20 plantas que puedes cultivar para tener un jardín comestible

Los huertos comestibles se han convertido en una de las tendencias más atractivas de jardinería. ¿Qué plantas cultivar? Te damos 20 opciones.
20 plantas que puedes cultivar para tener un jardín comestible

Última actualización: 14 febrero, 2024

Aprovechar el espacio exterior de la casa para tener un jardín comestible es una tendencia que ha ganado miles de seguidores. También llamado ‘kitchen gardens’ porque proviene del inglés, consiste en sembrar plantas que posteriormente se pueden aprovechar como alimento o medicina.

La elección de las especies depende en gran medida del clima, los gustos de alimentación y el espacio disponible. Por fortuna, hay una amplia gama de opciones que pueden sembrarse tanto en el suelo del patio como en macetas. Veamos.

1. Caléndula

Una de las plantas favoritas para tener en un jardín comestible es la caléndula. Esto se debe a que puede usarse con fines medicinales y ornamentales. Sus flores de tonalidades amarillas y naranjas llenan de vida y color el jardín.

Estas, al igual que sus hojas tiernas, son comestibles y suelen emplearse en la preparación de infusiones, sopas y ensaladas. De hecho, se destaca por su abundante contenido de quercetina, que actúa como antioxidante y antiinflamatorio.

Uno de los cuidados básicos es que requiere abono frecuente. Además, hay que podarla y ubicarla en una zona del jardín donde reciba suficiente luz solar.

Caléndula

2. Alcachofa

Esta verdura tiene una forma muy particular que le da una belleza exótica. Además, en la cocina servirá para hacer deliciosas recetas, ya sea hervida, horneada o a la plancha.

No soporta bien las heladas, por lo que es importante protegerla. Requiere de suelos profundos para que sus raíces se desarrollen de forma adecuada. Asimismo, es una planta que prospera en un clima mediterraneo.

Alcachofa


3. Manzanilla

La manzanilla tiene unas flores blancas llamativas, que ornamentarán tu jardín comestible. Suele emplearse en la preparación de infusiones medicinales, ya que se le atribuyen propiedades digestivas y antiinflamatorias. Sin embargo, los pétalos de sus flores también se añaden en ensaladas y sopas.

La planta soporta mejor la sequía que el exceso de humedad. Por eso, hay que ubicarla en una zona donde reciba suficiente luz solar, pero también protección contra las lluvias. En este sentido, la mejor opción es tenerla en macetas.

Manzanilla

4. Fresas

Las fresas son una de las frutas más populares en todo el mundo. Además, su llamativo color rojo hace que la planta sea preciosa. Sus características la convierten en una opción ideal para los jardines colgantes. Se recomienda abonarla con regularidad y ubicarla en una zona donde reciba sol de 6 a 8 horas diarias.

Para que crezca saludable, asegúrate de que la tierra tenga un buen sistema de drenaje. Requiere humedad constante, pero no debe permanecer encharcada.

Fresas

5. Tomate cherry

Este tipo de tomate es ideal para hacer ensaladas, sándwiches y salsas. Su particular tamaño hace que su planta luzca muy bonita. Necesita de un clima caluroso y de riegos constantes, pero no abundantes.

Al plantarla, asegúrate de poner un palo en el que pueda enredarse para su crecimiento. Cuando los tomates estén completamente rojos, puedes tomarlos y utilizarlos.

Tomate cherry

6. Albahaca

Uno de los principales usos de la albahaca en la cocina es la famosa salsa pesto. Sin embargo, es una hierba que puede añadirse en pastas, ensaladas, carnes y muchas otras recetas. Además, debido a sus propiedades medicinales, suele prepararse en infusión.

¿Lo mejor? Adornará tu jardín comestible con unas bonitas flores blancas. No es una planta difícil de cuidar, crece muy rápido y tiene un aroma delicioso.

Albahaca

7. Menta

Por su aroma y su sabor es una planta que suele emplearse con regularidad en la preparación de bebidas y cócteles. Además, sus cualidades medicinales se aprovechan contra los trastornos digestivos y la inflamación.

Requiere de un riego continuo y de abono frecuente. No obstante, se adecua muy bien a diferentes tipos de suelo y es muy fácil su cuidado. Por otra parte, es una planta ideal para ahuyentar a los roedores.

Menta

8. Frijoles

Los frijoles son bastante utilizados en la gastronomía de países como México, Brasil y Colombia. Hay múltiples variedades, pero en general se caracterizan por su abundante contenido de vitaminas, minerales, fibra y proteína.

Se recomienda plantarnos en primavera. Requiere de un suelo ligero y con buen drenaje. Además, ha de recibir una fertilización abundante en nitrógeno y potasio. Conviene saber que su cultivo es sensible a la humedad, por lo que hay que evitar el exceso de agua.

Frijoles

9. Arándanos

Los arandanos crecen en pequeños arbustos. Sin duda alguna, cuando es el momento de cosecha, destacan sobre otras plantas por la belleza de sus frutos, cuyas tonalidades varían de rojo a morado. Son bastante recomendados para la dieta, no solo por su versatilidad y sabor, sino por sus cualidades nutricionales.

A través de la Clínica Cleveland, la dietista Julia Zumpano comenta que este alimento es abundante en antioxidantes, vitamina C, vitamina K, manganeso y fibra dietética. 

Respecto a sus cuidados, conviene tener en cuenta que requiere de suelos ácidos. La planta no requiere de abono constante y debe permanecer a la sombra. La tempera óptima para su crecimiento está entre 16 y 25 grados centígrados.

