Receta para preparar flan de nuez
Escrito y verificado por la nutricionista Anna Vilarrasa
Si necesitas preparar algo dulce para dar el punto final a una comida con invitados, el flan de nuez es la opción ideal. Que no te engañe su sencillez pues su sabor es exquisito y bien presentado no tiene nada que envidiar a los mejores postres.
Si nunca te has animado a preparar un flan en casa, ha llegado el momento de poner manos a la obra. Verás que se trata de una receta más sencilla de lo que te imaginas. ¿Estás preparado?
Flan de nuez ligero y dulce
El flan es un postre tradicional que a día de hoy cuenta con muchas versiones. De forma general se acepta que su versión clásica se elabora con leche, azúcar y huevos que se cuecen al baño María dentro de un molde caramelizado.
En algunas ocasiones, la masa se puede aromatizar, añadir ingredientes o bien introducir trozos de frutas, galletas o bizcocho más o menos enteros. Así, se obtienen otros postres igual de ricos como el flan de chocolate, de piña o de queso manchego.
La versión que te explicamos paso a paso está hecha con nueces: un fruto seco conocido por sus innumerables nutrientes y beneficios para la salud. Además, en esta preparación le aporta un sorprendente contraste de sabores y una textura muy cremosa.
Se trata de una receta muy fácil de hacer en la que tan solo es necesario mezclar los ingredientes y dejar cocer en el horno hasta el punto idóneo. Por esto, puede ser un postre ideal para las ocasiones y las comidas especiales.
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Ingredientes necesarios para preparar un delicioso flan de nuez
Con estas cantidades se obtienen 8 raciones:
- 3 tazas de leche (750 mililitros).
- 5 huevos.
- 1 taza de azúcar (200 gramos).
- 1 taza de nueces peladas (100 gramos).
- 150 gramos de galletas.
- 1 cucharadita de esencia de vainilla.
Para preparar el caramelo de la base:
- Media taza de azúcar (100 gramos).
- 3 cucharadas de agua.
Proceso de elaboración detallado
- Antes de empezar, encender el horno a 180 grados. Introducir una bandeja con agua. Esta tiene que ser de un tamaño suficiente para poder meter dentro el molde del flan.
- El primer paso es preparar el caramelo para la base. Para ello, colocar un cazo en el fuego e introducir el azúcar (100 gramos) y el agua. Cuando los bordes empiezan a tomar un tono oscuro, mover un poco el contenido para que quede todo bien mezclado y homogéneo. A continuación, verter en el fondo del molde con cuidado de no quemarse.
- Para elaborar la base del flan, cascar los huevos en un bol o recipiente. Mezclar con el azúcar de forma muy suave y hasta obtener una masa más o menos uniforme. Acto seguido agregar la leche y la esencia de vainilla. No es necesario batir, pues no interesa que coja aire.
- Con una batidora o picador de alimentos triturar las galletas y las nueces y mezclar con los ingredientes líquidos.
- Volcar la preparación en el molde con el caramelo y cocer al baño María dentro del horno unos 45 minutos. Para saber si el flan de nuez está en su punto, pinchar con un palillo o un cuchillo afilado. Si sale limpio, el postre ya está listo.
- Dejar enfriar un poco e introducir en la nevera. Lo aconsejable para obtener un postre perfecto es dejar reposar 24 horas en el frigorífico antes de consumir.
Para personas con intolerancia a la lactosa es posible usar leche de vaca sin lactosa o una bebida vegetal de almendras. Además con unas galletas sin gluten también pueden disfrutarlo las personas con celiaquía.
Cómo terminar el flan de nuez
El flan de nuez es un postre que sorprende y gusta por su sabor y textura delicados, pero todo esto se puede estropear si al desmoldar se rompe y no te permite presentarlo de la mejor forma.
Un punto esencial para evitar que esto suceda es esperar a que el flan esté bien cuajado y frío para sacarlo de su molde. Reservar el postre 6 horas como mínimo en el frigorífico es un tiempo ideal para que no se rompa al sacarlo.
En el momento de servir, pasar un cuchillo fino por los bordes del flan. No es necesario llegar hasta el fondo pues la parte que más se pega es la superior. A continuación poner un plato plano en la base del molde y dar la vuelta de forma rápida y firme, como si fuera una tortilla de patatas.
Colocar en una superficie plana y retirar el molde con cuidado. Si todavía se resiste a salir, puede que el problema sea por el caramelo. Para solucionarlo colocar el molde 10 segundos en una bandeja con un poco de agua caliente para ablandarlo. Después secar el molde y proceder a girar como se ha indicado.
Cuando ya está desmoldado, es el momento de presentarlo en la mesa. Existen muchos acompañamientos y decoraciones posibles para disfrutar más y que luzca perfecto.
Una de las posibilidades es servir con nata montada o con un poco de sirope de chocolate por encima. También se pueden cortar unas rodajas de fresas o manzana asada con canela, pues son sabores que combinan bien.
Si tienes más tiempo, reserva unas cuantas nueces partidas por la mitad. Con un poco de agua y azúcar se caramelizan y cuando están secas se colocan encima del flan. Aportan un toque dulce extra y una textura crujiente.
Sea como sea el flan de nuez por sí solo ya es un dulce maravilloso que queda muy bien al final de una comida y seguro que sorprende a todos los invitados.
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