¿Qué son las habilidades blandas?

Revisado y aprobado por la psicóloga Maria Fatima Seppi Vinuales

Escrito por Aylin Stefany Rodriguez Vinasco

Última actualización: 02 octubre, 2023

Hoy en día, hay un gran número de profesionales muy bien capacitados en diversas áreas. Esta es una excelente noticia, pero también es un factor que dificulta a las organizaciones tomar una decisión clara al momento de hacer una contratación. Por ello, se hizo necesario hacer hincapié en otro tipo de competencias más humanas: las habilidades blandas.

Se trata de competencias que se relacionan más con el ser y con la inteligencia emocional. También se le conocen como soft skills. En esta nota vamos a profundizar en cuáles son y cómo pueden ayudarte en el plano profesional y personal.

¿Qué y cuáles son las habilidades blandas?

Para comprenderlas mejor, es necesario tener muy claro qué son las habilidades. Pues bien, hay que decir que este es un concepto que cuenta con múltiples interpretaciones, según lo han relatado expertos en Libraries and the Academy.

No obstante, hay un punto común: las habilidades se relacionan con aquellos conocimientos, destrezas y capacidades que se pueden desarrollar a través de la formación. En otras palabras, hacen referencia al nivel de manejo de una o varias tareas en específico que puedes adquirir.

Cuando ese dominio tiene que ver con conocimientos técnicos y académicos, entonces hablamos de habilidades duras. Algunas de ellas son las siguientes:

• Ortografía.
• Expresión oral.
• Programación web.
• Manejo de contabilidad.
• Dominio de un segundo idioma.

Por su parte, las habilidades blandas se vinculan con la inteligencia emocional y con el modo de relacionarse e interactuar con las personas. Aunque en los últimos años se ha puesto el foco en este tipo de competencias, no hay manera de cuantificarlas, pero sí de identificarlas.

Entre las habilidades blandas que más sobresalen en el entorno laboral, según instituciones educativas como la Universidad EAFIT de Colombia, encontramos las siguientes:

• Liderazgo.
• Negociación.
• Comunicación.
• Atención al detalle.
• Trabajo en equipo.
• Pensamiento analítico.
• Relaciones interpersonales.

Las 10 grandes habilidades blandas

Existen muchas habilidades blandas que son útiles en diferentes contextos. A continuación, mencionaremos algunas y daremos algunas pautas para promoverlas.

1. Habilidades para resolver problemas

Esta habilidad blanda permite reconocer, estudiar y hallar soluciones a los problemas de manera efectiva. Además, brinda las herramientas necesarias para manejar las complejidades y conflictos de la vida personal y profesional. Para potenciarla, practica los siguientes pasos cada vez que estés ante un problema:

1. Define el problema.
2. Haz una lluvia de ideas sobre soluciones alternativas.
3. Evalúa cada solución, descarta las que no son posibles y selecciona las más adecuadas.
4. Implementa la solución.
5. Dale seguimiento al plan de acción que has elegido.

2. Creatividad

Es una habilidad que permite crear ideas, soluciones y productos novedosos, útiles y originales. En cualquier ámbito de la vida, la creatividad siempre es valorada como una capacidad esencial para enfrentar la incertidumbre y los desafíos difíciles.

En un artículo de divulgación, Robert Epstein ofrece cuatro recomendaciones que puedes emplear para fomentar tu creatividad:

1. Registra las ideas creativas que tengas.
2. Involúcrate en actividades que te exijan ser creativo.
3. Adquiere nuevos conocimientos sobre el campo donde quieres desplegar tu creatividad. Esto te ayudará a generar una mayor cantidad de asociaciones.
4. Crea un espacio de trabajo tranquilo que te permite conectar con tu inspiración.

