Los 7 síntomas de infarto femenino que suelen pasar desapercibidos
Revisado y aprobado por el médico Nelton Abdon Ramos Rojas
El infarto agudo de miocardio se produce por una deficiencia de riego sanguíneo en una zona del músculo cardíaco. Tiene lugar casi siempre por la obstrucción en una de sus arterias coronarias. Al principio, este bloqueo provoca un dolor conocido comúnmente como angina de pecho. Si este no se trata oportunamente, podría acarrear la muerte del tejido cardíaco.
Los síntomas más comunes del infarto agudo del miocardio incluyen dolor opresivo en el centro del pecho, que por lo general, se irradia a uno o a ambos brazos y, algunas veces, hacia la espalda. Sin embargo, en el caso de las mujeres, genera señales atípicas que, por ser similares a las de otros cuadros clínicos, suelen pasar desapercibidas.
Quizás por falta de información, se sigue creyendo erróneamente que los malestares en el pecho son la única manifestación del infarto. Por este motivo, hemos querido dedicar este artículo a los 7 signos que deben tenerse en cuenta como posibles señales de alerta de infarto agudo de miocardio. Toma nota.
1. Insomnio
De los casos de infarto femenino analizados en las últimas décadas, más de la mitad de las mujeres afectadas presentaron este síntoma.
El insomnio y los continuos trastornos de sueño pueden ser el resultado del exceso de trabajo, del estrés y del uso excesivo de dispositivos electrónicos. No obstante, en las mujeres, puede manifestarse por cambios en la actividad hormonal y en las etapas iniciales de enfermedades cardiovasculares.
2. Dificultades respiratorias
Las mujeres que de repente experimentan tos y sensación de ahogo sin estar sufriendo en ese momento una enfermedad respiratoria deben consultar al médico de inmediato. La aparición de esta sintomatología es común entre aquellas que están en riesgo de padecer un infarto agudo de miocardio. Si nos detenemos a pensar, ni la actividad cotidiana más exigente tiene por qué provocar tos ni sensación de ahogo.
3. Acidez y reflujo ácido
El exceso de producción jugos gástricos, así como el reflujo ácido, suelen provocar una sensación de ardor en la parte superior del abdomen y el pecho, similar a la que ocurre durante un infarto. No todos los casos conducen a esta grave patología. Mas, el padecerlo frecuentemente podría constituir una señal de posible ataque cardíaco. De ahí la necesidad de acudir al médico para analizar sus causas.
4. Cansancio inusual
Es común relacionar la fatiga o la sensación de cansancio con problemas del sueño, el uso de algunos medicamentos o el estrés. Sin embargo, cuando se convierte en algo recurrente pese a que no tiene aparentemente razón de ser, podría estar apuntando hacia la existencia de un problema circulatorio y cardíaco.
La obstrucción de las arterias coronarias impide el correcta irrigación sanguínea desde el corazón, lo cual dificulta el proceso de oxigenación de las células. Además, dado que el corazón tiene que trabajar más para bombear la sangre, aumenta la presión arterial. Por tanto, también se incrementa el riesgo de sufrir un infarto.
5. Excesiva sudoración y mareos
La sudoración excesiva durante las actividades cotidianas e, incluso, durante el descanso podría ser una señal inicial de infarto en las mujeres. Si bien, al igual que los demás síntomas, puede tener su origen en muchas afecciones, no está de más considerar que pueda guardar relación con esta patología.
Su aparición se debe al sobre esfuerzo que realiza el músculo cardíaco para mantener la temperatura corporal. A su vez, las dificultades del flujo sanguíneo retardan el proceso de oxigenación celular, lo cual es causa de mareos y de sensación de malestar generalizado.
6. Ansiedad repentina
La ansiedad inexplicable es un síntoma al que se le debe prestar la debida atención, sobre todo si está acompañado de pinchazos en el pecho o sensación de vértigo. Muchas de las mujeres víctimas de infarto de miocardio presentaron este síntoma durante las horas previas al ataque. Por otro lado, es primordial considerar que tanto la ansiedad como el estrés incrementan el riesgo de hipertensión. Y, por consiguiente, el de infarto también.
Para ampliar información, te recomendamos leer: El incienso contra la ansiedad y la depresión.
7. Dolor en los brazos y el cuello
Los dolores en las articulaciones, el cuello y la mandíbula comprometen de forma directa el músculo cardíaco. De hecho, son comunes en las mujeres con problemas cardiovasculares. Los hombres también podrían presentarlos, aunque en menor medida. La manifestación de dolor se produce de forma gradual, y suele disminuir un poco antes de la conmoción.
A modo de conclusión
Si bien todos los síntomas antes descritos podrían obedecer a la existencia de otros cuadros clínicos, siempre es necesaria la evaluación médica. Solo así podremos descartar que se trate de señales relacionadas con un infarto agudo del miocardio. Adoptar hábitos de vida saludables y controlar el colesterol y la presión arterial es determinante para reducir el riesgo de sufrir esta grave enfermedad.
Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.
- Abdi, A., & Basgut, B. (2016). “An Evidence-Based Review of Pain Management in Acute Myocardial Infarction”, Journal of Cardiology & Clinical Research, 4 (4): 1067.
- Boie, E. T. (2005). “Initial evaluation of chest pain”, Emerg Med Clin North Am, 23 (4): 937-57.
- Erhardt, L.; Herlitz, J.; Bossaert, L., et al. (2002). “Task force on the management of chest pain”, Eur. Heart J., 23 (15): 1153-76.
- McSweeney, J. C.; Cody, M.; O’Sullivan, P.; Elberson, K.; Moser, D. K., and Garvin, B. J. (2003). “Women’s early warning symptoms of acute myocardial infarction”, Circulation, 108 (21): 2619-23.
Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.