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8 señales de que tu dieta para bajar de peso no está funcionando

8 minutos
El cuerpo es excelente dando señales cuando las cosas no van bien. Mira cómo saber si tu dieta para bajar de peso no está funcionando. ¡Identifica los signos!
8 señales de que tu dieta para bajar de peso no está funcionando
Maria Patricia Pinero Corredor

Escrito y verificado por la nutricionista Maria Patricia Pinero Corredor

Última actualización: 28 noviembre, 2023

Para un nutricionista, es común escuchar en la consulta “me cuesta bajar de peso” “esta dieta no me funcionó”, pero el verdadero problema está en la forma de llevar el plan de alimentación. Por eso es importante detectar las señales de que tu dieta para bajar de peso no está funcionando.

Comentan los expertos que el perder peso depende de la genética, la actividad física, la edad y los hábitos, entre otros. Uno de los más importantes es la conducta hacia la comida y cómo se responde ante ciertas alarmas que indican que algo no anda bien. Prestar atención permitirá corregir y ajustar el plan para favorecer la pérdida de peso.

Aquí te ayudamos a descubrir algunas señales en tu cuerpo que contribuirán a revisar el plan para bajar de peso, mantener el estado de salud y no frustrarte en el intento.

1. Despiertas con cansancio en las mañanas

Si sientes que te falta energía al levantarte, algo no anda bien. El hecho que estés llevando una dieta para bajar de peso no debe significar que estarás débil desde tempranas horas. Lo más seguro es que no estés comiendo de manera equilibrada y balanceada.

Debes revisar, por ejemplo, si estás comiendo exceso de grasa con los frutos secos o semillas o si estás ingiriendo muy tarde por las noches. De ser así, la sugerencia es que sustituyas esos frutos ricos en grasa por vegetales y frutas durante 5 días, así como no cenar después de las 7 p.m.

Una vez que practiques esta recomendación, te vas a sentir con más energía al despertar. Una vez superado el problema, debes retomar la inclusión de grasas en la dieta en porciones pequeñas.

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2. Tienes hambre todo el tiempo

El hambre constante durante todo el día no es lo normal en una dieta para bajar de peso. Se supone que, aunque el plan de alimentación sea bajo en calorías, debe ser balanceado y equilibrado en agua, proteínas, grasas, carbohidratos y fibra para dar la saciedad suficiente.

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Tener siempre hambre no es lo esperable en un plan de descenso de peso. De ser así, hay que revisar la pauta.

3. Picas entre comidas

Pasar de alimentos cocidos y procesados a alimentos crudos genera antojos. Pero si estos se mantienen durante todo el día y se te da por picar entre comidas, se convierte en un problema para el control de peso.

Lo primero que hay que hacer es identificar la causa del antojo. Si es de origen emocional debes buscar a un psico-nutricionista que te ayude. Si la razón es nutricional es porque te faltan ciertos nutrientes o no debes estar comiendo las calorías suficientes.

Se recomienda incluir las frutas que estás dejando de comer, así como los vegetales, pues son fuentes de vitaminas y minerales. Hay que cuidar que la ingesta de grasa no exceda lo calculado, ya que según lo describen algunos expertos, cuando se consume en exceso produce cambios de conducta.

4. Sientes hormigueos

Si tratas de bajar de peso de manera rápida y sin una dieta bien planificada, tu cuerpo dará señales de una falta de nutrientes. Un aviso puede ser un cosquilleo u hormigueo constante en las plantas de las manos y los pies. Esto se debe a la falta de micronutrientes como las vitaminas del complejo B.

De acuerdo a la nutricionista Ritna Ratner, la deficiencia de las vitaminas B9, B6 y B12 se relaciona con problemas en los nervios periféricos. Hay que revisar el consumo de frutos secos, granos y cereales para evitar esta carencia.

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5. Te invade la somnolencia y apatía

El cansancio, acompañado de mucho sueño y desgano, es otra señal que indica problemas con la dieta. En general, estos síntomas se asocian con falta de vitamina C y del complejo B.

El Instituto Nacional de Salud de los Estados Unidos recomienda las frutas frescas como la mejor alternativa para ingerir una cantidad suficiente de ácido ascórbico. Las semillas, granos y cereales brindarán complejo B, que ayuda con el metabolismo energético.

6. Presentas lesiones bucales

La presencia de llagas y heridas en la boca puede alertar sobre deficiencia de vitamina B12. Por eso se recomienda ajustar el consumo de alimentos como las aves, los pescados, los mariscos y las carnes magras. La carencia de este complejo también puede producir anemia.

7. No tienes ánimo para hacer ejercicio

Si el plan de ejercicio está quedando atrás porque no te animas a hacerlo, lo más probable es que te estés quedando sin energía o bien estás comiendo mucha grasa. En general, las frutas y vegetales aportan un tipo de azúcar que se absorbe de manera rápida con las calorías extras para realizar deporte.