3. Capacidad de trabajar en equipo

Trabajar en equipo requiere de valorar y aprovechar las fortalezas de los compañeros y las propias para lograr un objetivo común. Esta habilidad blanda favorece el crecimiento empresarial y el desarrollo de las relaciones interpersonales. Para incentivarla haz lo siguiente:

1. Practica la escucha activa y expresa tus ideas con respeto.
2. Participa en actividades grupales, así podrás entrenar tu habilidad de trabajar con otras personas.
3. Intenta comprender las ideas y los sentimientos de los demás; en otras palabras, sé empático.
4. Practica la comunicación asertiva para que puedas dar retroalimentaciones respetuosas.
5. Acoge las críticas constructivas sin tomarlas de manera personal agresiva.

4. Habilidades de negociación

Alude al establecimiento de acuerdos o soluciones beneficiosas para las dos o más partes involucradas. La negociación permite construir relaciones saludables y resolver conflictos de manera eficaz. Para desarrollarla, desde Harvard Business School aconsejan:

1. Realiza un seguimiento de tus negociaciones. Evalúa las fortalezas y debilidades que identificas en ellas.
2. Aprende de los errores del pasado. Revisa y reflexiona sobre tus negociaciones anteriores.
3. Busca puntos en común con la otra parte y atribúyeles valor.
4. Desarrolla tu inteligencia emocional para lidiar con los efectos que pueda provocar la negociación. Esta inteligencia también te permitirá reconocer los sentimientos de la otra parte.
5. No seas agresivo, sé asertivo y genera confianza.
6. Identifica oportunidades para mejorar.

5. Autogestión

Gestionarse a sí mismo es una habilidad blanda muy valorada en el contexto profesional y personal. Mediante ella, la persona puede regular sus emociones y acciones en distintas circunstancias. Para potenciarla necesitas:

1. Ser consciente de ti mismo y reflexionar sobre lo que sientes, piensas y haces.
2. Desarrollar el autocontrol.
3. Establecer objetivos claros que marquen una ruta de acción. Esto facilitará que te autocontroles, ya que sabrás qué hacer y qué no.
4. Trabajar en tu autonomía.

6. Gestión del tiempo

Es una habilidad que implica planificar, monitorear y ajustar el tiempo que se invierte o se va a invertir en una tarea. La gestión del tiempo es fundamental para incrementar la eficiencia y la productividad. Para tener una gestión del tiempo óptima sigue estas sugerencias:

1. Crea un calendario.
2. Programa recordatorios.
3. Diseña un horario personalizado.
4. Emplea herramientas de planificación.
5. Prioriza las tareas más urgentes e importantes.
6. Tómate un tiempo de descanso.
7. Busca apoyo social.
8. Sé flexible y realista.

7. Comunicación asertiva

Es la capacidad de establecer diálogos claros, abiertos, directos y respetuosos, donde se defiendan los derechos propios y no se transgredan los ajenos. Sin duda alguna, en todo ambiente laboral y relación interpersonal, esta habilidad blanda es muy demanda. Para desarrollarla debes:

1. Reconocer cuál es la situación, conducta o evento problema.
2. Describir la dificultad de manera, directa, clara, concreta y objetiva.
3. Hablar sin acusar, humillar o culpabilizar al otro.
4. Expresar lo que sientes, piensas y esperas de forma respetuosa y tranquila.
5. Solicitar el punto de vista del otro.
6. Mencionar los resultados favorables que se pueden generar si se produce el cambio acordado.

8. Empatía

Esta habilidad blanda consiste en la comprensión de la experiencia, los sentimientos, creencias y actitudes de los demás. La empatía es fundamental en cualquier tipo de relación, ya sea laboral, familiar, romántica, comunitaria. Para fomentarla, desde The Permanente Journal sugieren:

1. Identificar los sentimientos de los demás.
2. Verbalizar la percepción emocional. Por ejemplo: «Observo que estás triste».
3. Validar las emociones.
4. Reconocer y respetar el esfuerzo de la otra persona por afrontar lo que está viviendo.
5. Brindar apoyo.

