Costillas de cerdo al horno con miel y mostaza, deliciosas y crujientes

Lo mejor de las costillas de cerdo es sin duda alguna la parte crujiente de fuera. ¿Y cómo puede estar mejor que sabiendo a miel y a mostaza? Aunque los dos sabores por separado parezcan que peguen más bien poco, juntándolos se logra una combinación de sabores única. El resultado son unas deliciosas costillas de cerdo al horno con miel y mostaza

Aprende a elaborar esta receta paso a paso para sorprender a tus invitados con una sorprendente mezcla de toques salados, dulces y picantes.

Receta de las costillas de cerdo al horno con miel y mostaza

Las costillas de cerdo al horno con miel y mostaza son un plato exquisito, en el que la carne queda jugosa y se desprende muy bien del hueso. Además, la salsa de miel y mostaza hace que queden de un bonito color dorado, que las hace verdaderamente apetitosas.

Este plato es muy rápido de hacer y es ideal para esas comidas en el jardín o en la terraza con invitados. Si sirves estas costillas de cerdo al horno con miel y mostaza seguro que sorprenderás a tus comensales.

Ingredientes:

Para preparar las costillas de cerdo al horno con miel y mostaza necesitarás:

• 1 ración de costillas de cerdo (800 g)
• 1 cucharada de miel (20 ml)
• 1 cucharada de mostaza (15 ml)
• ½ vaso de aceite de oliva (120 ml)
• 1 cucharadita de salsa de soja (5 ml)
• Sal
• Pimienta negra

Utensilios:

• 1 bandeja de horno
• 1 bol
• Varillas
• Brocha de cocina

Preparación:

• Para empezar, precalentar el horno a 180 ºC y engrasar una fuente con un poco de aceite de oliva.
• Salpimentar las costillas por ambos lados y reservar.
• En un bol aparte, mezclar con ayuda de unas varillas, el aceite, la miel, la mostaza y la salsa de soja. Remover bien hasta que quede una mezcla homogénea.
• Después, con ayuda de un pincel de cocina, pintar las costillas por el lado de la carne y colocarlas en la fuente de horno, con el lado pintado hacia abajo.
• Pintar el lado del hueso.
• A continuación, hornear durante media hora. Pasado ese tiempo, sacar las costillas, darles la vuelta y pintarlas de nuevo con la salsa.
• Volver a hornear durante media hora, pintando las costillas de nuevo a los 15 minutos.
• Pasada la primera hora, subir la temperatura a 200 ºC. Por último, hornearlas hasta que se doren.
• Ya están listas las costillas de cerdo al horno con miel y mostaza.

Datos de interés:

• Dificultad: media
• Tiempo de preparación: 20 minutos.
• Tiempo de cocción: 1 h y 15 minutos.
• Si las costillas fuesen más finas, reducir el tiempo de cocción a 50 minutos y darles la vuelta a los 25 minutos.
• Para acabar, para conseguir una costra crujiente en las costillas, poner el grill en el horno en los últimos 5 minutos, cuidando que no se quemen las costillas por arriba.

Costillas de cerdo a la salsa de miel, mostaza y soja

Ingredientes:

• 1 costillar de cerdo (750 g)
• 3 cucharadas de mostaza de Dijon (45 ml)
• 2 cucharadas de miel (40 ml)
• 5 cucharadas de salsa de soja (50 ml)

Utensilios:

• 1 bol ancho
• Varillas
• 1 fuente de horno
• 1 cuchillo

Preparación:

• Para empezar, en el bol, mezclar la miel, la mostaza y la salsa de soja, batiendo bien con las varillas hasta que quede una mezcla uniforme.
• Introducir las costillas en el bol y dejar macerar durante 15 minutos.
• Precalentar el horno a 200 ºC.
• Sacar las costillas del bol y colocarlas en la fuente de horno, con la carne hacia abajo.
• Después, hornear las costillas durante 25 minutos y darles la vuelta.
• A continuación, echar media taza de agua a las costillas para que se haga la salsa y hornearlas durante otros 25 minutos.
• Por último, separar las costillas con ayuda de un cuchillo y servir.

Datos de interés:

• Dificultad: media
• Tiempo de preparación: 10 minutos
• Tiempo de cocción: 50 minutos
• Si las costillas son más gruesas, se pueden hornear durante más tiempo y darles la vuelta a la media hora de manera aproximada.
• Por último, si sobra salsa, se puede servir con las costillas ya hechas o como acompañamiento para untar las patatas de la guarnición.
• La salsa que sobre también puede usarse como aperitivo, para untar salchichas o patatas, o como guarnición para todo tipo de carnes, a la parrilla o asadas.