Las grasas consumidas de manera excesiva pueden producir agotamiento y obstaculizar la energía necesaria para la actividad física. Por eso, no solo debes revisar el consumo de frutas y vegetales, también debes asegurarte que la energía proveniente de la grasa se mantenga entre 10 a 15 % de las calorías totales.

8. No logras mantener tu peso ideal

Esta señal puede indicar dos cuestiones: que no logras perder el exceso de peso o que estás adelgazando más de la cuenta. En caso de que no logres deshacerte de esos kilos de más, hay que chequear la ingesta calórica calculada para tus necesidades. También hay que revisar si tu estilo de vida está ayudando o no a la pérdida de peso.

Si, por el contrario, adelgazas más de lo recomendado, entonces hay que chequear el plan de ejercicios y comer las calorías suficientes que estás perdiendo con el programa de entrenamiento. Recuerda que no debes dejar de consumir la fuente principal, como frutas y vegetales.

Qué puedes hacer si notas que tu dieta no está funcionando

Si estás buscando el éxito con tu plan de alimentación, sin mayores tropiezos en el camino, entonces sigue estos consejos. Te ayudarán a aumentar la funcionalidad de la dieta que estés haciendo.

Enfócate en el objetivo

Si tu objetivo es bajar de peso, concéntrate en eso. Asume el compromiso de que tu estado de salud depende de ti.

El mejor método es cambiar los hábitos y aprender a comer de forma saludable, asumiendo un nuevo estilo de vida. Elimina todo lo perjudicial y atrae a ti lo que más te beneficia.

Por ejemplo, si dejas que la dieta haga sola su trabajo y llevas una vida sedentaria, será mucho más difícil lograrlo. El ejercicio no solo acelera el consumo de la grasa acumulada en tu cuerpo, sino que también te permite estar en forma. Te aconsejamos un plan de entrenamiento diario asesorado por un especialista.

Evita el autosaboteo

Mírate a ti mismo y date cuenta de todas las excusas que pones para no hacer ejercicio o para dejar de comer algún dulce preferido. Una dieta para bajar de peso requiere de decisiones precisas, sin riesgo a salirte del camino. Concéntrate y comienza ahora mismo.

Huye de las dietas “milagro”

La mejor dieta es aquella que te permite adquirir hábitos saludables al momento de comer. La Sociedad Española de Nutrición Comunitaria establece que una alimentación saludable debe ser equilibrada, variada y armónica.

Las dietas “milagro” resuelven un problema a corto plazo, pero luego se paga con kilogramos de más por el efecto rebote. Asiste con un profesional y olvídate de ellas.

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Hay que ser cuidadosos con las dietas que se venden como milagrosas. La asistencia profesional es clave para llegar a buen puerto.

Lleva una lista al momento de realizar las compras

Una lista con lo que necesitas para mantener una alimentación saludable es ideal para evitar la compra de productos con calorías extras que te pueden sabotear la dieta. Evita la compra de dulces, helados, grasas, azúcares y otros alimentos ultraprocesados.

Distribuye cada comida a través del método del plato

Este método consiste en distribuir los alimentos en el plato de acuerdo a las necesidades y requerimientos. La mitad del plato, por ejemplo, debe destinarse a los vegetales crudos, cocidos o ensaladas.

La otra mitad se divide en 2 partes iguales. Una para los alimentos proteicos, como carnes, huevos, pescados, mariscos y legumbres. La otra parte estará destinada al arroz, la pasta, la papa, el pan y otros carbohidratos. La fruta o cualquier postre lácteo se sirve aparte.

Solicita siempre la ayuda de un profesional al hacer dietas para perder peso

Lo ideal es que la dieta sea conducida por un nutricionista que pueda controlar de manera profesional todo el proceso que permita una alimentación saludable para bajar de peso. Hay muchos factores que considerar para que cumpla su objetivo y al mismo tiempo te mantengas saludable.

Presta atención a las señales del cuerpo que te indiquen que tu dieta no está funcionando. Detente y analiza. Reconsidera cada falla para ajustar la ingesta calórica y pon lo mejor de ti en este camino saludable.


Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.


  • Díaz-Urbina, D., Escartín-Pérez, R.E., López Alonso, V.E. & Mancilla-Díaz, J.M. Efectos de una dieta con alto contenido de grasas sobre patrones conductuales alimentarios. Acta Colombiana de Psicología, 2018, 21(1), 95-105.
  • Nutrición y Salud. Entrevista a Ritna Ratner. Déficit de vitamina B. Disponible en: https://medicina.udd.cl/files/2017/07/vitamina-B-294.pdf
  • Sociedad Española de Nutrición Comunitaria. Guía de Alimentación Saludable. Disponible en: https://www.nutricioncomunitaria.org/es/noticia-documento/19.
  • National Intitutes of Health. Datos sobre la vitamina C. Disponible en: https://ods.od.nih.gov/pdf/factsheets/VitaminC-DatosEnEspanol.pdf

Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.