9. Sociabilidad

Alude a la habilidad de interactuar con otros de forma amigable. Tanto el desarrollo personal como el profesional requieren del establecimiento de redes sociales y de la relación con otros (jefes, compañeros, docentes, etc.). Las personas necesitan de estos vínculos para avanzar en su carrera y trabajos. Para incrementar tu nivel de sociabilidad ten presente:

1. Amplía tu círculo de amigos.
2. Utiliza las redes sociales.
3. Participa en actividades grupales.
4. Únete a los planes de tus amigos o compañeros de trabajo.
5. Escucha de manera activa en las conversaciones.
6. Habla con respeto.
7. Haz contacto visual.

10. Etiqueta y buenos modales

Esta habilidad blanda permite que los individuos se comporten de manera adecuada en sociedad, siguiendo las normas y las costumbres del lugar. La etiqueta y los buenos modales son valorados por todo el mundo y hacen que la persona sea percibida como educada y respetuosa.

Si quieres aprender sobre este tema y mejorar, te sugerimos estudiar con libros o tutoriales. Antes de investigar define en qué aspecto quieres mejorar, ya que existen múltiples normas de conducta dependiendo del contexto o la necesidad. Por ejemplo, hay etiquetas y modales para saludar, para comer, para interactuar con personas mayores, para pedir disculpas, para vestirse, etc.

Potenciar las habilidades blandas en la universidad y el trabajo

Contrario a las habilidades duras, las blandas se desarrollan a partir de la vivencia de experiencias personales y profesionales a lo largo de la vida. Ello incluye aprendizajes dados a partir del ensayo y el error, que también tienen un alto valor.

Además, una publicación del NAWA Journal of Language & Communication enfatiza la necesidad de agregar, durante la formación profesional universitaria, espacios de desarrollo de las habilidades blandas. Se recomienda que las instituciones incluyan planes para este tipo de educación, en la búsqueda de un mayor bienestar organizacional, minimizando el margen de renuncia.

Otra forma de desarrollar las soft kills es a través de juegos para los empleados, en las reuniones de la compañía. Los participantes pueden identificar su nivel de autoaprendizaje, autoeficiencia y capacidad analítica, así como las aptitudes para el trabajo en equipo, el liderazgo, la toma de decisiones y la resolución de problemas.

Finalmente, otra metodología consiste en el acompañamiento de una persona que ya tiene buenas habilidades duras y blandas. Así, existe la figura de la mentoría o coaching. Alguien es formado por otro que ya posee las características que se quieren potenciar en el aprendiz. Se genera un vínculo humano de retroalimentación constante y constructiva sobre el rol profesional y personal.

¿Por qué son importantes las soft skills?

Las soft skills no solo son importantes en el entorno laboral, sino también en el personal.

En el primer escenario, complementan las habilidades duras o técnicas que se tengan. Esto hace a los profesionales íntegros e idóneos, llevándolos a destacar entre la gran cantidad de candidatos que pueden aplicar a una vacante.

Además, dependiendo del tipo de habilidades blandas que se tengan, los profesionales pueden crecer y apuntar a cargos altos. Por ejemplo, cuando hablamos de un puesto enfocado en el manejo de equipos, no solo se tendrá en cuenta la experiencia, sino el liderazgo, el manejo de grupo, la comunicación asertiva, la toma de decisiones y la flexibilidad.

Quien domine las habilidades duras y blandas, sobresaldrá mucho más.

Ahora bien, hablando del escenario personal, hay que decir en un artículo del DIVULGARE Boletín Científico de la Escuela Superior de Actopan se ha identificado que la ausencia de habilidades blandas también afecta la forma en la que una persona puede relacionarse con otros, más allá de su entorno laboral. Esto, considerando que los vínculos socioafectivos requieren de capacidades humanas muy específicas para una sana convivencia.

Conclusión

Las habilidades blandas son el complemento perfecto para trabajar y relacionarse con las personas. Estas competencias que van desde la capacidad de resolver problemas hasta los buenos modales, aumentan nuestro valor profesional.

En un mundo donde distinguirse es esencial para sobresalir entre las múltiples ofertas laborales, cultivar y perfeccionar estas habilidades es determinante para conseguir el éxito. Además, es esencial para mejorar los vínculos que ya tenemos y crear otros nuevos.