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Los mejores consejos para dejar de tener miedo desde hoy

4 minutos
Lejos de rendirnos o acobardarnos ante los fracasos, debemos tomarlos como un aprendizaje constante para convertirnos en mejores personas. Te contamos todo en el próximo artículo.
Los mejores consejos para dejar de tener miedo desde hoy
Bernardo Peña

Revisado y aprobado por el psicólogo Bernardo Peña

Última actualización: 25 mayo, 2023

La vida se nos presenta sin un manual de instrucciones. No existe un modus operandi que nos garantice el éxito. Cada persona se construye a través de sus propios aciertos y errores, debilidades y valentías. Por eso, debemos dejar de tener miedo y descubrir qué podemos encontrar.

Es cierto que el trayecto no siempre es un camino de rosas. A veces, tras una decisión importante se esconde un pánico atroz a decepcionar a alguien o a hacer el ridículo.

No obstante, el miedo no nos conduce a nada bueno, únicamente nos coarta y nos impide llevar una existencia más feliz y plena. Por ello, vamos a brindarte una serie de consejos para hacerle frente.

¿Por qué debemos dejar de tener miedo?

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Aunque el miedo es una reacción instintiva de supervivencia en el ser humano, si no conocemos su origen y no lo controlamos podemos llegar a sufrir mucho. Este puede nacer de situaciones que nos desbordan o que no tenemos bajo control, y puede aparecer tras vivencias traumáticas o desequilibrios en nuestra forma de gestionar frustraciones, fobias o incertidumbres.

El miedo descontrolado puede llevarnos a estados de pánico o estados de shock. También anula nuestra capacidad de razonamiento, el sentido común y todo pensamiento con lógica. De esta forma, puede llegar a paralizarnos por completo e impedir que reaccionemos ante una situación.

Así pues, nos limita, nos roba tranquilidad y paz interior.

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Combatir el miedo es una actitud ante la vida

No podemos condicionar nuestra vida a un miedo. Por ejemplo, quedarnos en casa por miedo a viajar o estar siempre solos por miedo a conocer nuevas personas es un error. De la misma forma, ¿cuánta gente con ideas maravillosas decide no emprender un proyecto por miedo a arriesgar?

En definitiva, si no tenemos una actitud de progreso personal y nos dejamos devorar por este sentimiento, nos quedaremos estancados tarde o temprano.

Debemos combatirlo, ponerle nombre y enfrentarlo. Hay que tratar de no autoengañarnos y ocultarlos. De hecho, es bueno aprovechar el momento en que se presenta un miedo, ya que es una ocasión para sacar valor y no dejarse arrastrar por él.

Debemos tomarnos el tiempo que necesitemos y fallar las veces que sean necesarias. No hay que rendirse ni entregarse.

Pide ayuda a un profesional

Nadie nace aprendido en esta vida. En ocasiones, los traumas de la infancia provocados por situaciones extremas o muy desagradables requieren de ayuda emocional y psicológica.

Por eso, si estamos en una situación muy complicada que nos impide realizar nuestra vida con normalidad, debemos acudir a un centro psicológico.

A través de diferentes terapias podremos dejar de tener miedo y superar fobias. Además, saldremos con más autoconfianza y fortaleza interior. Puede que la lucha contra esos demonios que cargamos dentro no sea fácil, pero no enfrentarnos a ellos es mucho peor.

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Potencia y fortalece tu autoestima

Todos sentimos incertidumbre al emprender un nuevo proyecto. No existen personas invulnerables o totalmente preparadas. En cierta medida, esto es bueno porque nos hace estar alerta y progresar.

Por eso, no debemos dejar que un miedo nos paralice o nos detenga. El pánico al fracaso nos desvía de nuestro destino, nos hace olvidar o aplazar nuestros proyectos con eternas indecisiones.

Nuestra mente, por instinto, intenta evitarnos una situación que nos pueda producir dolor. Y, por este motivo, construye un miedo para que nos alejemos de ese peligro.

El pánico ante el fracaso, a hacer el ridículo o la importancia del “qué dirán” deben ser entendidos como pruebas individuales de superación, no como una excusa para abandonar.

No trates de forzar situaciones

Aunque es cierto que la única forma de combatir las debilidades es exponiéndose a ellas, no debemos ser ingenuos.

Si tenemos miedo a los lugares cerrados es absurdo encerrarse para tratar de superar el trauma. Si nos dan miedo las películas de terror, no es productivo ponerse una cada fin de semana.

Los progresos en nuestra lucha para dejar de tener miedo deben ser graduales. Además, deben hacerse en situaciones controladas en las que no haya riesgo de que podamos entrar en pánico. Utilicemos el sentido común y la calma.

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Con ayuda, podemos superarlos

Aunque parezca imposible, si contamos con ayuda psicológica, como ya hemos mencionado, el trayecto se nos hará mucho más llevadero. Los miedos pueden entenderse e, incluso, eliminarse. Solo tenemos que tomar conciencia y seguir las pautas que nos indique el profesional.

Lo más importante es que tengamos fuerza de voluntad. No debemos rendirnos a la primera de cambio. ¡Atrevámonos a mejorar nuestra calidad de vida!


Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.


  • Ana Mª Bastida de Miguel, “MIEDOS, ANSIEDAD Y FOBIAS: DIFERENCIAS, NORMALIDAD O PATOLOGÍA” en web Fundación Cadah
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  • Hanna Drimalla, “Miedo a la felicidad”, en Mente y Cerebro, nº73
  •  Rodríguez Biglieri, R. & Vetere, G. (2011). «Manual de terapia cognitiva-conductual para los trastornos de ansiedad». Buenos Aires: Polemos
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Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.