Ventajas y desventajas de la carne sintética

La carne sintética puede estar pronto en el mercado. Esta tecnología incipiente genera nuevas consideraciones acerca de su relación con la salud, el medio ambiente y la seguridad alimentaria.
Ventajas y desventajas de la carne sintética
Anna Vilarrasa

Escrito y verificado por la nutricionista Anna Vilarrasa.

Última actualización: 06 julio, 2023

Hace tiempo que en el mercado conviven alternativas vegetales a la carne. Y ahora es posible que en poco tiempo compartan espacio con la carne sintética o producida en un laboratorio.

Pero en este caso no se trata de opciones veganas, ya que su producción parte de células extraídas de un animal. Su aparición genera incertidumbre y debates, aportando ventajas y desventajas que es interesante conocer.

La carne de laboratorio como alternativa a la de producción tradicional

El consumo de carne per cápita ha ido en aumento desde 1960 de forma global, aunque con diferencias notables entre países. Su producción tiene un fuerte impacto sobre el medio ambiente y la salud. Y esto ha llevado a los expertos a hacer nuevas recomendaciones al respecto en los últimos años.

También los consumidores han empezado a realizar cambios en sus hábitos de ingesta de carne. En España, por ejemplo, en los últimos dos años el mercado de productos vegetales ha incrementado sus ventas en un 48 %. Además, aumenta su oferta y variedad, tanto en supermercados como en restaurantes.

Por el momento, la carne sintética se quiere presentar como una alternativa viable y positiva para reducir el consumo de carne animal convencional. Pero su desarrollo se encuentra en una fase muy temprana. Su comercialización ha sido aprobada, de momento, en Singapur.

Existen algunas dudas sobre cómo el público va a aceptar estos nuevos productos. Por norma general, todo aquello percibido como no natural genera algunas reticencias. Además, pueden aparecer barreras culturales, éticas y religiosas que deberán ser tenidas en cuenta.

Carne sintética generada en un laboratorio.
Una carne que se genera en un laboratorio. ¿Te animarías a probarla?

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¿Qué es la carne sintética?

La carne sintética es un producto creado en el laboratorio a partir de células madres animales. Estas se extraen de la parte del muslo, ya sea de pollo, vaca o cerdo, y se multiplican en un ambiente controlado. Para que lo hagan de la forma correcta se añaden otros componentes, como mioglobina, tejido conectivo o grasa.

Su introducción oficial se hizo en Londres hace casi una década, cuando se presentó la primera hamburguesa de laboratorio. En este caso, estaba compuesta por 10 000 tiras con miotubos cultivados en un hidrogel. A este se le habían añadido colorantes, sabores e ingredientes para obtener la textura deseada.

Esta tecnología usada para su producción se encuentra todavía en desarrollo. Por este motivo, es difícil conocer con exactitud cuáles serán los métodos de producción comercial y la composición final exacta.

La aspiración de los responsables es la de obtener una carne, lo más parecida posible a la de producción tradicional. Esto atañe tanto a la textura y variedad de los productos finales, como a su composición biológica y nutricional.

¿Qué impactos tiene la producción de carne sintética en el medio ambiente?

En la actualidad, uno de los principales retos alimentarios a nivel global es el consumo de carne y su producción intensiva. Se sabe que existen posibles implicaciones en la salud humana. Pero además, genera un desafío a nivel de sostenibilidad y huella en el medio ambiente.

La organización no gubernamental Greenpeace, con presencia alrededor del mundo, ha señalado estos grandes problemas. Entre ellos destacan la contribución al cambio climático, el acaparamiento de terreno cultivable y la contaminación acuática. También implica concentración económica, falta de respeto al bienestar animal y pérdida de la biodiversidad.

Frente a esta realidad, los impulsores de la carne sintética la presentan como una solución futura. Alegan un menor impacto medioambiental en su producción, pero existen todavía muchas incógnitas y dudas.

Existen pocos estudios más allá del cálculo de emisión de gases con efecto invernadero. Cuando se intentan hacer análisis más profundos, la mayoría de autores concluyen que todavía es pronto para medir el impacto con exactitud.

A modo de ejemplo, Lynch y Pierrehumbert concluyen que “aún no está claro si la producción de carne cultivada proporcionaría una alternativa climáticamente más sostenible. La producción cultivada no otorga una licencia para el consumo ilimitado de carne”.

Ventajas de la carne cultivada

La idea de los promotores de este tipo de productos es conseguir una carne más amigable con el medio ambiente y la salud humana. A su favor defienden los siguientes aspectos positivos:

  • Composición nutricional adaptada para impedir el impacto negativo de la carne roja en la salud.
  • Mayor bienestar animal, pues se necesita una muestra muy pequeña de animal para el desarrollo posterior. Además, el proceso de extracción de células es poco invasivo.
  • Desaparición del uso de antibióticos en la ganadería, con lo que disminuiría la resistencia bacteriana.
  • Menores consecuencias medioambientales en emisiones de gases, uso de agua y tierras.
  • Disminución de las infecciones alimentarias por bacterias intestinales, como Salmonella o E. coli.
  • La carne sintética muestra mayor vesatilidad de presentación, tal es el caso de albóndigas o nuggets.
  • El resultado final es más rentable, ya que su producción reduce los gastos de mantenimiento, transporte y almacenamiento.

