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7 medicamentos para la cistitis: características y contraindicaciones

10 minutos
Los antibióticos son los medicamentos más usados para la cistitis. Sin embargo, existen otras opciones útiles para aliviar los síntomas de la enfermedad.
7 medicamentos para la cistitis: características y contraindicaciones
Franciele Rohor de Souza

Revisado y aprobado por la farmacéutica Franciele Rohor de Souza

Última actualización: 13 agosto, 2024

La cistitis es la inflamación de la vejiga urinaria, que suele ser secundaria a una infección. Se produce cuando ciertos gérmenes, por lo general bacterias, colonizan esta área. Las mujeres son más propensas a padecerla dada su predisposición anatómica.

Entre los síntomas de la cistitis destacan el dolor, ardor y dificultad para orinar, orina turbia o con sangre que puede tener un olor desagradable. En ocasiones, hay fiebre y dolor pélvico. El tratamiento se basa en el uso de medicamentos antibióticos recetados por el médico especialista, además de analgésicos y antiespasmódicos para aliviar el malestar.

El diagnóstico temprano y el tratamiento oportuno de esta afección es crucial para evitar que se haga recurrente. Si te preguntas qué medicamento es bueno para la cistitis, aquí te contamos las características y contraindicaciones de los más utilizados.

Medicamentos empleados en la cistitis

Las infecciones urinarias se encuentran entre los hallazgos más comunes en los consultorios médicos, después de las infecciones pulmonares. De estas, las infecciones del tracto urinario inferior, como es el caso de la cistitis, son las más incidentes.

Entre los tipos de cistitis se encuentran la no complicada y la complicada, de lo que dependerá el abordaje de la condición y los medicamentos a recetar.

  • Cistitis no complicada: Es la más habitual, suele aparecer de manera aguda y es tratable. En la mayoría de los casos aparece por la colonización de enterobacterias como la Escherichia Coli. No obstante, otras bacterias como Proteus mirabilis, Klebsiella pneumoniae y Staphylococcus saprophyticus también pueden provocarla.
  • Cistitis complicada: Se denomina así cuando la infección ocurre en un varón, en una embarazada o en personas con afecciones de salud, como diabetes, insuficiencia renal, cálculos renales, anormalidades anatómicas del trato urinario, entre otros.

En ambas condiciones, el tratamiento de la cistitis está orientado a eliminar a la bacteria responsable y, a su vez, aliviar las molestias.  Las opciones terapéuticas incluyen:

1. Antibióticos

Se trata del grupo de medicamentos de primera elección para tratar la cistitis, ya que se encargan de erradicar la bacteria causal. El médico se basará en los síntomas, si es de aparición aguda o crónica y en los resultados del examen de orina y urocultivo para determinar cuál es el antibiótico más adecuado en cada caso.

Algunos de los antibióticos para la cistitis son los siguientes:

  • Nitrofurantoína (Furantoina, Macrodantina): es uno de los medicamentos efectivos para la cistitis. La posología suele ser de 1 cápsula de 100 miligramos 2 veces al día por 7 días. Actúa contra la Escherichia coli y bacterias grampositivas.
  • Fosfomicina (Monurol): es uno de los fármacos usados en el manejo de las infecciones urinarias. Ataca bacterias grampositivas y gramnegativas, entre ellas Sthaphylococcus aureus. La dosis recomendada es de 1 sobre de 3 gramos en dosis única o cada 24 horas durante 2 días.
  • Trimetoprima-Sulfametoxazol (Bactrim): es la mezcla de 2 compuestos farmacológicos que cuentan con una efectividad especial contra Escherichia coli y otras enterobacterias, causante de cistitis, pielonefritis y uretritis. Su dosis suele ser de 1 o 2 comprimidos cada 12 horas, por al menos 5 días.
  • Penicilinas y cefalosporinas: esta clase de antibióticos actúan inhibiendo la formación de la pared que recubre a las bacterias. Su dosis varía para cada grupo de medicamentos. Aunque no son el tratamiento de primera opción, pueden ser útiles cuando la bacteria causante es sensible a sus componentes. Algunas penicilinas empleadas son la ampicilina y la amoxicilina con ácido clavulánico.
  • Fluoroquinolonas (ciprofloxacina y levofloxacina): no suelen usarse con frecuencia, ya que pueden afectar la flora intestinal. Sin embargo, el médico puede indicarlas en infecciones urinarias complicadas.

Al cabo de unos 3 días de consumirlos, los síntomas de la infección suelen remitir. No obstante, es crucial seguir el tratamiento de manera estricta por los días que indicó el especialista, a fin de prevenir una posible resistencia bacteriana.