Arándanos

10. Ají

Si te gusta la comida picante, no debes pensarlo dos veces en tener una mata de ají en tu jardín comestible. Además, es una planta con mucha belleza, pues los frutos pueden darse en tres colores: verde, amarillo y rojo.

Se trata de una planta que requiere de mucho sol y de una temperatura que oscile entre los 20 y los 30 grados. Por lo tanto, debe sembrarse en ciudades de clima cálido o, en el caso de países con estaciones, durante la primavera y el verano.

Su riego debe ser constante, pero no debe encharcar la planta, ya que es sensible a los hongos. Es una especie que se adapta muy bien a las macetas.

Ají

11. Cebollín

El cebollino o cebollín produce unas flores lilas llamativas, similares a un pom pom. Por esta razón, tiene un alto valor ornamental. No obstante, su uso en la gastronomía es bastante amplio.

Es una planta que da mucho sabor a las preparaciónes y sirve para aromatizar diversos platos. Prefiere los climas fríos y, por lo tanto, tiene capacidad de resistir las heladas.

Cebollín

12. Lechuga

La lechuga es una de las mejores plantas que puedes cultivar en tu jardín coméstible. Sus hojas son ideales para preparar ensaladas y sopas. ¿Lo mejor? Son bajas en calorías y aportan vitaminas, minerales y antioxidantes.

Su cultivo es sencillo y existe en múltiples variedades. Requiere de un riego abundante y es capaz de adaptarse a climas fríos.

Lechuga

13. Berenjenas

La berenjena es una planta del género de las solanaceas, como los tomates, las papas o los pimentones. Tiene propiedades antioxidantes y aporta vitaminas B6 y B1, así como potasio, ácido fólico y fibra. Se puede preparar de muchas formas; frita, con miel, en chips, al horno con queso, entre otras.

Prospera bien en climas secos y calurosos; esto se debe a que requiere abundante luz solar directa y luminosidad. Asimismo, es conveniente regarla de manera frecuente y proporcionarle abono rico en nutrientes.

Berenjenas

14. Café

La planta de café es bastante atractiva. Da unos frutos llamados «cerezas de café» que adornan el jardín con sus tonalidades de verde a rojo vibrante. Su flor es delicada, de un color blanco que resalta entre el verde.

Aunque su proceso para convertir los granos en la bebida es largo, hay quienes gustan de tener la planta en casa para tener la experiencia de elaborar la bebida artesanalmente.

Café

15. Pimientos

Los pimientos, también llamados morrones o pimentones, son una verdura muy versátil. Se utiliza en preparaciones como sopas, carnes y pescados, ensaladas, guisos, entre otros. La planta en sí soporta temperaturas altas. Su suele requiere un buen sistema de drenaje y abono orgánico.

Planta de pimiento

16. Romero

El romero es uno de las mejores hierbas para hacer adobos de carnes y pescados. Además, tiene aplicaciones a nivel medicinal y cosmético. Se destaca por su particular aroma y sus propiedades.

Durante la época de florecimiento, sus tonos lila adornan el jardín. Requiere abundante luz solar y prospera con más facilidad en climas cálidos. Además, soporta periodos de sequería, aunque necesidad algo de humedad.

Romero

17. Ciruela

La flor de la ciruela es de magnífica belleza. Se trata de árbol frutal —con un tamaño mediano— que arroja estos deliciosos frutos cuyos tonos varían de rojo a morado y amarillo. Se emplea en la preparación de mermeladas, ensaladas y salsas. La planta en sí requiere de luz solar directa y riego abundante.

Ciruela

18. Col rizada

La col rizada, también conocida como kale, es una hoja que se come en diversas preparaciones. Se destaca por su alto aporte de fibra, calcio y antioxidantes. Sin duda, una buena opción para tu jardín comestible.

Sus hojas rizadas tienen una apariciencia llamativa y agradable a la vista. Hay varias especies, en diferentes tonalidades. Requiere luz solar directa, pero tolera bien la sombra parcial. Su suelo debe tener buen drenaje.

Col rizada


19. Naranjo

Si tu jardín es suficientemente grande como para tener un árbol frutal, plantar un naranjo es una de las mejores opciones. Además de tener disponible estas deliciosas frutas que aportan vitamina C, fibra y otros antioxidantes, adornarás el lugar con una hermosa flor de azahar.

El fruto es bastante versátil y lo puedes emplear en postres, vinagretas, zumos, ensaladas y muchas otras recetas. ¿Lo más interesante? No requiere de cuidados estrictos. Se recomienda que reciba abundante sol y abono regular. Lo puedes podar una o dos veces al año.

Naranjo

20. Papa

Aunque no lo parezca, la planta de la papa es decorativa en el jardín. Arroja unas flores muy llamativas de color púrpura o blanco con amarillo. Entonces, mientras disfrutas de un exterior atractivo, en el fondo de la tierra estará creciendo este alimento que puedes incorporar en múltiples recetas.

La planta requiere un clima templado, pero también tolera el frío moderado. Precisa de humedad, pero no tolera los encharcamientos. Se recomienda el uso de fertilizantes con potasio.

Papa

Un jardín comestible puede ser de cualquier tamaño

Como lo puedes notar, las posibilidades para crear un jardín comestible son bastante amplias. No se requiere demasiado espacio, pues es posible adaptarlo a patios, balcones y espacios exteriores pequeños. Las plantas pueden ir directamente en el suelo, o bien, en macetas. Esto depende del sitio y de las especies elegidas.


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