La carne sintética también tiene desventajas

Más allá del debate acerca de su impacto en el medio ambiente, existen otros puntos controvertidos en la producción y el posible consumo de la carne elaborada in vitro. Algunos de los más importantes se comentan en un análisis publicado por la revista Nature Communications y se pueden resumir en los siguientes apartados.

1. Problemas económicos

La viabilidad económica de la producción de carne en laboratorios es uno de los puntos controvertidos. A modo de ejemplo, la Universidad de Maastricht desarrolló una hamburguesa en el año 2013 con un precio de costo de 280,40 dólares por unidad. A gran escala, el Consorcio de Carne In Vitro estima que este precio podría ser el doble que el de la carne de pollo.

2. Características organolépticas

Existe una dificultad real para obtener un sabor y una textura parecida a la de la carne de ganadería convencional. Se estima que será uno de los puntos clave para obtener la adherencia de nuevos consumidores.

Para ello, es necesario reproducir el tejido muscular y el adiposo, además de añadir algunos ingredientes saborizantes y texturizantes. Los primeros prototipos imitan productos cárnicos procesados, como hamburguesas o salchichas, pues la dificultad para emular cortes clásicos es mucho más elevada.

3. Valores nutritivos

El contenido nutricional de la carne sintética tampoco puede conocerse por el momento. Parece claro que algunos compuestos, como la vitamina B12, no pueden ser aportados. Sin embargo, existe la posibilidad complementar los productos finales o de realizar modificaciones genéticas.

4. Implicaciones en la salud

La composición nutricional final de la carne de laboratorio y su método de producción pueden afectar la salud humana y la salud pública. Este hecho tiene que ver con la aparición de enfermedades de transmisión animal, infecciosas, problemas de salud relacionados con la dieta (cáncer colorrectal y problemas cardiovasculares) o falta de nutrientes.

5. Seguridad a largo plazo

La producción de este tipo de carne se basa en la reproducción celular acelerada. Esto es motivo para plantear cuestiones acerca de la seguridad alimentaria de productos elaborados con células madre. Asimismo, hay que añadir los factores de crecimiento y otros agentes que se agregan, cuya afectación en el organismo no ha sido testeada.

6. Afectaciones en la ganadería

Existe el riesgo real de terminar con la producción ganadera, en palabras del catedrático de Producción Animal, José Antonio Mendizábal. No solo la cría intensiva, sino también la tradicional o extensiva. Esta se encarga de preservar las razas autóctonas, mantener limpios los bosques, poblar el medio rural y producir alimentos ecológicos de calidad y nutritivos.

Vacas de producción de carne.
La producción cárnica es un tema de debate en el mundo, tanto desde lo alimenticio como desde lo medioambiental.

7. Existen vacíos legales

En la actualidad, no existen regulaciones o protocolos que aprueben la comercialización de la carne sintética. De igual forma, su nomenclatura ha creado gran incertidumbre dentro del sector ganadero. Algo similar a lo que ocurre con la llamada “hamburguesa vegetal”, fabricada sin utilizar productos cárnicos.

Diferencias entra la proteína animal y vegetal

La combinación de proteína animal y vegetal es una de las mayores recomendaciones dietéticas por parte de los profesionales en salud. En este caso, la carne sintética vendría a ocupar un punto intermedio entre las propiedades de ambos tipos de proteínas. Algunos diferencias claras entre la proteína animal y vegetal son las siguientes:

  • La proteína animal tiene todos los aminoácidos esenciales, mientras que la vegetal no.
  • Las fuentes vegetales no se absorben en su totalidad.
  • La carne aporta mayor cantidad de hierro y grasas.
  • Los vegetales contienen fitatos que alteran la absorción de ciertos minerales, como el zinc.
  • La producción animal emite mayor cantidad de gases invernaderos.

Carne sintética: una tecnología nueva con pros y contras

La demanda creciente de productos cárnicos plantea un reto de dimensiones globales. La carne de laboratorio o cultivada se presenta como una alternativa para aquellos consumidores que quieren opciones responsables, sin hacer cambios en su dieta.

Pero por el momento es complicado cuantificar las ventajas y los problemas de su producción, comercialización y consumo. Así como los posibles impactos en la salud de las personas, los animales y el medio ambiente.

Además, existe un gran número de dudas de carácter ético, religioso y cultural que van a impactar de forma directa en la aceptación por parte del público. Por el momento, existen otras alternativas que permiten hacer frente al desafío planteado. Se puede optar por reducir la presencia de carne a través de alternativas vegetales y potenciando otros sistemas ganaderos de cría extensiva.


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