Dieta de la remolacha (betabel)

Escrito y verificado por el médico José Gerardo Rosciano Paganelli

Escrito por Valeria Sabater

Última actualización: 09 julio, 2023

Se dice que una de las maneras más eficaces de adelgazar de forma sana y natural es perder peso con la dieta de la remolacha. ¿Qué hay de cierto en esto? Descubrámoslo a continuación.

El betabel encierra un valor calórico moderado y, a su vez, un alto contenido de fibra. De este modo, proporcionaría una sensación de saciedad que limitaría el consumo de otros alimentos que podrían hacernos engordar. ¿Quieres conocer sus propiedades y el tipo de dieta que puedes seguir? Adelante, te lo explicamos.

Propiedades nutricionales

La remolacha es un alimento sabroso, con interesantes propiedades nutricionales. Es una hortaliza energética que suele ser aconsejada en casos de anemia, enfermedades de la sangre y convalecencias, así como para niños y mujeres embarazadas.

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Según los datos de la Fundación Española de la Nutrición, dispone de un interesante contenido de hierro, carótenos, folatos y vitaminas B1, B2, B3 y B6. Para graficarlo con un ejemplo, en el caso de consumieras una taza de remolacha cocida (aprox. 250 gramos), estarías ingiriendo los siguientes nutrientes:

• Calorías: 31 kcal.
• Proteína: 1,5 gr.
• Carbohidratos: 8,5 gr.
• Fibra dietética: 1,5 gr.
• Potasio: 259 mg.
• Fósforo: 32 mg.
• Folate: 53,2 mg.
• Vitamina A: 58,5 UI (unidades internacionales).

¿Cómo elegirla y conservarla?

La remolacha se puede encontrar fresca en los supermercados y se suele vender en manojos. Es mejor que elijas aquellas que estén firmes, redondas, sin manchas y con un color rojo bien intenso. Coge también manojos que tenga las hojas muy verdes —es más fresca— y que tengan las raíces iguales para que al cocinarlas lo hagan de un modo uniforme.

Por el contrario, evita las que tengan forma alargada y de piel escamosa en la parte superior porque pueden resultar más duras, fibrosas y de sabor fuerte.

En cuanto a su almacenamiento, conserva las remolachas frescas en el frigorífico, en el interior de una bolsa de plástico; así duran de dos a tres semanas.

Las hojas de la remolacha, por separado, también han de conservarse en una bolsa de plástico y sin lavarlas. De este modo y en refrigeración, pueden mantenerse de tres a cinco días. Nunca congeles la remolacha cruda, porque se vuelve blanda al descongelar.

¿Cómo prepararla?

Si la quieres comer cruda, puedes rallarla y aliñarla con un poco de aceite y limón. En cambio, si la consumes cocida, será más fácil de digerir.

Para ello, introdúcelas en agua salada hirviendo sin haberlas pelado con anterioridad para que no pierdan su color y sabor. Deben hervirse durante al menos una hora; después podrás quitar la piel con facilidad.

Otra alternativa es comer la remolacha asada. Solo hay que introducirlas en el horno y no sacarlas hasta que estén tiernas. Cocinadas de esta forma, las remolachas conservan casi intactas todas sus propiedades.

Cómo perder peso con la dieta de la remolacha

Recuerda que antes de realizar cualquier cambio fundamental en tu alimentación, incluyendo el inicio de una dieta, debes consultar con tu médico. Nadie mejor que él podrá aconsejarte sobre lo que es mejor para tu salud según tu edad, condición física y necesidades nutricionales.

Si bien no existen investigaciones científicas específicas sobre la acción del betabel para perder peso, se cree que la fibra presente en esta hortaliza ayudaría a disminuir la ingesta de otros alimentos, generando saciedad.

En general, no se suele recomendar seguir esta dieta por más de 10 días seguidos. Asimismo, durante ese tiempo, deberás beber al menos dos litros de agua al día.

 Zumo de remolacha para adelgazar

Este zumo te brindará un conjunto de nutrientes indispensables para tu organismo, además de generar una sensación saciante en el estómago, gracias a la fibra que contiene. Se cree que ayudaría a que tus ansias por comer se reduzcan si lo ingieres antes de las comidas.

 Ingredientes: 6 remolachas, 10 zanahorias, 10 naranjas.

 Elaboración: Batir todos los ingredientes en la licuadora; luego, guardar en un recipiente con tapa en la nevera.

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Menú de la dieta de la remolacha

A continuación, planteamos un ejemplo de un menú que podríamos seguir para perder peso con la dieta de la remolacha. Una vez más, aclaramos que la consulta médica es más que aconsejable para prevenir posibles efectos secundarios.

Desayuno

En ayunas y una hora antes de tu desayuno, ingiere el zumo de un limón. Posteriormente, toma una taza de té o café con leche descremada, una tostada de pan integral con queso magro o un yogur dietético con una cucharada de salvado y una manzana.

 Comida

• Un vaso grande de zumo de remolacha.
• Ensalada: Pepino, tomate, espinacas, lechuga y unos trocitos de nueces; puede condimentarse con aceite.
• Arroz cocido con pollo al horno sin piel; otra opción es pescado al horno.
• 1 naranja.

Cena

• Un vaso grande de zumo de remolacha.
• Sopa de verduras y una berenjena al horno.
• 1 manzana o 1 rodaja de sandía o melón.

Por supuesto, este tipo de alimentación puede tener variaciones, que también incluyen otras presentaciones de la remolacha, como ensaladas o al horno. En definitiva, perder peso con la dieta de la remolacha sería viable solamente si se llevase un estilo de vida saludable, con actividad física regular y un descanso apropiado.

Insistimos: si deseas poner a prueba la dieta de la remolacha para adelgazar, pide cita con tu médico. Coméntale tus deseos de deshacerte de esos kilos de más que tanto te molestan llevando a cabo este cambio en tu alimentación y escucha sus propuestas.