Contraindicaciones del uso de antibióticos para la cistitis

La principal contraindicación para la ingesta de los medicamentos antibióticos es la alergia al principio activo, sobre todo con las penicilinas. El consumo de estos fármacos por personas alérgicas puede ocasionar una reacción inflamatoria generalizada que pone en peligro la vida.

Además, las mujeres embarazadas o que amamantan deben consultar con el especialista antes, ya que pueden causar malformaciones fetales y otros problemas en el bebé. Los niños menores de 3 meses y las personas con afecciones renales deberán recibir dosis especiales.

2. Antiespasmódicos

El dolor al orinar (conocido como disuria) y el ardor, suelen ser los síntomas característicos de la cistitis. Esto es provocado por los espasmos que ocurren a nivel de la vejiga y por la inflamación de la misma. Además, pueden generar el tenesmo vesical, que es la sensación persistente de ganas de orinar, aún luego de la micción.

Por fortuna, dentro de los medicamentos para la cistitis se incluyen los antiespasmódicos, que impiden la contracción de la vejiga y vías urinarias, lo que alivia el dolor y reduce la necesidad persistente de orinar. Entre los más utilizados se encuentran:

  • Escopolamina (Buscapina): El médico puede prescribir 1 comprimido de 10 mg, 3 veces al día. Dependiendo de la intensidad de molestia, puede administrarse por vía endovenosa.
  • Flavoxato (Genurin): Este medicamento se indica en el tratamiento de los cólicos de las vías urinarias. Por lo general, debe tomarse un comprimido de 200 mg 3 veces al día o según las indicaciones médicas.

Contraindicaciones

Tanto la escopolamina como el flavoxato están contraindicados en las enfermedades urinarias obstructivas, así como en la obstrucción pilórica y el íleo paralítico. Esto se debe a que disminuyen el peristaltismo natural y empeoran esas patologías. La escopolamina se contraindica además en la miastenia gravis y en el glaucoma de ángulo estrecho.

3. Analgésicos

Otra manera de aliviar el dolor e irritación y la urgencia urinaria que provoca la cistitis es con el uso de fármacos analgésicos. El más utilizado en estos casos es la Fenazopiridina (Uroxacin, Pyridium). Suele indicarse 1 cápsula de 200 mg cada 8 horas.

Este medicamento actúa de manera local en el tracto urinario, por lo que es capaz de aliviar los molestos síntomas de la cistitis. En este sentido, podría ser un fármaco útil y bien tolerado por las personas con cistitis no complicada.

Contraindicaciones

La fenazopiridina está contraindicada en los menores de 12 años. Además, debe usarse con precaución en personas con afecciones hepáticas o renales.

4. Antisépticos

Entre los fármacos útiles para tratar la cistitis se encuentran los antisépticos. Estos son compuestos químicos que se utilizan sobre la piel o las mucosas con el objetivo de inhibir el crecimiento bacteriano. En esta patología, los más utilizados son la Metenamina y el cloruro de metiltioninio.

Ambos compuestos son capaces de eliminar a los gérmenes del tracto urinario, por lo que alivian los síntomas a los pocos días. Además, la metenamina se indica para prevenir la reaparición de la cistitis a corto plazo.

Contraindicaciones

La metenamina no debe usarse bajo ninguna circunstancia en las personas con insuficiencia hepática o renal grave ni en aquellos que tengan acidosis metabólica. Esto se debe a que esos cuadros clínicos pueden empeorar y poner en riesgo la vida del paciente.

5. Antiinflamatorios

Si buscas un medicamento para la vejiga inflamada, los antiinflamatorios no esteroideos (AINES), como el ibuprofeno, pueden ser una opción. Estos se usan como tratamiento alternativo para tratar las molestias de la cistitis no complicada.

Gracias a su mecanismo de acción, disminuyen la inflamación en la vejiga, lo que alivia el dolor y otras molestias al orinar. La efectividad de los medicamentos antiinflamatorios en la cistitis puede verse aumentada cuando se consumen junto a antiespasmódicos, como lo es la escopolamina.

Aunque puedes conseguir medicamentos para la cistitis sin receta médica (como los antiinflamatorios de venta libre) es crucial contar con la aprobación médica antes de su consumo.

Contraindicaciones

Los fármacos antiinflamatorios son seguros para la mayoría de las personas. Su empleo solo está contraindicado en aquellos pacientes que han tenido afecciones relacionadas con el consumo de los mismos, como broncoespasmos, urticaria o hemorragias digestivas.

