Granos en la vagina: causas, tipos y tratamientos
Escrito y verificado por la médica Mariel Mendoza
Los granos en la vulva pueden generar preocupación en las mujeres. Sobre todo, si las protuberancias son dolorosas o resultan incómodas en el roce con la ropa interior.
Pero la buena noticia es que, en su gran mayoría, no representan gravedad. Tanto la foliculitis, como la inflamación de las glándulas de Bartolino y Skene, son procesos que tienden a resolverse por sí mismos. Las infecciones, por su parte, podrían requerir el uso de fármacos.
A continuación, te mostramos una lista de posibles causas de granos en la vagina. Para ser más prácticos, hablaremos de «vagina» como si se tratase de toda la zona genital y no solo de la región interna. Además, considera que debes acudir a un ginecólogo para obtener el diagnóstico preciso.
Dermatitis de contacto
La dermatitis de contacto puede producir protuberancias o granos en la vagina y la vulva por culpa de la reacción alérgica de base. En general, es una sustancia que entra en contacto con la piel de la zona y la irrita.
Los alérgenos habituales de estos casos son las duchas vaginales, las lociones y los jabones con fragancia, las toallas sanitarias, los espermicidas, los condones, los lubricantes, el detergente para la ropa y los baños de burbujas. Pero también hay que considerar la transpiración, el semen y la orina.
Además de los cambios visibles en la piel, habrá picor. El prurito será más o menos intenso, de acuerdo a la mujer y al agente irritante.
¿Qué puedes hacer?
El abordaje de este problema implica medidas para aliviar los síntomas y eliminar la causa irritante. Para ello, usa agua tibia para lavar la zona afectada y evita los jabones perfumados.
Identifica las sustancias que podrían ser las causantes y trata de que no entren en contacto con tu región íntima. Para reducir el picor, recurre a compresas frías.
Foliculitis
La foliculitis es la inflamación e infección de un folículo piloso. Se verá como granos en la vagina tras afeitarse o depilarse, a partir de vellos que se encarnan.
Lo que sucede es que, a medida que comienza a crecer el vello en el folículo piloso, se enrolla hacia la piel o crece hacia dentro. Al día siguiente, se observa una protuberancia con un centro blanco-amarillento por la acumulación de pus, con enrojecimiento periférico.
Genera dolor, picor y sensación de incomodidad. Es común la foliculitis en los labios mayores de la vulva o en la ingle.
¿Qué puedes hacer?
Un posible tratamiento para la foliculitis consiste en la colocación de compresas tibias para disminuir la inflamación. El médico puede recetar cremas con antibióticos.
La falta de mejoría debe seguirse con atención. Existe la posibilidad de que evolucione a un absceso en la zona.
Inflamación de las glándulas de la vulva
Las glándulas de Bartolino y las glándulas de Skene se encargan de mantener el canal vaginal lubricado y con menos bacterias. Como consecuencia de la presencia de microorganismos patógenos o por una mala higiene personal, podrían obstruirse los conductos excretorios, generando un abultamiento.
En general, este grano en la vagina no produce dolor. Incluso, en las mujeres con un absceso por bartolinitis, que sería una complicación del cuadro, solo la mitad manifiesta dolores.
En cuanto a la complicación de una infección en las glándulas de Skene, la frecuencia es aún menor. No hay registros confiables de abscesos en estas estructuras porque suelen pasar desapercibidos.
¿Qué puedes hacer?
Si descubres una grano en la vagina por inflamación de estas glándulas, lo más probable es que desaparezca en unos días de forma espontánea. El aumento de tamaño, el dolor intenso y la presencia de pus deberían ser signos de alerta.
Los abscesos se suelen drenar. Es un procedimiento médico con bisturí y la colocación de una pequeña sonda para extraer el contenido líquido purulento y aliviar los síntomas.
Hongos que causan granos en la vagina
Cuando se presentan múltiples protuberancias en la vulva y en la zona inguinal, con picazón, ardor y enrojecimiento de la piel, debe sospecharse de una infección por hongos. Candida albicans es el agente predominante.
El origen está en un desequilibrio de la microflora de la región íntima. El uso de productos de higiene agresivos e irritantes, la obesidad, la diabetes, las alteraciones hormonales, el consumo de antibióticos y el embarazo son factores de riesgo. También se registra una asociación con el uso ropa íntima inadecuada, de materiales no naturales y muy ajustada.
Es frecuente que los granos en la vagina por hongos se acompañen de una vaginitis. En esos casos, habrá alteraciones del flujo vaginal. Si es cándida el agente, la secreción será blanca, como leche cortada. A su vez, habrá molestias al orinar y al tener relaciones sexuales.
¿Qué puedes hacer?
Es fundamental confirmar el diagnóstico con un profesional de la salud. El médico recetará fármacos antifúngicos, en forma de crema o comprimidos.
A la par, conviene tomar algunas medidas de apoyo. Por ejemplo, evitar los jabones perfumados, las duchas vaginales o los productos que puedan irritar más la piel. También se recomienda usar ropa interior de algodón y evitar las prendas que retienen humedad.
Várices en la vulva
Las várices vulvares o genitales son dilataciones de las venas que se encuentran en el área. Es un problema incómodo y doloroso para algunas mujeres, además de representar una preocupación estética cuando forman granos visibles en la vagina.
Es infrecuente que estas várices se compliquen. No tienden a sangrar ni a lastimarse por el roce.
¿Qué puedes hacer?
En principio, para aliviar la circulación de la zona, trata de evitar largos períodos de pie. Procura elevar las piernas para mejorar el flujo en la zona.
Aplica compresas frías si quieres reducir la inflamación y aliviar el dolor en ciertos momentos. A su vez, no uses prendas que sean muy ajustadas.
