Los estudios lo avalan: debemos volver a la comida casera

Escrito y verificado por el médico Mario Benedetti Arzuza

Escrito por Valeria Sabater

Última actualización: 25 mayo, 2023

Para muchas personas, la comida casera es sinónimo de salud y bienestar. Por ello, varios equipos de investigación han indagado al respecto, para así determinar cuáles son los beneficios que aporta una dieta sana, alejada de la comida chatarra y los ultraprocesados.

Comer en casa no solo ayuda a consumir preparaciones más equilibradas y sanas, sino que ayuda a recuperar el ritual en torno a la mesa que tan bien sienta, en varios sentidos.

Porque al sentarnos en la mesa, junto con nuestra pareja o familia, podemos comer con más calma, degustar con mayor agrado los alimentos e incluso reposar unos minutos sentados, una vez que ya hemos terminado.

Veamos a continuación los beneficios que brinda la comida casera y por qué es importante darle prioridad.

La comida casera permite controlar el peso

A diferencia de lo que ocurre en países como España e Italia, en países como Estados Unidos, la cultura del buen comer es escasa e inapreciable. Por ello, allí existe mayor tendencia a desarrollar malos hábitos alimenticios.

Sin embargo, no todo es positivo en los países del Mediterráneo, tan famosos por tener la mejor dieta del mundo. En los últimos años, en ellos también ha dejado de lado la comida casera y se han adoptado malos hábitos.

La comida rápida es un recurso que ahorra tiempo y satisface el apetito en un momento dado. Sin embargo, no nutre ni sacia las verdaderas necesidades del organismo.

Cuando se consume con regularidad, tenemos:

• Nutrición deficiente.
• Mayor riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares, colesterol alto, etc.
• Mayor tendencia a sufrir de obesidad y sobrepeso, según un artículo publicado en la revista Journal of Preventive Medicine and Hygiene.

Por el contrario, algo tan sencillo como llevar una dieta basada en comida casera, en la que se le dé prioridad al consumo de alimentos orgánicos y saludables ricos en antioxidantes, omega 3 y vitaminas del grupo B, puede ayudar a mejorar la salud y mantener un peso acorde. 

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La comida casera nos hace volver a las buenas tradiciones

Cuando celebramos algo, pensamos de inmediato en reunirnos en un restaurante con amigos y familia. Los niños piden ya ir a los famosos centros de comida rápida para celebrar sus cumpleaños, y son muchos los eventos que llevamos a cabo ‘lejos del hogar’.

Ahora bien, en tiempos de crisis estas prácticas han empezado a limitarse, y con ello, hemos recuperado también esa agradable tradición a la que nos ‘obligaban’ nuestros padres y abuelos: comer en casa.

• Preparar un buena comida casera es una acto de imaginación y cariño que nos invita a ‘vivir el presente’. No hay prisas, solo el afán de ofrecer lo mejor a los nuestros.
• Comer en casa es cómodo. Además, el entorno es amable y estrechamos más los vínculos con los nuestros.
• Realizar una buena comida y saber que ha gustado es todo un placer y un refuerzo para la autoestima.

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La comida casera: un valor y un modelo para nuestros hijos

Según los expertos de la Journal of the American Dietetic Association, comer en casa es un hábito muy saludable para el desarrollo de los niños y en especial para los adolescentes. Es una parte fundamental de la educación alimentaria que ayudará a prevenir la obesidad en un futuro.

La investigación  se llevó a cabo durante 10 años para averiguar si los hábitos alimenticios afectaban de algún modo al desarrollo de los niños. Los resultados fueron los siguientes:

• Comer siempre a la misma hora y en familia, favorecía la comunicación y la relación entre padres e hijos.
• Los niños crecieron más sanos y con menos índices de sobrepeso gracias a la comida casera.
• El hecho de seguir unas rutinas y unos hábitos constantes también ofreció beneficios a los niños a medida que crecían.
• Seguir un modelo saludable como es una alimentación rica en vegetales, fruta y comer en la mesa con la familia hace que los niños sigan esos mismos modelos en la madurez.

Tenemos mayor control sobre las alergias alimentarias

Seguro que a ti también te habrá pasado alguna vez: comer fuera y a las pocas horas experimentar un malestar que deriva, cómo no, en una intoxicación alimentaria.

• La comida casera nos evita muchos de estos problemas: controlamos la calidad de los alimentos, los conservamos mejor y evitamos aquellos productos que sabemos que no sientan bien a los nuestros.
• Algo tan sencillo como comer en casa nos hace controlar más las cantidades que ingerimos, la digestión se lleva a cabo de forma más adecuada y, con ello, la nutrición en general es más óptima.

Una buena comida casera puede prepararse en solo media hora

Si el principal problema que tenemos es la falta de tiempo, no es excusa. Hay platos muy saludables que pueden prepararse en solo media hora. Por ello, vale la pena tener en cuenta lo siguiente:

• Ten siempre la nevera a punto con todo lo necesario.
• Invierte en buenos alimentos: compra frutas y verduras orgánicas
• Ten preparados caldos caseros en tu nevera, de ese modo ahorramos mucho tiempo a la hora de preparar arroces, salsas…
• Ten previsto de un día para otro lo que deseas cocinar.
• Si conservas bien los alimentos o las sobras del día anterior, puede servirte para hacer platos originales y sanos (el pollo del día anterior hoy puede servirte para preparar una ensalada mixta)

Recuerda que la ingesta regular de frutas y verduras es uno de los mejores modos que conocemos para mejorar la salud, según un artículo publicado en la revista Advances in Nutrition.

Comer sano y en casa, es la mejor opción

Sabemos muy bien que la conciliación trabajo-hogar no siempre es posible. No obstante, es posible lograrlo. Hoy en día existen muchísimas recetas sanas y fáciles de preparar en pocos minutos, capaces de satisfacer el apetito, nutrirnos y además, cuidar nuestra salud.

Por último, es bueno que recordemos que la organización es fundamental a la hora de reducir los tiempos de preparación de las comidas. Por ello, intentemos elaborar un plan de comidas semanales y seguirlo para de este modo optimizar la alimentación.