6. Vacuna para las infecciones urinarias

Existen métodos de inmunización útiles para prevenir la cistitis, tal es el caso de la vacuna conocida como Uro-vaxom ®. Se trata de comprimidos que contienen más de 10 cepas de Escherichia coli, que como ya se mencionó, es el principal causante de infecciones urinarias a nivel mundial.

El medicamento tiene la capacidad de activar al sistema inmunitario para combatir la colonización e invasión por estas bacterias. Este podría ser un tratamiento seguro y eficaz para prevenir las infecciones urinarias recurrentes.

Contraindicaciones

La vacuna en forma de comprimidos es uno de los medicamentos más seguros de toda la lista y su única contraindicación es la alergia a alguno de los componentes del fármaco. Se deberá suspender su toma si se observa alguna reacción cutánea, como urticaria, edema o fiebre.

Su efectividad en niños menores de 4 años aún no se ha demostrado.

7. Otros medicamentos para la cistitis

Todos los medicamentos mencionados con anterioridad son útiles en la cistitis aguda, sin embargo, las opciones terapéuticas para los casos crónicos o recurrentes pueden variar. La cistitis intersticial es una de las variantes más graves, por lo que su abordaje debe ser más agresivo, combinando las siguientes opciones:

  • Antihistamínicos: disminuyen la frecuencia urinaria. Uno de los medicamentos de este grupo es la loratadina.
  • Polisulfato sódico de pentosano: se cree que protege las paredes internas de la vejiga de los irritantes, aunque su mecanismo de acción no es del todo conocido. Disminuye el daño al órgano y permite aliviar el dolor al orinar.
  • Antidepresivos tricíclicos: gracias a su afinidad por múltiples receptores, permiten relajar la vejiga y bloquear el dolor, proporcionando alivio. Los fármacos empleados en este caso son la amitriptilina y la imipramina.

¿Qué remedios caseros son buenos para la cistitis?

Existe una variedad de remedios caseros para la cistitis que pueden resultar útiles para prevenir y controlar esta afección. Sin embargo, es importante recalcar que no sustituyen a los medicamentos indicados por el médico, sino que sirven como un complemento a estos. Algunos de ellos son:

1. Arándanos rojos

La actividad antimicrobiana de los arándanos rojos puede ser de gran ayuda a la hora de combatir la cistitis y disminuir sus manifestaciones. Además, puede utilizarse como un tratamiento adyuvante para prevenir infecciones urinarias en poblaciones susceptibles (mujeres, pacientes con edad avanzada, personas con catéteres, etc)

Para tratar la cistitis o para prevenir su aparición, puedes consumir arándanos rojos en cualquiera de sus presentaciones (cápsulas, sobres o jugo). La dosis y frecuencia de consumo varía de acuerdo a la opción que se elija.

2. Diente de león

El diente de león es una planta a la que se le atribuyen distintas propiedades, entre las que destacan su poder diurético, antiinflamatorio y antibacteriano.

En ese sentido, podría ser eficaz para controlar la proliferación de algunas bacterias causantes de infecciones del tracto urinario, como Staphylococcus aureus, Escherichia coli y Klebsiella pneumoniae.

Para aprovechar sus beneficios, puedes consumir diariamente una infusión de diente de león o un suplemento que lo contenga. Eso sí, ten la precaución de no excederte de 2 semanas de consumo.

3. Perejil

El perejil es una planta reconocida por sus propiedades diuréticas. Consumirla en forma de infusión aumenta el volumen de orina y estimula la micción. Esto ayuda a barrer las bacterias que se encuentren en el tracto urinario y a prevenir su colonización.

4. Cuidados para tratar la cistitis

Además de probar algunas infusiones para la cistitis y suplementos, es necesario tomar en cuenta algunas recomendaciones que ayuden a disminuir los síntomas y que sirvan de complemento al tratamiento indicado por el especialista, entre estos:

  • Colocar compresas tibias sobre la parte baja del abdomen para aliviar el dolor y la presión que caracteriza esta condición.
  • Beber abundante agua. 
  • Limitar el consumo de bebidas irritantes, las gaseosas y los jugos cítricos.
  • Evitar la ingesta de café y alcohol.
  • Procura orinar con frecuencia.

Múltiples opciones para una misma afección

Como ves, existe una gran variedad de medicamentos para tratar la cistitis. La mayoría de ellos tiene como objetivo eliminar al agente causal. Sin embargo, también hay compuestos empleados para reducir y aliviar los síntomas.

Aunque hay pastillas para la infección de orina sin receta, antes de utilizar cualquiera de las opciones que te contamos, siempre es recomendable acudir con el médico y seguir al pie de la letra sus indicaciones. Este profesional basará el tratamiento en el agente causal y en la condición de cada persona.


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