se puede incorporar una cucharada de aceite y quedarán más tiernas y suaves.
  • Las albóndigas se pueden «rebozar» en harina o en pan rallado. Las diferencias en el resultado final son muy sutiles, así que se trata de una opción personal.
  • A la hora de freírlas es imprescindible dejar espacio entre cada bolita de carne. De lo contrario, pueden perder la forma y no quedar bien cocidas. Si se prefiere evitar la fritura, es posible dorar las albóndigas en el horno. Se cuecen a 180 grados centígrados unos 20 minutos, antes de incorporarlas en la cazuela con la salsa.
  • En esta receta hemos usado el sazonado clásico para la carne picada: sal, pimienta, ajo y perejil. Si se desea un toque diferente, es posible agregar hierbas aromáticas y especias al gusto (comino, canela, nuez moscada o tomillo, entre otros).

Por último, destacamos que este es un plato apto para cualquier edad y ocasión. No obstante, hay que tener presente que, tal como señalan desde la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AECOSAN), es preferible reducir la ingesta de carne a 3 o 4 raciones semanales, dando prioridad al pollo y al conejo.

Dichas recomendaciones (entre otros puntos destacados) se han elaborado de forma reciente y tienen como objetivo la adopción de un patrón alimentario más sano y sostenible.



Disfruta con este plato tradicional de albóndigas en salsa

Se trata de una deliciosa comida casera, sabrosa y reconfortante. Un típico plato «de cuchara», en los que solo son imprescindibles un tenedor y un buen pedazo de pan para mojar.

Tanto si ya las conocías como si no, te animamos a cocinar esta receta que te hemos explicado. Aunque quizás es un poco entretenida, su elaboración no es complicada y el resultado final seguro que vale la pena.


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