Cuando consultes con un médico, el profesional evaluará la gravedad y te recomendará algún tratamiento específico. Algunos medicamentos son antivaricosos y alivian las molestias. También hay procedimientos más invasivos, como la escleroterapia, la ablación endovenosa y la cirugía de extirpación.
Herpes genital
El herpes genital es una infección viral causada por el virus del herpes simple o VHS que representa una de las causas más frecuentes de infección de transmisión sexual. En específico, es el tipo 2 el responsable de la mayoría de los casos genitales.
El VHS se transmite por contacto sexual con una persona infectada. Una vez contraído, permanece en el cuerpo de por vida, aunque puede haber períodos de inactividad y otros en los que se presentan los brotes.
Los brotes comienzan con una sensación de hormigueo, picazón o ardor en la vulva. Luego, los granos en la vagina se observan como ampollas llenas de líquido.
¿Qué puedes hacer?
No existe una cura definitiva para el herpes genital. Un médico puede prescribir antivirales, como el aciclovir, el valaciclovir o el famciclovir. Son útiles para reducir el tiempo de duración de los síntomas.
Granos en la vagina por el virus del papiloma humano
El virus del papiloma humano o VPH ocasiona verrugas que se transmiten por el contacto íntimo sin protección. Si estos granos confluyen en cantidad, producirán una lesión similar a una coliflor.
Hay más de 100 tipos diferentes de VPH y unos 40 son los que tienen potencial para afectar la zona genital. Los de bajo riesgo causan condilomas acuminados, que son lesiones benignas y no cancerosas. Por otro lado, los de alto riesgo generan cambios celulares que pueden conducir al desarrollo de cáncer.
Más allá de los granos, protuberancias o condilomas, hay ocasiones en las que el VPH no lleva a síntomas visibles. En esos escenarios, se puede detectar con un examen de Papanicolaou o una prueba específica para el virus (con cepillado, escobillado y ampliación con secuenciación genética).
¿Qué puedes hacer?
El manejo de las infecciones por VPH depende de varios factores. Para el tratamiento, un médico podrá optar por la observación y seguimiento o la extirpación de lesiones precancerosas (mediante conización o escisión).
En la actualidad, la vacunación contra el virus resulta una medida preventiva eficaz. Pero no es eficiente para personas que ya contrajeron la infección alguna vez. Por eso se indican las dosis antes del inicio de la vida sexual activa.
Molusco contagioso
Esta infección viral puede causar granos en cualquier parte del cuerpo. En su variante genital, se manifiesta con protuberancias pequeñas, elevadas, de color carne o blanco, con apariencia perlada y un hoyuelo en su centro.
El virus molluscipoxvirus, que pertenece a la familia de los poxvirus, es el responsable. Se transmite por contacto directo piel a piel, aunque también por contacto con objetos contaminados.
¿Qué puedes hacer?
Los granos en la vagina por molusco contagioso ceden de forma espontánea casi siempre. Tardan entre 6 a 12 meses en completar su ciclo.
De todas maneras, un médico puede sugerir alguno de los siguientes tratamientos:
- Curetaje: para extirpar las lesiones mediante raspado.
- Medicamentos tópicos: como imiquimod o podofilox.
- Crioterapia: congelación de las lesiones con nitrógeno líquido.
Acné inverso
También conocida como hidradenitis supurativa, esta es una enfermedad crónica de las glándulas sudoríparas. Forma granos recurrentes que contienen pus y no sanan con facilidad.
La causa exacta no está comprendida por completo. Se cree que hay una combinación de factores genéticos, hormonales y ambientales, que derivan en la obstrucción de los folículos pilosos y las glándulas sudoríparas apocrinas. Los antecedentes familiares, el tabaquismo, los cambios hormonales y la obesidad son factores de riesgo.
¿Qué puedes hacer?
Es fundamental consultar a un ginecólogo. El tratamiento del acné inverso en la zona vaginal puede incluir cremas o geles tópicos, antibióticos por vía oral, inyecciones locales de corticosteroides o, en casos graves, terapias biológicas.
Es fundamental llevar una buena higiene genital. Conviene evitar jabones perfumados y se debe secar el área con mucho cuidado.
Aunque puede ser tentador el rascado, no conviene hacerlo. Ello conduce a infecciones secundarias y cicatrices.
¿Se pueden extirpar los granos en la vagina?
No es recomendable intentar quitar los granos o cualquier lesión en la vagina por cuenta propia. Manipular o exprimir la piel genital puede introducir bacterias y causar infecciones secundarias.
Si encuentras granos o protuberancias en tu zona íntima, debes consultar a un ginecólogo. En todo caso, mientras tanto, podrás aplicar medidas caseras con paños fríos hasta tanto obtengas la visita médica.
Tampoco uses productos o tratamientos sin la recomendación de un profesional. Podrían no ser adecuados para el problema específico que estás enfrentando.
¿Se pueden prevenir los granos en la vagina?
Aunque no siempre se pueden prevenir por completo, algunas recomendaciones te podrían ayudar:
- Practica sexo seguro: para reducir el riesgo de infecciones de transmisión sexual.
- Ten cuidado durante el afeitado: emplea crema o gel suave y mantén una técnica cuidadosa para evitar cortes o irritaciones.
- Lleva una buena higiene íntima: lávate suavemente la zona genital externa con agua tibia y un jabón neutro, sin fragancias. Evita el uso de duchas vaginales.
- Usa ropa interior adecuada: prefiere la ropa de algodón que permita la circulación de aire y absorba la humedad. A su vez, cambia rápidamente la ropa que está húmeda, como los trajes de baño mojados.
Aunque no siempre es posible prevenir por completo los granos en la vagina, las prácticas de higiene adecuadas y el cuidado personal reducen el riesgo de desarrollar las lesiones.
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