Sales de cetonas: ¿qué son y cómo funcionan?
Escrito y verificado por el nutricionista Saúl Sánchez Arias
Las sales de cetonas son un suplemento que podría tener beneficios sobre la práctica deportiva de tipo aeróbico. Estos ácidos orgánicos que se producen en el hígado podrían servir para generar energía.
De todos modos, las evidencias en la actualidad no son claras al respecto. A pesar de ello, se ha puesto de moda su uso en algunos deportes, como es el caso del ciclismo. Los que las utilizan defienden que cuentan con efectos positivos sobre la utilización de los sustratos energéticos.
Antes de comenzar, es clave destacar que el mercado de los suplementos es muy amplio. Conviene siempre cerciorarse de que se eligen productos de calidad que cuentan con la certificación adecuada.
De lo contrario, podrían correrse riesgos innecesarios. Si se tienen dudas, habrá que consultar con un experto en nutrición deportiva para poder recibir un buen consejo, utilizando las sustancias que más convienen en cada momento.
¿Para qué sirven las sales de cetonas?
Normalmente, se utilizan las sales de cetonas en el contexto de la dieta cetogénica para mejorar, así, la disponibilidad de la energía. Asimismo, se podrían consumir en presencia de carbohidratos para inducir un mayor uso de las propias cetonas como combustible, consiguiendo ahorrar glucógeno y mejorando el rendimiento durante una prueba de resistencia. Ahora bien, las evidencias al respecto son muy limitadas.
Mediante el consumo de cetonas exógenas lo que se consigue es incrementar hasta 1-5 mmol/L de estos compuestos en sangre dependiendo de factores genéticos y del tipo de dieta aplicada. Esto provoca un menor uso de la glucosa como fuente de energía principal. Teniendo en cuenta que el agotamiento de la glucosa del organismo determina la aparición de la fatiga, se podría pensar que por medio de dicha estrategia se retrasará la sensación de cansancio.
No obstante, lo más frecuente es consumir este suplemento en el contexto de una dieta cetogénica. Así, se promueven también las adaptaciones hacia una mayor eficiencia en la beta oxidación de los lípidos, lo que conseguirá aumentar el rendimiento deportivo con el paso del tiempo.
Aun así, no se suele recomendar competir bajo estas condiciones de ausencia de carbohidratos. En líneas generales, a la hora de buscar el máximo desempeño será importante aportar al menos 4 gramos de carbohidratos por kilo de peso al día. Así lo evidencia un estudio publicado en Current Opinion in Clinical Nutrition and Metabolic Care.
En esta misma línea, se encuentran las estrategias de suplementación actuales en el mundo de los deportes de resistencia. Se busca retrasar la fatiga evitando el agotamiento de la glucosa y del glucógeno, pero aportando una cantidad elevada de azúcares en cada hora de práctica de ejercicio. Esto sí cuenta con el apoyo de la ciencia.
Sales de cetonas y recuperación
Además de los efectos comentados, se especula con la posibilidad de que el consumo de sales de cetonas consiga también mejorar la recuperación tras un esfuerzo físico intenso. Esto se debe a que incide sobre determinadas vías fisiológicas con carácter antiinflamatorio. Así, se reduciría el dolor propio de los días posteriores, pudiendo volver a la práctica deportiva con comodidad mucho antes. No obstante, faltan ensayos que confirmen esta propuesta.
De momento, los nutrientes que sí han demostrado incidir de manera relevante sobre los mecanismos inflamatorios han sido los ácidos grasos de la serie omega 3. De hecho, su consumo se asocia incluso con un menor riesgo de lesión de tipo muscular. Hasta cuando se producen los desgarros en el tejido, los requerimientos diarios se incrementan con el objetivo de permitir la vuelta cuanto antes al trabajo.
Existen algunas investigaciones que tratan de dilucidar los efectos de las sales de cetonas sobre los procesos adaptativos del músculo esquelético tras el esfuerzo. Un ejemplo es la publicada en la revista The Journal of Physiology.
De todos modos, no se encuentran resultados concluyentes a día de hoy, a pesar de que algunas rutas fisiológicas tienen sentido. Es preciso seguir analizando su uso para llegar a evidencias sólidas.
Otros suplementos para aumentar el rendimiento
Si bien las sales de cetonas no cuentan con la evidencia suficiente para incluirlas en la pauta de un modo recurrente, existen otras sustancias que sí son capaces de incrementar de manera significativa el rendimiento.
La más consumida de todas ellas es la creatina. Esta consigue mejorar los valores de fuerza máxima y de potencia. Incluso, el consumo máximo de oxígeno podría verse beneficiado. Hasta la composición corporal se verá positivamente afectada.
Del mismo modo, es frecuente la ingesta de cafeína. En este caso, se trata de un alcaloide que modifica la utilización de los sustratos energéticos durante la práctica deportiva.
Lo que consigue es generar un ahorro de glucosa y de glucógeno, oxidando más cantidad de grasas para satisfacer las demandas de calorías. De este modo, se conseguirá retrasar la aparición de la fatiga, además de los efectos que provoca en el sistema nervioso central.
Sales de cetonas, una posible vía para aumentar el rendimiento deportivo
Como has visto, las sales de cetonas son una serie de elementos que podrían ayudar a incrementar el rendimiento deportivo en las actividades de resistencia. Sus efectos serán más significativos en contextos de ausencia de carbohidratos, aunque también es posible su introducción en la pauta cuando se están consumiendo azúcares. Aun así, los resultados a día de hoy no son del todo claros, por lo que su empleo podría suponer simplemente una moda.
Para terminar, hay que tener presente que en el mundo de los suplementos deportivos existen muchas sustancias que se utilizan durante un tiempo determinado y que, luego, dejan prácticamente de comercializarse.
Esto se debe a que con el paso de los años salen a la luz ensayos que evidencian su inutilidad, por lo que los atletas dejan de incluirlas en las rutinas. Por este motivo, siempre es importante estar actualizado o bien asesorado por un profesional.
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